Son las 12 de la mañana, el sol luce en Madrid y hoy es día de fiesta, es el día de la Constitución, de esa Constitución impuesta a todos los ciudadanos de este país. Madrid, la ciudad de las mil obras, del ruido interminable, de los burócratas, de los atascos, cambia completamente cuando se para […]
Son las 12 de la mañana, el sol luce en Madrid y hoy es día de fiesta, es el día de la Constitución, de esa Constitución impuesta a todos los ciudadanos de este país. Madrid, la ciudad de las mil obras, del ruido interminable, de los burócratas, de los atascos, cambia completamente cuando se para el frenético ritmo de vida de todos los días… y Madrid tiene otro color y olor en días como hoy, cuando se toma la calle.
Estamos en Atocha, en pleno centro de la ciudad, miles de personas van tomando el centro de la calle, este año la cabecera esta más arriba, hay más gente, esto crece, tiene futuro. El colorido es impresionante las tricolores mezcladas con banderas rojas, moradas y negras, hacen un arco iris muy particular dando color y luz a la manifestación contra la Constitución Monárquica y a favor de la Tercera República Española. La manifestación avanza por la calle de Atocha, los transeúntes miran con simpatía la marcha, sus consignas son las de tod@s: ¡Queremos un pisito como el del principito! ¡Marichalar, ponte a trabajar! ¡Urdangarin trabaja en Burguer King! ¡No hay dos sin tres, República otra vez!, ¡Ley de extranjería para la Monarquía! ¡Lo llaman democracia y no lo es! ¡España, mañana será republicana!, ¡Juan Carlos I, de Franco es heredero!…
La manifestación llega a la altura del despacho laboralista donde fueron asesinados por fascistas los «Abogados de Atocha», y hay cosas que no se olvidan, hay aplausos, se levantan los puños, ¡vosotros fascistas sois los terroristas! Cuesta ver desde la cabecera, donde termina la manifestación, pero si contamos las personas que van en una fila y se va multiplicando (sin más ecuaciones matemáticas), estamos más de 7000 personas, todos lo comentamos desde el principio, hay más gente, esto crece, tiene futuro. Madrid se organiza, Madrid resiste a los gobiernos de derechas, a las tiranías del capital, poco a poco, pero haciendo camino al andar como decía nuestro poeta. Es la ciudad del ¡No pasarán! La tumba del fascismo. Participan en la manifestación gentes venidas de otras partes del país, pero aquí y ahora nos une a todos la República, la tercera, la que va en marcha. No participan diputados, ni cargos electos de esta «democracia» seguramente estén en los coktails de la festividad oficial, pero estamos los realmente importantes, los ciudadanos de a pie, la base SOBERANA de este país.
Llegamos a la plaza de Jacinto Benavente (1), la plaza se llena y sigue llegando gente de Atocha, hay palabras para los fusilados el 27 de Septiembre de 1975, para los asesinados en la «transición» y palabras de futuro para la República. Han pasado dos horas y se nos ha hecho corto… seguiremos andando, haciendo camino, golpe a golpe y verso a verso. ¡Viva la Republica!
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(1) Su nombre de plaza estuvo siempre, a pesar de ser Republicano (liberal) y haber criticado públicamente la barbarie fascista. Un poco más abajo queda la Plaza de Tirso de Molina, con la II República se llamaba la Plaza del Progreso, cuando los fascistas entran en Madrid, derrumban los nombres de la plaza a golpe de piqueta, la rebautizan con el nombre de Tirso de Molina, los muy ignorantes que poco debían de haber leído a Tirso.