Más de dos millares de personas recorrieron el sábado las calles de Donostia para denunciar el último operativo policial de la Guardia Civil contra ciudadanos vascos y, en concreto, las torturas sufridas en acuartelamientos militares durante el periodo de incomunicación y denunciadas públicamente. El portavoz de Askatasuna Juan Mari Olano acusó a los partidos de […]
Más de dos millares de personas recorrieron el sábado las calles de Donostia para denunciar el último operativo policial de la Guardia Civil contra ciudadanos vascos y, en concreto, las torturas sufridas en acuartelamientos militares durante el periodo de incomunicación y denunciadas públicamente. El portavoz de Askatasuna Juan Mari Olano acusó a los partidos de actuar con «intereses miserables» al otorgar «valor político» a las declaraciones realizadas bajo tortura.
El portavoz de Askatasuna Juan Mari Olano fue claro y rotundo en las declaraciones que realizó ayer durante la marcha que recorrió las calles de Donostia para denunciar las torturas que han padecido los vascos detenidos en el último operativo policial de la Guardia Civil: «¿Qué pasa en este país que se escandalizan con la quema de un cajero automático, pero se puede violar a personas detenidas y la clase política mira a otro lado? Eso se tiene que acabar y se va a terminar». Olano avisó, además, de que «otra vez estamos en tiempo de descuento» y conminó a los agentes políticos a que actúen con responsabilidad y afronten «esta oportunidad histórica» para poner punto y final al contencioso político.
Al final de la marcha, Olano acusó directamente a los agentes políticos de ser copartícipes de la tortura al mirar a otro lado ante las denuncias que han realizado los vascos detenidos por la Guardia Civil y encarcelados posteriormente. El portavoz de Askatasuna focalizó el operativo policial en el marco del proceso político. A su juicio, no fue una operación «casual», sino «un operativo policial muy bien orquestado y acordado entre los ejecutivos de Madrid y de Gasteiz» y que tenía como objetivo «cambiar de dirección el foco del debate político».
«PSOE torturatzailea»
«Porque no es casualidad que después de que la izquierda abertzale registra unos estatutos para un nuevo partido político en el Ministerio del Interior se haga este operativo para silenciar el paso político que supone esa iniciativa», argumentó el representante del organismo antirrepresivo para, acto seguido, recordar que encima de la mesa de los partidos políticos hay una propuesta política de la izquierda abertzale -presentada en el Anaitasuna de Iruñea- que garantiza la solución y que aún no ha obtenido respuesta alguna por parte de los agentes.
Juan Mari Olano realizó estas declaraciones durante la manifestación que ayer por la tarde congregó a más de dos mil personas en Donostia para denunciar el último operativo de la Guardia Civil y la práctica de la tortura a los arrestados. Durante la marcha, que estuvo custodiado por cuatro dotaciones de la Ertzaintza -testigos presenciales denunciaron a GARA que a primera hora de la tarde la Policía autonómica se encargó de retirar las pancartas colocadas en el Bulebar e identificó, al menos, a cuatro vecinos de Donostia-, se pudieron escuchar gritos como «Hau ez da demokrazia», «Utzi bakean Euskal Herria», «PSOE torturatzailea», «Hemen torturatzen da» o «Guardia Civil torturadora». Los participantes también corearon gritos contra el partido que dirige Josu Jon Imaz al pasar junto a la sede del PNV, sita en Alderdi Eder.
«Intereses miserables»
Fue en ese marco, junto a la sede jeltzale, cuando el portavoz de Askatasuna Juan Mari Olano criticó con dureza a los partidos políticos del país por «mirar a otro lado» ante las denuncias de «salvajes torturas» que ha realizado los ciudadanos vascos detenidos por la Guardia Civil.
Olano volvió a denunciar que, a su entender, la tortura «es un mecanismo perfectamente integrado en este sistema podrido que se hace llamar democracia». Pero acentuó la gravedad de los hechos en que, en esta ocasión, cuando incluso se han denunciado violaciones por parte de uno de los arrestados (Sergio Lezkano) y después de apreciar «durante muchísimos años cómo los jueces de los tribunales de guerra han dado valor jurídico a las declaraciones obtenidas bajo la tortura, lamentablemente hemos tenido que ver una vez más que los partidos políticos que se declaran demócratas le han dado valor político a esas declaraciones. Porque las han utilizado para criminalizar más todavía a un sector social y político». añadió.
Inmediatamente después trajo a colación la metáfora empleada por Josu Jon Imaz en el acto del PNV en el Aberri Eguna, y denunció de forma tajante que «si existe algún paraguas en este país, ése es el de la tortura, y debajo de él cohabita muchísima clase política».
Recriminó, además, a las formaciones que están haciendo caso omiso a la demanda de la sociedad vasca de una solución al conflicto político. Según Olano, «si los partidos tienen una función, es la de canalizar institucionalmente las demandas de los ciudadanos que representan». Reprochó que «no están haciéndolo», sino que «están defendiendo intereses partidistas y miserables a costa de alargar el conflicto».
El portavoz de Askatasuna alertó de que «estamos otra vez en tiempo de descuento» y conminó a los partidos políticos a que actúen con responsabilidad política, máxime en la coyuntura actual en la que sigue existiendo «una oportunidad histórica» para resolver de forma definitiva el contencioso entre Euskal Herria y los estados.