Rajoy, dice: «Todos tenemos derecho a opinar» y promueve un referéndum para que los ciudadanos opinemos sobre la España que queremos ¡Aleluya! levantemos la copa y brindemos por la salud del último converso a la democracia. El más valiente, el más grande del PP que tras abrazar la causa del pueblo se propone abanderar y […]
Rajoy, dice: «Todos tenemos derecho a opinar» y promueve un referéndum para que los ciudadanos opinemos sobre la España que queremos ¡Aleluya! levantemos la copa y brindemos por la salud del último converso a la democracia. El más valiente, el más grande del PP que tras abrazar la causa del pueblo se propone abanderar y defender la voluntad del único que es SOBERANO y tiene total autoridad para promulgar y refrendar las leyes básicas que arman y llenan de contenido los pilares de todo Estado de Derecho y sus tres valores más universales «Liberté, Égalité, Fraternité». ¡Viva! y tres veces ¡Viva! Rajoy, el último Tiranosaurio Rex reconvertido a la fe democrática.
¡Si, queremos un REFERÉNDUM!: para decidir sobre las cosas serias que preocupan a los ciudadanos, sabiendo que Rajoy y sus ojos Zaplana y Acebes, acatarán el veredicto de las urnas con la misma elegancia que encajaron el 14 M su derrota. Señor Rajoy, usted imprimirá su huella en la historia de España, y no por seguir el «CAMINO» del Padre, en la rabieta de quienes temen que la LOE les haga perder el negocio de la fe, ni por su discurso crispado y desestabilizador que da alas a los milicos salva-patrias y provoca a los nacionalistas periféricos con su nacional-imperialismo cutre y cavernario.
¡Si!, «Los españoles tienen derecho a opinar» de sus asuntos, para decidir libremente y en pleno conocimiento de causa sobre cinco puntos preferentes y esenciales: a) España: Estado Federal como definición leal y solidaria de nuestra realidad Plurinacional. b) La enseñanza gratuita y de calidad, la investigación y la sanidad publica deben ser prioritarias en todo Estado laico y democrático,. c) El derecho inalienable de todo ciudadano a una vivienda decente y confortable, un trabajo estable y bien renumerado. d) El amor y el respeto al diferente -que nos humaniza y enriquece-, la libertad, la justicia social y el dialogo, son esenciales para acabar con las causas y los efectos directos y colaterales de todos los terrorismos: desde el sordo y ciego de ETA, hasta el que convierte en generales, respetables hombres de negocios y presidentes de Estado, a los criminales más fríos y implacables que ordenan asesinar con sus armas de destrucción masiva a miles, decenas, centenares de miles de soldados y civiles sin armas ni posibilidades de defensa,hombres y mujeres, niños y ancianos, victimas inocentes de los atentados y las guerras coloniales del Imperio. e) Condenar a Franco y su «Alzamiento Nacional», es restaurar la legalidad violada y asesinada por la Guerra Civil, que sólo la Republica puede hacer realidad la máxima: todo ciudadano/a es igual en derechos y obligaciones ante la LEY sea cual sea su credo, raza y sexo.
Señor Rajoy, su iniciativa abre la puerta a la reforma de la Constitución, la ciudadanía se lo agradece encarecidamente. Usted: el listo, le tira el guante a ZP, y si el gallo rojo canta su partitura: ¡Estado Federal!, usted y sus «ojos» están más perdidos que tres pingüinos en el Zoco de Bagdad. Ni un pájaro bobo pide en España el Referéndum que Usted pide. Jugar con «Gaia», es una temeridad, si despierta su fuerza dormida, la sacudida telúrica puede provocar tal tsunami político que borre al PP del mapa y acabe con la Monarquía.
Juan Carlos, elegido y educado por Franco, supo adaptarse a la realidad para hacerse perdonar su pecado original y cabalgar la Transición afianzando su papel en una España que cuando se ha pronunciado libremente siempre ha querido ser Republicana. Hoy, los príncipes herederos son jóvenes, guapos, simpáticos, inteligentes, gozan de buena salud, y además, la heredera del heredero, nacida de una bella plebeya, periodista y divorciada le da a la corona un cierto toque democrático. Pero ¿que diría el verdadero soberano de Elena, de Marichalar y Froilan? ¿Qué dirá España -bien informada- del «missing» que la dejo muda en la guerra de Bush?. Judas y sus clones de hojalata, por una medallita y un beso del Padrino, mintieron sin rubor, despreciaron a los ciudadanos y al parlamento, usurparon la autoridad y las funciones del Jefe de Estado para arrastrar a España -el 90 % de los españoles- por el lodo ensangrentado de las cloacas del imperio.
La guerra por el petróleo de Irak sabemos como empezó; nadie sabe como terminará. Cuando Madrid -vientre noble y fecundo de España- acuso el golpe terrorista más ciego, criminal e infame, tres días antes de las Elecciones Generales; los vende-patrias, con el ejercito y la diplomacia sirviendo a USA, sintieron aterrados el frió glacial que recorría su columna vertebral. Vieron que se la jugaban en 72 horas y sabiendo que encendían una mecha en el polvorín, no les tembló la voz al afirmar en la ONU y en España «es ETA, la autora de la masacre» culpando por extensión a HB y a cuantos salimos a la calle para decirles: ¡Basta Ya!, basta de mentiras que crispan y enfrentan a los españoles entre sí. Un capitán de agua dulce da las ordenes por radió, enterrado en su búnker de plomo y hormigón armado, sordo al clamor de la calle no escucha al Papa ni ha Dios, no ve el ciclón que rompe el palo mayor ni la vía de agua que hace naufragar el barco. Pobres y tristes capitanes -que por un sillón, las extras y lo que caiga: sea el oro Inca, sea el mana o sea pretenden movilizar la tropa detrás de sus cornetines de enganche y tambores de guerra. Pobres bobos sin dientes, por un efecto boomerang: SÍ AL REFERÉNDUM.