Traducido para Rebelión por Daniel Escribano
Abandonó el gobierno municipal porque la alcaldesa de Mondragón no rechazó el asesinato de Isaías Carrasco, pero no se ha unido a los esfuerzos para quitar la alcaldía a ANV y le han cantado las cuarenta por ello. Ander Rodríguez (San Sebastián, 1982) sólo tiene 25 años, pero mira al «espejo de la historia» para explicar la posición de EB de Mondragón en el conflicto de las mociones de censura contra EAE-ANV: en 1997, después del asesinato de Miguel Ángel Blanco, el PNV, el PSE-EE y EA presentaron una moción censura contra el alcalde Xabier Zubizarreta; los concejales de EB se abstuvieron y el entonces coordinador general de IU, Julio Anguita, les telefoneó, les pidió explicaciones y, al final, les mostró su apoyo; los votos de EB, empero, no eran decisivos y la moción de censura prosperó. Fue una experiencia para no repetir, en palabras de Rodríguez: «en el ámbito social fueron tres años repugnantes; un paso atrás, desde el punto de vista social. Además, aumentó la victimización de la izquierda abertzale y en las elecciones siguientes obtuvo los mejores resultados de la historia, con nueve concejales». La conclusión: «camino trillado, experiencia fracasada… camino equivocado».
Además de concejal en Mondragón es miembro de las Juntas Generales de Guipúzcoa y de la Presidencia de EB. Pero ha preferido realizar la entrevista en la sede de las Juntas Generales que en la de EB. Ander Rodríguez ha hablado con Berria antes de que el juez de la Audiencia Nacional española Baltasar Garzón tomara declaración y encarcelara a la alcaldesa de Mondragón, Ino Galparsoro.
¿Como consecuencia de qué reflexión han decidido no apoyar la iniciativa para quitar la alcaldía a Ino Galparsoro a pesar de que la dirección de vuestro partido se lo pidiera?
Hay que aprender de la experiencia fracasada de 1997. No podemos dar cheques en blanco. No podemos participar en una alternativa que no sabemos qué dirección quiere tomar en política municipal. El PSE-EE se ha limitado a pedir apoyo, sin proponer proyectos de gobierno. No nos han concretado qué política municipal quieren realizar en los próximos tres años. Además, empezamos con malos mimbres si el alcalde, en lugar de elegirlo los representantes de la ciudadanía de Mondragón, lo eligen las direcciones de los partidos políticos en una reunión del Parlamento vasco. La ciudadanía dio su confianza hace 11 meses a unas siglas determinadas y no pensamos que la partitocracia deba absorber la soberanía popular. Por eso hemos hecho una propuesta concreta: que le vuelvan a preguntar.
¿Qué tipo de consulta proponen?
Una pregunta simple. La lista más votada ahí esta, la de la alcaldesa, y ahora hay una alternativa que se presenta a la alcaldía, la del PSE-EE. Que la ciudadanía elija entre ambas candidaturas. Tomamos el compromiso de respetar la decisión. ¿Por qué no atiende nadie a nuestra propuesta? Si debe imponerse de nuevo la democracia en Mondragón, ¿decidirán las direcciones de los partidos quién será el alcalde? ¿O debe decidir la ciudadanía si Ino Galparsoro ha de seguir o no?
A pesar del rechazo de la «moción ética», el PSE-EE está intentando sacar adelante la moción de censura. ¿Hay alguna posibilidad de que ponerse de acuerdo mediante la negociación y que apoyen finalmente la moción de censura?
En esta situación esa opción está totalmente descartada.
A su juicio, después del asesinato de Isaías Carrasco, ¿hay necesidad de cambiar algo en el Ayuntamiento de Mondragón?
A nuestro juicio [la posición de EAE-ANV] merece el mayor rechazo político. Y, en efecto, hemos sido los únicos que hemos materializado ese rechazo político en una acción política: hemos roto el acuerdo de gobierno, porque pensamos que EAE-ANV no ha respetado ese acuerdo. En nuestra opinión, el compromiso con los derechos humanos recogido en el principio del acuerdo exigía rechazar el atentado.
¿Rompieron el acuerdo convencidos de que debían obrar así o influidos por presiones externas?
Totalmente convencidos. No es verdad que la dirección de EB-Berdeak nos obligara. A pesar de que el coordinador general, Javier Madrazo, haya dicho eso, en modo alguno es cierto. Ambos sabemos que los desacuerdos eran sobre el ritmo y el ámbito de decisión. Queríamos que rompiera el acuerdo el mismo órgano que lo ratificó, en la reunión del lunes de la asamblea conjunta de EB-Zutik. Pensamos que EAE-ANV ha vulnerado de forma grave el acuerdo de gobierno, teníamos que mostrar ese rechazo político público y eso mismo se decidió en la asamblea del lunes [10 de marzo, tres días después de la muerte de Isaías Carrasco], después de un debate de alto nivel.
¿Qué tal las relaciones con la dirección de EB?
¿Con qué parte de la dirección? Yo también soy miembro de la dirección de EB.
Con la parte que está diciendo que no están siguiendo los criterios de EB.
Nunca llevo los desacuerdos políticos al terreno personal, no me parece adecuado.
Hablaba de las relaciones políticas.
Estamos en una situación algo grave. No estamos de acuerdo con la decisión adoptada por la dirección de EB ni con la intención de cambiar las reglas del juego a mitad de partida. Puesto que el 2 de junio todavía estaremos a mitad de partida y quieren cambiar las reglas del juego.
¿Habla de la intención de cambiar los estatutos internos de EB en la asamblea del 31 mayo y el 1 de junio para que decisiones como las de Mondragón pueda tomarlas la dirección?
Sí. Que el voto de investidura de un alcalde o que la decisión tocante a un gobierno municipal, en lugar de tomarla la asamblea popular, la tome la dirección no garantiza que la decisión sea mejor ni tampoco que sea peor. Pero se reducirá la democracia, se compadecerá en menor medida con las opiniones de los militantes de base.
¿Cree que llegarán a modificarse los estatutos?
Como la VII Asamblea de EB se realizará de la forma que se realizará, sí.
¿Qué quiere decir con «como se realizará de la forma que se realizará»?
Como se está realizando de la manera que están haciendo el procedimiento de elección de los representantes, es muy probable que se cambien los estatutos.
Podría ocurrir, por tanto, que después de modificar los estatutos, a principios de junio, la dirección de EB decida apoyar la moción de censura de Mondragón y les ordene cumplir esa decisión.
Creo que es muy posible.
¿Cómo actuarán en ese caso?
Tendremos que tomar una decisión. No adelantaré acontecimientos, empero.
Gaspar Llamazares ha dicho que están fuera de IU y que tienen la sensibilidad de una almeja.
Acostarse mamífero y levantarse con doble concha. Curioso.
Que yo sepa, EB no está dentro de IU…
Que yo sepa, tampoco. EB-Berdeak es una organización soberana y participa voluntariamente con IU en un proyecto estatal. IU no nos puede expulsar. Y lo de la almeja me parece de mal gusto. Reivindicamos el derecho a ser escuchados. Nos han criminalizado, nos han dado leña, nos han linchado, etc. Nos han telefoneado muchos militantes de EB-Berdeak y de IU para preguntarnos sobre nuestro análisis político, para preguntarnos por qué hemos llegado a esta conclusión y hemos escrito páginas y páginas sobre esta cuestión. Pero no nos ha llamado nadie de la organización federal para preguntarnos por qué hemos llegado a esta conclusión. Los concejales sólo somos la voz y la cara de la asamblea. ¿Qué harán, expulsar a toda la asamblea de Mondragón? ¿A la de Hernani también? Y a más gente, porque es muy probable que no seamos los únicos pueblos que recurran a la abstención.
En Villabona, Legazpi y Pasajes la postura de los concejales de EB también será decisiva. ¿Sabe qué votarán?
La reflexión la debe realizar cada asamblea. Sé que algunas la han hecho, pero no me corresponde a mí explicarla. El análisis de Mondragón está hecho desde la perspectiva municipal, pero hago la misma reflexión desde el punto de vista de la normalización y la pacificación y también la hago en la Presidencia de EB. Esto es, ¿a dónde nos lleva este camino? Las mociones de censura son una piedra en este camino, pero la piedra de al lado es el caso 18/98, otra piedra es la Ley de partidos y en el mismo camino está también Egunkaria. No, esto no es una iniciativa excéntrica. Responde a algunos impulsos políticos determinados en una dirección política determinada.
¿Cree que el hecho de que Garzón haya citado a la alcaldesa Galparsoro tiene relación con el rechazo a la moción del PSE-EE y el PNV?
Fue sorprendente que la oficina de prensa de Garzón anunciara que citaría primero a la alcaldesa de Hernani y después rectificara diciendo que citaría a Galparsoro. Nosotros siempre hemos criticado ese tipo de imputaciones. Y creo que tiene relación. Cuando decimos que no queremos ser partícipes de nuevos impulsos políticos hablamos de eso: esta intención de imputación es señal de otro impulso político.
Berria, 1 de mayo de 2008
http://www.berria.info/testua_ikusi.php?saila=harian&data=2008-05-01&orria=009&kont=007