Un cuarto preso ha presentado ante la Fiscalía de Sevilla una denuncia por presuntos delitos de tortura, vejaciones y rigor innecesario contra un funcionario de la cárcel Sevilla, al que acusa de aislarle en celda de castigo sin autorización médica. Según la denuncia, el funcionario sospechó que el interno podía haber recibido droga en un […]
Un cuarto preso ha presentado ante la Fiscalía de Sevilla una denuncia por presuntos delitos de tortura, vejaciones y rigor innecesario contra un funcionario de la cárcel Sevilla, al que acusa de aislarle en celda de castigo sin autorización médica. Según la denuncia, el funcionario sospechó que el interno podía haber recibido droga en un encuentro vis a vis con su novia, por lo que lo confinó en una celda de aislamiento de noche sin luz, agua y sin darle la cena, y cada cierto tiempo lo amenazaba y vejaba «a fin de que facilitara la droga que supuestamente tenía».
Fuentes de los denunciantes dijeron que el reglamento penitenciario exige que el aislamiento sea «autorizado y supervisado desde el primer momento» por el médico de la cárcel, pero el funcionario no pidió esa autorización hasta transcurridas tres o cuatro horas y entonces no la obtuvo, por lo que el interno fue entonces devuelto a su módulo.
Este mismo funcionario, que es jefe de servicio, está denunciado por la Fiscalía en el juzgado de instrucción 3 de Sevilla por otro presunto delito de torturas y rigor innecesario, por aplicar una lavativa a un preso del que sospechaba que portaba drogas en el interior de su cuerpo.
Las citadas fuentes añadieron que tres internos declararon a lo largo del pasado mes de febrero en el juzgado como testigos por estos hechos, en los que el funcionario está acusado de haber aplicado, con ayuda del ATS de la cárcel, una lavativa a un preso que regresó de un vis a vis con unas sustancias sospechosas en su cuerpo, según reveló un examen por rayos X.
La denuncia fue interpuesta por la Fiscalía de Sevilla y a ella se han incorporado, como acción popular, la Asociación pro Derechos Humanos de Andalucía (APDH) y la asociación de lucha contra la droga Liberación.
El funcionario está imputado de presuntos delitos de torturas, rigor innecesario y vejaciones, ya que el protocolo en estos casos prevé trasladar al preso a un centro hospitalario pues la presencia prolongada de droga en su cuerpo puede suponer un peligro para su salud, añadieron las fuentes.
El funcionario tiene abiertas otras dos diligencias judiciales, una que tramita el juzgado de instrucción 11 por presuntas coacciones al mismo preso para que retirara su denuncia y una cuarta, que correspondió al juzgado de instrucción 10, sobre la presunta falsificación de un «Parte de Hechos» presentado por dicho interno. Los nuevos hechos denunciados, según las citadas fuentes, se produjeron en noviembre pasado.