Efectos de la crisis… En todo el mundo las mujeres trabajadoras venimos soportando sobre nuestros hombros los peores efectos de esta nueva crisis capitalista y las recetas neoliberales adoptadas por nuestros gobiernos para salvar a la banca y la patronal. En general, esto se traduce en un incremento de la tasa de explotación y un […]
Efectos de la crisis…
En todo el mundo las mujeres trabajadoras venimos soportando sobre nuestros hombros los peores efectos de esta nueva crisis capitalista y las recetas neoliberales adoptadas por nuestros gobiernos para salvar a la banca y la patronal.
En general, esto se traduce en un incremento de la tasa de explotación y un agravamiento de la violencia y sus múltiples caras hacia nosotras.
Por eso el 8 de Marzo, día Internacional de las mujeres trabajadoras, debe ser para tod@s una jornada de lucha y movilización para defender nuestros derechos y enfrentar las medidas neoliberales que este gobierno patriarcal e imperialista nos viene imponiendo. Hay que salir a la calle y luchar. Es el único modo de conseguir que nuestras voces silenciadas y oprimidas sean escuchadas demostrando nuestra fuerza colectiva. Así expresamos nuestra rabia contra el gobierno y haremos todo lo posible por conseguir que sean cada vez más las mujeres que comprendan la necesidad de la organización y la lucha. Que comprendan que somos las mujeres quienes soportamos la mayor parte del trabajo explotado y gratuito que hace que la sociedad funcione, o bien de forma asalariada o bien en el seno de la familia patriarcal sin reconocimiento ni visibilidad. Que comprendan que en el Estado Español los recortes brutales de este gobierno, que ha lanzado una auténtica guerra social contra la clase trabajadora y contra el pueblo, se ceban sobre todo en las mujeres a través de varias reformas y medidas:
¿Por qué nos afecta La Reforma laboral?
• Porque permite al empresario saltarse el convenio colectivo y dentro de éste los acuerdos sobre distribución de horarios de trabajo, dificultando aún más la doble laboral a la que nos vemos sometidas; la llamada «conciliación laboral y familiar» que sigue recayendo fundamentalmente en nosotras.
• Porque supone más trabas para el acceso al subsidio de desempleo puesto que el cómputo ya no será por días, sino por horas trabajadas y las mujeres somos las que más contratos a tiempo parcial acumulamos (el 80%).
• Porque rebaja del 5 al 2,5% el porcentaje de absentismo total de la plantilla para justificar despidos individuales por faltas de asistencia (justificadas o no) que las mujeres mayoritariamente nos vemos obligadas a realizar cuando las personas a nuestro cuidado caen enfermas o precisan de atención complementaria.
• Porque continúa ignorando el problema del empleo doméstico sumergido que realizan miles de mujeres, algunas en régimen casi de esclavitud.
¿Por qué nos empobrece la Reforma de las pensiones?
Porque el actual sistema de pensiones, basado en un modelo de familia patriarcal, no nos otorga los mismos derechos ni la misma protección social que a los hombres. La menor tasa de ocupación, la desigualdad salarial y las salidas y entradas del mercado laboral, como una de las consecuencias de la feminización del cuidado de familiares, hacen que la pensión media de las mujeres sea ahora un 39% más baja que la de los hombres. Lejos de tomar medidas para cambiar esta situación, esta reforma alarga el período de cómputo y aumenta la edad de jubilación. Todo esto va a dejar a más mujeres fuera de esta protección social o con niveles de renta más bajos.
¿Por qué decimos que las privatizaciones re-feminizan los cuidados y exacerban la desigualdad?
El gobierno del PP acelera la paralización, ya iniciada por el P$OE, de la (de por sí insuficiente) Ley de Dependencia, lo que supone el trasvase de carga de trabajo y costes hacia el trabajo no remunerado, realizado mayoritariamente por mujeres de forma gratuita y en la sombra.
La jugada es completa: los servicios sociales públicos se dejan «morir» por falta de financiación, se implantan sistemas de copago, y su sistema ideal de explotación y asfixia se mantiene apoyado en la división sexual del trabajo y la triple jornada de las mujeres.
En el marco de la privatización de los servicios públicos, los recortes sociales decretados desde el Gobierno Central y los Autonómicos – amparados por la UE e instituciones económicas internacionales- se ceban sobre las políticas de igualdad. Este proceso, iniciado por el gobierno anterior, está suponiendo el cierre de centros de acogida para mujeres víctimas de violencia, centros municipales de atención a las mujeres, bibliotecas de mujeres, centros de orientación, asesoría jurídica, institutos de la Mujer, etc. Por supuesto, la privatización de los servicios aumenta las diferencias de clase, dejando fuera del sistema de atención, formación e información en salud sexual y reproductiva, violencia de género etc, a las mujeres trabajadoras, precarias, con bajos ingresos, y, sobre todo, a la mayoría de las compañeras inmigrantes, que no pueden pagar los servicios privados.
Nuestras propuestas….
Nosotras nos organizamos en Red Roja para combatir el capitalismo y el patriarcado, que no son lo mismo pero se retroalimentan y apuntalan. Luchamos por un socialismo que trabaje por la abolición de las clases y los géneros, por una revolución emancipadora que destierre la explotación y la opresión y que funde las bases de una sociedad realmente igualitaria. No tenemos más remedio que construir colectivamente organizaciones que combatan los dos sistemas simultáneamente, con formas compatibles pero diversas.
Por esto, pensamos que es imprescindible…
• El fortalecimiento de las redes feministas anticapitalistas, buscando acuerdos de mínimos y extendiendo las luchas por la liberación de todos, absolutamente todos, los seres humanos.
• Garantizar la visibilidad y combatir en contra de la explotación específica que sufrimos las mujeres y aterrizarla en todas y cada una de las luchas en las que participemos: contra la reforma laboral, contra la privatización de los servicios públicos, contra la reforma de las pensiones, etc…
• Libertad sexual y emocional a la hora de elegir nuestras propias relaciones. Basta de persecución de la homosexualidad y la bisexualidad.
• Denunciar, desgañitarnos y dejarnos la piel, como siempre, ante este nuevo retroceso en nuestro derecho a decidir. Que nos oigan, que no se puedan esconder ante esta ola de rabia que les recuerda: ¡Nosotras parimos, nosotras decidimos! DERECHO AL ABORTO GRATUITO Y UNIVERSAL.
• Acabar con el tutelaje que ejerce la Iglesia Católica sobre leyes, gobiernos, presupuestos, moral, modelos sexuales e imposición de la heteronormalidad: ¡Sacad vuestros rosarios de nuestros ovarios!