Una juez de Madrid ha renovado «el aplazamiento de desalojo» de siete familias rumanas del asentamiento de la Cañada Real Galiana «de forma indefinida». La decisión se conoció un día después de que el operativo ordenado por el Ayuntamiento de Madrid para desalojar a una familia marroquí de la misma barriada se convirtiera en una […]
Una juez de Madrid ha renovado «el aplazamiento de desalojo» de siete familias rumanas del asentamiento de la Cañada Real Galiana «de forma indefinida». La decisión se conoció un día después de que el operativo ordenado por el Ayuntamiento de Madrid para desalojar a una familia marroquí de la misma barriada se convirtiera en una batalla campal entre policías municipales y españoles que custodiaban las máquinas excavadoras que derribaron una vivienda, «ilegal» según el Consistorio, y los vecinos. El resultado fue una veintena de heridos y nueve detenidos.
Distintas organizaciones y colectivos expresaron su rechazo a que el problema de la Cañada Real se aborde como un problema de orden público y recordaron que llevan 20 años pidiendo a las administraciones el realojo de los asentamientos marginales y la activación de soluciones.
Por su parte, la vivienda derribada el pasado jueves ya tiene más de tres metros de altura y en una semana puede estar terminada en su parte exterior, según los portavoces de los voluntarios y ONG que ayudan a las familias que allí se asientan.
El derribo de la vivienda de Abdul, de 30 años, obrero de la construcción y originario de Tánger, desencadenó el pasado jueves una batalla campal en la zona de la Cañada que habitan los marroquíes, con más de 20 heridos y 9 detenidos.
Desde la asociación de vecinos indicaron que «todo está tranquilo» este domingo y que la casa derribada ya cuenta con muros nuevos, que forman la primera planta, «sin que nadie haya incordiado», en referencia a la policía.
Desde este sábado más de 30 vecinos de Abdul colaboran en levantar la nueva casa y han realizado varias colectas para comprar los materiales, como los 3.000 euros aportados por la asociación de vecinos.
Reunión con los políticos y manifestación
Un portavoz de esta asociación indicó que este lunes por la tarde se reunirán con representantes del PP, PSOE e IU en la Junta Municipal de la Villa de Vallecas, para encontrar una solución a los asentamientos de la Cañada.
Ha agregado que van a solicitar autorización para celebrar una manifestación el próximo día 27 desde Conde de Casal al Ayuntamiento de Madrid.
Los voluntarios que atienden en la zona donde se asientan los rumanos, conocida como «El Gallinero», añadieron que este domingo tampoco hay presencia policial y que la gente «está expectante» por lo que pueda ocurrir, aunque un poco más lejos, en la zona que es frecuentada por los drogadictos hay «el ritmo habitual» de policías.
Los rumanos temen que el lunes pueda levantarse la paralización, ordenada el viernes por una jueza, del derribo de siete chabolas.