La entrega del Premio Internacional Derechos Humanos de Siero, el más importante de Asturias en este ámbito, se convirtió el viernes pasado en un clamor por la justicia en Colombia. En esta sexta edición, el premio fue a parar al Programa Asturiano de Atención a Víctimas de Violaciones a los Derechos Humanos en Colombia, desarrollado […]
La entrega del Premio Internacional Derechos Humanos de Siero, el más importante de Asturias en este ámbito, se convirtió el viernes pasado en un clamor por la justicia en Colombia. En esta sexta edición, el premio fue a parar al Programa Asturiano de Atención a Víctimas de Violaciones a los Derechos Humanos en Colombia, desarrollado por la Consejería de Justicia, Seguridad Pública y Relaciones Exteriores del Principado, la Axencia Asturiana de Cooperación Internacional al Desarrollo, y el Ayuntamiento de Gijón, y que cuenta con el apoyo de nueve organizaciones asturianas y un comité de selección en Colombia
Dos representantes de este comité, Luis Alfonso Castillo León y Luis Jairo Ramírez, asistieron al acto para recibir el premio. Además, acudieron el director de la Agencia Asturiana de Cooperación al Desarrollo, Rafael Palacios; la Procuradora General del Principado, María Antonia Fernández Felgueroso; el alcalde de Siero, Juan José Corrales, y la concejala de Bienestar Social, Eva María Sánchez.
En todos los discursos, incluyendo la presentación del director de la Fundación Municipal de Cultura de Siero, Ramón Quirós, que hizo de maestro de ceremonias, se sacó a relucir la grave situación de Colombia, donde cientos de personas sufren torturas o son asesinadas impunemente.
Emocionado recuerdo
Las intervenciones no tardaron en derivar en un recuerdo hacia la figura de Luciano Romero Molina, un integrante del Comité de Solidaridad con Presos Políticos de Colombia que visitó Asturias gracias al programa de cooperación pero que, a su vuelta al país sudamericano fue asesinado. Cuando lo encontraron presentaba 43 puñaladas, estaba maniatado y había sido torturado. Una fotografía de Romero se podía apreciar ayer en el escenario de la Casa de Cultura.
La iniciativa premiada comenzó en 2001, y ha dado servicio a un total de 28 personas de muy diversa condición, estudiantes, profesores, defensores de los derechos humanos, campesinos o sindicalistas que por una u otra razón han sufrido persecuciones en Colombia.
Con este premio se reconoce la labor de un programa que ha sido pionero en el mundo, y que establece un puente entre Asturias y los defensores de los derechos humanos de Colombia integrantes de las cinco organizaciones que forman el comité de selección que decide quién visitará Asturias. Aquellos que acuden cada año a la región, participan en foros y charlas para hacer pública su difícil situación y contribuir a su vez a que los ciudadanos de Asturias aumenten su labor solidaria.
El acto de entrega del galardón comenzó con la interpretación de la obra Estrellita, de Manuel Ponce, a cargo de la Orquesta de Cámara de Siero (Ocas), y concluyó, tras el discurso del alcalde que cerró las invervenciones, con un breve concierto de obras de músicos sudamericanos.