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Ante el LXIII aniversario de la Declaración de Derechos Humanos

¿Qué podemos celebrar? ¿Acaso la bajada de las primas de riesgo?

Fuentes: Rebelión

Si hace 4 días escribíamos que » En el día de la constitución, ya no hay nada que celebrar «, tres cuartos de lo mismo nos ocurre con la declaración universal de los DDHH, este 10 de diciembre. Con la constitución, los motivos para considerar cinismo las grandilocuentes celebraciones se basaban en que la carta […]

Si hace 4 días escribíamos que » En el día de la constitución, ya no hay nada que celebrar «, tres cuartos de lo mismo nos ocurre con la declaración universal de los DDHH, este 10 de diciembre. Con la constitución, los motivos para considerar cinismo las grandilocuentes celebraciones se basaban en que la carta magna no garantiza los derechos mas elementales que refiere (trabajo, vivienda, salud, educación, libertades, progresividad fiscal, igualdad del voto,…), ni se respeta su consenso, ni se consulta a la ciudadanía su reforma, y la pueden modificar a su antojo Zapatero y Rajoy al dictado de los mercados europeos (Merkozy) y americanos (Goldman Sachs, Trilateral, club Bilderberg). En el caso de los Derechos Humanos, cada día mas vilipendiados, tampoco puede decirse que se cumplan, ni los mas esenciales como los derechos a la salud, el bienestar, la vivienda digna, la alimentación, el vestido, la asistencia médica, o los servicios sociales, ni los seguros de paro, enfermedad, invalidez, viudedad o vejez, ni otros derechos, que muchos consideran terciarios como el de la participación en el gobierno del país, el derecho al voto y a la representación, o el poder popular sobre el que debería recaer la autoridad de los poderes públicos.

Como dicen mis amigos de Derechos Humanos de Andalucía (APDH-A), «las bolsas de marginación y exclusión social, lejos de reducirse, tienden a crecer a costa del aumento del paro y la precariedad, de los problemas de vivienda cada vez más agudizados o del comienzo de recortes en atención e inversión pública que afectan en muchas ocasiones a los sectores más débiles». Así con la excusa de la crisis, este capitalismo inhumano y neoliberal va exigiendo a los gobiernos cesiones que van claramente en contra de los Derechos Humanos y, estos, sean del signo que sean se ponen del lado de los hoy llamados tecnócratas y banqueros y enfrente de las personas y de espaldas a la ciudadanía.

Yo, hoy, quiero fijarme especialmente en la injusta forma en la que estamos echando a las personas inmigrantes, la indecorosa criminalización que la que siguen siendo objeto, la desigualdad en el trato ante la ley y los derechos mas elementales, como ahora cuando se les pide innecesariamente sus pasaportes tanto en los centros sanitarios (SESCAM), como en los de empleo (SEPECAM)…

Si de verdad queremos conmemorar con sentido la Declaración Universal de los DDHH de 1948, solo tenemos que pedir que se cumplan, denunciar cuando no se ejerzan, y exigir que se garanticen, pues como siempre hemos dicho en nuestras luchas sindicales, políticas y ciudadanas, «los derechos que no se ejercen, ni se defienden, se pierden definitivamente. Es la dignidad humana la que está en juego y de nosotras y nosotros depende.

Por eso, termino con dos apoyos expresos, ejemplo de los otros muchos que se repartirán por todo el país. Por un lado, el manifiesto conjunto y su campaña correspondiente organizada desde la Bahía de Cádiz, que puede verse en http://www.apdha.org/media/cadiz_Manifiesto_acto101211.doc . Y, por otro, los talleres y actividades programados por el 15-M de Albacete que junto a diversas organizaciones estarán en la Plaza de la Constitución (hoy de la Revolución) este 10 de diciembre desde las 13.00 hasta las 21.00 horas, también disponibles en Albacete Toma la calle.

Porque las personas sean el verdadero centro, por su dignidad y por sus derechos, aún en tiempos de crisis, más «hermanos solidarios» y menos «primas de riesgo».

Blog del autor: http://luisangelaguilar.blogspot.com

Rebelión ha publicado este artículo con el permiso del autor mediante una licencia de Creative Commons, respetando su libertad para publicarlo en otras fuentes.