La ministra de Asuntos Exteriores española, Trinidad Jiménez, no parece tener mucha idea de política exterior, sobre todo si tenemos en cuenta que el gobierno socialista de Zapatero da las carteras dependiendo de su humor. Antes ministra de sanidad, ahora de gira por el Middle East, así son las cosas… Quizaas por ese motivo la […]
La ministra de Asuntos Exteriores española, Trinidad Jiménez, no parece tener mucha idea de política exterior, sobre todo si tenemos en cuenta que el gobierno socialista de Zapatero da las carteras dependiendo de su humor. Antes ministra de sanidad, ahora de gira por el Middle East, así son las cosas… Quizaas por ese motivo la señora Ministra no sabe muy bien diferenciar la palabra residentes de la de colonos. Así lo manifestó, al menos, cuando se refirió a los colonos de Hebrón, como residentes judíos. Pues muy bien señora Trinidad, ahora resulta que España va en contra del derecho internacional y de las Naciones Unidas.
Trinidad Jimenez, visitaba en la mañana del martes el casco viejo de Hebrón, donde cooperación española invierte cada año una enorme cuantía de dinero para rehabilitar casas de palestinos. Se ha felicitado por el trabajo de la cooperación, pero lo que no ha dicho es que esas casas que rehabiliatamos todos con nuestros impuestos no es porque estén viejas y los palestinos no tengan dinero, sino porque los colonos que viven en la ciudad histórica de Hebrón, los cuales están protegidos por las fuerzas de seguridad de Israel, las destruyen, intimidan a las familias palestinas y les hacen diariamente la vida imposible. Así que España paga lo que otros destruyen.
Pero queda estupendo, pasearse por esas calles de esa ciudad histórica y contemplar, haciendo uso de la protección que le otorga ser diplomática europea, que la vida diaria de los palestinos es más o menos normal… por eso sonríe a las cámaras y resta importancia a que colonos la insulten, acusen a España de antisemita y creen momentos de tensión.
Eso sí, lo que Trinidad Jiménez no verá, porque a esas horas ya estará cenando con Benjamin Netanyahu, no vaya ser que a España se le agote el negocio de exportar armas a Israel, será las agresiones que sufren los palestinos por parte de esos señores a los que España ha calificado de residentes judíos. Agresiones físicas y psicológicas, mientras los soldados hebreos, los mismos que la protegieran, protegerán también a sus queridos colonos, residentes… bien que nos diga la Real Academia de la Lengua Española cuál es la palabra idónea, porque estamos confundidos.
También la señora Trini, hablaba en rueda de prensa sobre el deseo de que las conversaciones de paz entre israelíes y palestinos se retomen de nuevo. Claro, abogando siempre por la paz. Pero quizás haya que recordarle a la ministra de exteriores que esas conversaciones de paz a las que alude se paralizaron concretamente porque Israel hizo caso omiso a la moratoria de frenar las colonias.
Pero en esta vida hay quedar bien con todos. Por eso tambien la señora desayunaba con el primer ministro de la ANP y con su presidente. Con ellos hablaría de cooperación, así como con Israel habló de política. Cada cosa en su sitio. A la ANP les diría que estén tranquilos, que no faltará dinero por parte de España para reconstruir lo que los residentes judíos destruyan.
Señora Ministra, no sé cómo gestionó usted la gripe A, pero le recomiendo, desde mi humilde conocimiento de lo que aquí ocurre, que retome, por favor, la cartera de Sanidad.
L. Rioja. Cooperante en Palestina.
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