El incremento en 2008 será superior a los 7.000 internos y deja obsoletos los planes de Interior de tener disponibles en 2012 unas 1.200 celdas más. La alerta ha saltado en la Secretaria General de Instituciones Penitenciarias: las cárceles españolas viven el mayor aumento de presos de la historia de la democracia. Nunca desde la […]
El incremento en 2008 será superior a los 7.000 internos y deja obsoletos los planes de Interior de tener disponibles en 2012 unas 1.200 celdas más.
La alerta ha saltado en la Secretaria General de Instituciones Penitenciarias: las cárceles españolas viven el mayor aumento de presos de la historia de la democracia. Nunca desde la creación el moderno sistema penitenciario tras la muerte de Franco el incremento de la población penitenciaria había sido tan marcado. Sólo en los ocho primeros meses del año la colonia reclusa en los 79 centros del país ha crecido en 4.740 miembros y se espera terminar el año con algo más de 7.000 nuevos internos.
Las cifras son inquietantes, incluso para una dirección de prisiones acostumbrada a continuas malas noticias sobre el hacinamiento. De seguir a este ritmo, 2008 doblará sobradamente el crecimiento del año anterior, cuando el colectivo subió en 3.079 personas. Sólo entre enero y agosto ya se ha superado en un 53 por ciento el total del año pasado. Según los datos del sindicato mayoritario de prisiones, ACAIP, coincidentes con las propias estadísticas oficiales del Ministerio del Interior, 2008 superará con creces (casi doblará) el peor año de la historia reciente de las cárceles españolas, que fue 1991, cuando la colonia de personas presas en España se incrementó en 4.799 personas.
Las cifras dan cuenta de la magnitud del problema en los últimos meses. Mientras que entre 2004 y 2007 la población penitenciaria creció a un ritmo medio de 7,5 presos más al día, entre enero y agosto de 2008 esa cifra se ha disparado hasta 19 internos más cada 24 horas, un aumento que, según los propios responsables penitenciarios, jamás se había alcanzado en períodos tan prolongados.
Ese crecimiento exponencial de un año para otro ha provocado que en sólo ocho meses el colectivo preso haya aumentado en más de un 7 por ciento, pasando de los 67.100 a 31 de diciembre a 71.840 el pasado 5 de septiembre, últimos datos oficiales disponibles. En todas las comunidades, excepto en el País Vasco y Murcia, ambas autonomías con graves problemas de infraestructuras penitenciarias, la población ha crecido.
Destaca Baleares con incremento de casi el 25 por ciento de la población en ocho meses, seguida de Galicia con un 12 por ciento, Castilla y León con más de un 10 y Andalucía con un 9,4 por ciento.
De acuerdo con los datos de ACAIP, esta sobreocupación ha provocado también un fuerte deterioro en la calidad de servicio, sobre todo porque el número de funcionarios no ha aumentado en igual manera. En los últimos ocho años la ratio número de internos/funcionarios de prisiones (usada en toda Europa con el índice más importante de calidad) ha aumentado de 2,02 a 2,65.
Obsoleto
El crecimiento desproporcionado de la colonia penitenciaria en 2008 ha dejado obsoletos los planes de amortización de centros del Ministerio del Interior, antes incluso de nacer. El programa de Instituciones Penitenciarias pasa por contar en los próximos tres años con 12.800 celdas de las nuevas cárceles de Málaga, Ceuta, Valencia, Gran Canaria, Murcia, Guipúzcoa, Navarra, Álava, Soria, Fuerteventura y Mallorca. A esta cifra habría que restar, no obstante, las 891 celdas que se perderían en con el cierre de las vetustas instalaciones de San Sebastián, Pamplona, Vitoria, Soria y Ceuta. En total, serían 12.000 celdas más a finales de 2012 cuando, de seguir a este ritmo, la población penitenciaria para entonces habrá crecido en casi 30.000 personas.
Los expertos, además, recuerdan que la situación ya venía muy deteriorada de años anteriores. Entre 2003 y 2007 la población en los centros dependientes del Ministerio del Interior (Cataluña tiene transferidas las competencias) se incremento en 9.085 reclusos, una cifra que el medio penitenciario se vio obligado a absorber con la única apertura en 2006 del centro de Puerto III, en Cádiz, con 1.008 celdas. En esta legislatura se han abierto, aunque apenas comienzan a funcionar, otros tres centros tipo (Estremera-Madrid, Albócasser -Castellón y Moron-Sevilla) con otras 3.000 plazas, una oferta, reconocen los propios técnicos, que ni siquiera sirve para hacer frente al crecimiento experimentado durante los tres primeros trimestres de este año.