La caridad de Amancio Ortega con la sanidad pública contrasta con las 74 filiales del grupo textil que tributan en plazas ‘offshore’
Los 300 millones que el multimillonario Amancio Ortega ha donado a través de su fundación a la sanidad pública española para equipamiento contra el cáncer son sólo la mitad de los casi 600 millones en impuestos que la compañía de Zara ha eludido con ingeniería fiscal, según un informe presentado por los Verdes en el Parlamento Europeo en 2016.
La caridad de Amancio Ortega con la sanidad pública de España ha saltado al primer plano de la actualidad política y electoral de este país tras el cruce de acusaciones entre dirigentes de Podemos con otros de Ciudadanos y Partido Popular. La iniciativa del multimillonario gallego contrasta con las conclusiones de sendos estudios, del Observatorio de Responsabilidad Social Corporativa (RSC) y los Verdes para el Parlamento Europeo, en los que se constata que 74 filiales del grupo textil Inditex se ubicaban en plazas offshore en 2015 y que ha eludido el pago de casi 600 millones de euros en impuestos entre los años 2011 y 2014 gracias a sus empresas filiales en Holanda, Irlanda y Suiza.
Ortega, de 82 años y sexta riqueza del mundo por segundo año consecutivo según la revista Forbes, suma un patrimonio de 57.200 millones de dólares gracias a su compañía Inditex. Desde 2015, a través de su fundación ha donado al sistema sanitario público de este país un total de 300 millones de euros para equipamientos de última generación contra el cáncer. Ese mismo año, un informe del Observatorio de RSC, una organización sin ánimo de lucro que realiza trabajos sobre la transparencia fiscal de las grandes empresas españolas según la información que elevan a los inversores y la CNMV, concluyó que el grupo Inditex tenía 74 sociedades domiciliadas en países y territorios considerados paraísos fiscales o nichos fiscales. Además, está presente en dos paraísos fiscales según los criterios de la OCDE, Macao y Mónaco.
En cambio, si se toman como referencia los criterios del Parlamento Europeo o la red Tax Justice Network, que elabora un exhaustivo listado de nichos fiscales, la presencia de la multinacional textil de origen español se dispara, con filiales en Delaware (EEUU), Irlanda, Holanda, Suiza, Hong Kong (China), Luxemburgo, Montenegro, Uruguay, Puerto Rico, Macedonia, Sudáfrica y Taiwán.
De las 74 sociedades offshore, un total de 25 empresas no tienen actividad relacionada con su negocio habitual, es decir, la industria textil. Así lo certifica el informe del Observatorio RSC: «Entre estas 74 sociedades ubicadas en paraísos o nichos fiscales se considera que existe un grupo de 25 empresas que ofrecen dudas en cuanto a que su actividad tenga que ver con la operativa propia de negocio, puesto que tanto la declaración de la actividad (no operativa) como su ubicación generan dudas sobre su utilización posible dentro de una estrategia fiscal planificada y que no son susceptibles de resolverse al no aportar la empresa mayor información», apunta el estudio.
Inditex rechazó las conclusiones del informe de los Verdes de 2016 porque considera que parte de «premisas equivocadas que le conducen a conclusiones erróneas». Según la multinacional textil, «el informe se equivoca gravemente al asegurar que, por ejemplo, el Estado español ha dejado de ingresar en concepto de derechos de propiedad industrial 218 millones. Porque las entidades españolas no pagan por los derechos de propiedad industrial, sino que reciben beneficios de su explotación».
El grupo Inditex añade en su defensa que cuenta «con más de 400 sociedades que realizan operaciones entre ellas y que son valoradas a precios de mercado de conformidad con la legislación fiscal vigente en cada país y con las directrices de la OCDE en la materia de precios de transferencia».