Los datos indican que de los 6.660.000 contratos fijos firmados entre 1999 y 2004 sólo 3.550.000 -el 53,3%- llegan a los cinco años de vida. Por lo tanto, con el paso del tiempo se comprueba que la reforma laboral de 1997, que trató de impulsar el empleo estable reduciendo los costes del despido improcedente y […]
Los datos indican que de los 6.660.000 contratos fijos firmados entre 1999 y 2004 sólo 3.550.000 -el 53,3%- llegan a los cinco años de vida. Por lo tanto, con el paso del tiempo se comprueba que la reforma laboral de 1997, que trató de impulsar el empleo estable reduciendo los costes del despido improcedente y proporcionando cuantiosas subvenciones en las cotizaciones sociales, no consiguió en absoluto sus objetivos.
Así, el informe destaca que tan sólo el 10% de los contratos que se hacen son de carácter estable. El año pasado los nuevos contratos estables se elevaron a 1.419.718. En 2000, la cifra de nuevos empleos estables era de 1.208.414.
Sin embargo, con la misma facilidad que aumenta el número de contratos fijos también sube anualmente la cifra de despidos.
El informe sobre La flexibilidad y la seguridad laboral (…) en el mercado de trabajo da datos contundentes al respecto. Desde 2000, el número de despidos ha crecido desde 255.416 hasta 418.016. De manera que, según el informe de los expertos, en la contratación indefinida se está produciendo el mismo problema de entrada y salida del mercado de trabajo que con el empleo temporal, pero con los contratos de mayor duración.
El informe destaca que en este crecimiento del número de despidos está teniendo una influencia notable la agilidad que introdujo en esta figura la reforma laboral de 2002, la de la modificación del desempleo, que provocó una huelga general. El cambio legislativo reforzó la posibilidad de resolver el despido rápidamente si el empresario reconoce su improcedencia y deposita la indemnización para el trabajador de forma inmediata.
De manera que, desde 2002, la extinción de contratos por esta vía al año ha pasado de 92.510 a 277.628 al año. En este punto, los expertos recalcan que «esta nueva vía de despido se configura como la mayoritariamente utilizada por las empresas, pues representó el 56% de todos los procesos realizados en 2003, y más del 66% de los hechos en 2004». Por todas estas razones que se refieren a la evolución de la contratación indefinida, el informe destaca que no han conseguido plenamente sus objetivos las bonificaciones de las cotizaciones sociales destinadas a fomentar el empleo estable. «No existe ninguna relación significativa entre la cuantía de las bonificaciones a la contratación indefinida y el aumento del porcentaje de asalariados del sector privado con contratos indefinidos».
La propuesta de los expertos en este capítulo es reorientar las subvenciones en las contrataciones a los objetivos que tengan mayores resultados. Los datos muestran que en 2002 las bonificaciones sumaron 1.800 millones; 2.000 millones en 2003, y 1.600 millones, en los tres primeros trimestres de 1004.
Fuente de los datos: Expansión.