Por la importancia de las cuestiones discutidas (sobre todo lo relativo a la relación entre ética y política), el tema trasciende el ámbito local de Arrasate-Mondragón (1), de eso no cabe duda, pero sin tener en cuenta las especifidades que le acompañan, es difícil situarse ante la complejidad del problema. Prueba de ello es que […]
Por la importancia de las cuestiones discutidas (sobre todo lo relativo a la relación entre ética y política), el tema trasciende el ámbito local de Arrasate-Mondragón (1), de eso no cabe duda, pero sin tener en cuenta las especifidades que le acompañan, es difícil situarse ante la complejidad del problema.
Prueba de ello es que la negativa de la coalición Ezker Batua -Zutik (2) de apoyar la llamada moción ética, -que abriría la puerta a una posterior moción de censura-, ha desatado muchas controversias en el seno de la izquierda que no se alinea ni con las posiciones del PSE, ni con las de ANV.
Quienes suscribimos este artículo, compartimos los argumentos empleados y apoyamos las decisiones tomadas por los concejales y asambleas locales de EB y Zutik, y en consecuencia intentaremos esclarecer las razones de todo ello.
Los hechos, el asesinato de Isaías Carrasco y el contrato con la ciudadanía
1. EB/Berdeak y Zutik de Arrasate comparecieron a las elecciones municipales coaligados sobre la base de un acuerdo programático de izquierda trasformadora, y lo que es más importante, un trabajo unitario previo que les permitía un espacio diferenciado del resto de los partidos, incluida la izquierda abertzale (agrupada en este momento en las siglas de ANV) opción mayoritaria en Arrasate-Mondragón (3).
Una vez constituido el Ayuntamiento, llegó la propuesta de ANV para formar Gobierno, propuesta que fue extendida también a EA y Aralar.
La decisión de EB-Zutik para un Pacto de Gobierno vino tras un balance en el que lógicamente se valoraron luces y sombras. Apostaron por defender el programa y marcaron unas líneas que para la coalición eran irrenunciables. El acuerdo no fue fácil pero quedó escrito un documento que ambas partes aceptaron.
Evidentemente tal propuesta se centraba en el terreno municipal, pero a nadie se le escapaba las interferencias de factores ajenos y de calado más general que pudieran repercutir sobre el mismo. Hablando en plata, las consecuencias de la dialéctica «acción de ETA represión gubernamental» que pivota sobre nosotros.
El balance del tiempo transcurrido, según los concejales de la coalición, ha sido positivo: «supuso un salto en áreas importantes (Bienestar Social, Vivienda, Participación Ciudadana…). La transparencia en cualquier decisión, la elaboración de presupuestos, la información… ha sido reconocida por todos los grupos (excepto el Partido Socialista de Euskadi, PSE) de manera pública y privada (…). No han faltado los momentos de crítica hacia nuestr@s soci@s de Gobierno, por entender, por nuestra parte y en ocasiones puntuales, que las cosas iban demasiado despacio o que no se les daba la importancia que en nuestra opinión merecían (…)».
Hasta que llegó el 7 de marzo: atentado contra Isaías Carrasco, vecino de Arrasate y ex concejal del PSE en la anterior legislatura. EB-Zutik condenó rotundamente el atentado y participó en todas las acciones de repulsa que hubo.
Al mismo tiempo, exigió a ANV su rechazo al asesinato de Isaías. No hubo acuerdo. Las Asambleas (4) tomaron la decisión conjunta y por unanimidad de salirse del equipo de Gobierno. Se consideró que no podían formar parte de un gobierno que no se posicionaba claramente contra el asesinato de un ciudadano.
2. Pero una cosa es romper el pacto de gobierno y otra apoyar una moción de censura que colocaría automáticamente al PSE al frente de la alcaldía (con lo que ello supone); además el mero hecho de firmar un código ético (bastante superficial y que no compromete por ejemplo a denunciar la tortura) no garantiza que el gobierno alternativo al de ANV, sea un gobierno ético.
A pesar de las rotundas afirmaciones sobre la prioridad de lo ético sobre lo político, el comportamiento del PSE desdijo rápidamente tal aseveración. Desde el principio, pretendió un cheque en blanco y un compromiso con la gobernabilidad del Ayuntamiento, tal como ellos lo entienden. No cabe ingenuidad posible: ¿Cuál sería la primera medida adoptada por el gobierno, duplicarse los sueldos y triplicar el número de liberados como pretendieron en la constitución de la corporación? ¿Desarrollar los Centros Comerciales previstos en perjuicio del pequeño comercio? ¿Desmantelar las mejoras conseguidas en Servicios Sociales en esta legislatura? ¿Ahondar en las diferencias económicas y sociales entre trabajadores del Ayuntamiento y subcontratas? ¿Y la llamada Y Vasca?
En resumen, debían abandonar el programa municipal y con ello, el compromiso adquirido con los votantes al menos durantes los próximos tres años.
Para EB-Zutik de Arrasate, el programa municipal es un contrato social con la ciudadanía y no hay nada que en mayor medida lo incumpla que elevar con nuestra firma al gobierno de Arrasate, al Partido Socialista y su candidato, en alianza con el Partido Popular y el Partido Nacionalista Vasco (EB/Berdeak acabó en los tribunales la pasada legislatura por los sucesivos escándalos urbanísticos).
¿Y qué decir sobre derechos humanos?
Por ejemplo, el protocolo en torno a los detenidos incluyendo medidas, -video-grabaciones en los cuarteles-, más denuncia explícita de tortura, exigencia de responsabilidades éticas y políticas en caso de saberse de algún caso, aunque afecte al Ministro del Interior, etc.
En la actualidad existen dos leyes de partidos: la de ETA, dirigida contra determinados partidos políticos y la del Estado, que identifica como ETA a un espectro tan amplio que supone la eliminación de los derechos civiles y políticos de miles de personas.
Están además los sentimientos y comportamientos que cada parte tiene sobre el sufrimiento, las victimas, los derechos políticos.
ANV sólo se moviliza cuando los «suyos» son agredidos y reprimidos. Entonces denuncia y exige responsabilidades. Calla frente a ETA, considera que ello es producto del conflicto.
El PSE y el PP, sólo responden a su sufrimiento, y frente al enemigo todo vale (ni ante la evidencia aceptan que exista la tortura). Además, apoyan la ilegalización de ANV y Batasuna con leyes ampliamente cuestionadas. EB-Zutik, no ha querido quedar atrapada en la confrontación, que desde la lógica de la izquierda abertzale y el gobierno, quieren meter a toda la sociedad vasca, y sobre todo a los partidos de izquierda trasformadora. Por ello ha buscado aliarse con otras formaciones que no comparten el binomio de «con ellos o con nosotros» (5).
¿Cabía diferenciar la moción ética de la moción de censura? Por ejemplo, ¿expresar una opinión de que un alcalde que no es capaz de denunciar tal escarnio por disciplina partidaria o por lo que sea, no es digno de gobernar un pueblo, lo mismo que no lo es quien roba o expolia, pero al mismo tiempo negarse a apoyar la moción de censura por entender que tras ella hay juegos e intereses que trascienden esta cuestión?
Es razonable la duda, pero pensamos que todo iba en el mismo paquete, o por lo menos encadenado, y que por tanto, con todas las incertidumbres del mundo, había que optar entre dos males y que EB-Zutik hizo bien en optar por lo menos malo, no secundar la moción.
¿Gobierno ético?
3. ¿Qué es un gobierno ético? ¿El rechazo a los asesinatos de ETA es base suficiente para un gobierno de concentración? Un gobierno ético presupone que todos sus componentes cumplen con unos requisitos. La separación entre ética y política no es tan clara como se pretende. El rechazo moral nos puede llevar a un terreno, pero los derechos democráticos lo son, independientemente del juicio moral.
¿El no denunciar un crimen por más que sea éticamente deleznable debe de ser causa de inhabilitación para gobernar? La complicidad por omisión es un terreno muy resbaladizo. En realidad todo gobierno en mayor o menor medida, calla o mira al otro lado ante millones de infracciones de derechos humanos, cuando no los conculca conscientemente en nombre del libre mercado o de los intereses nacionales. Ello les convierte en gobiernos deleznables, a los cuales debemos de combatir, pero no inhábiles para gobernar.
Llama la atención que lo que hoy cobra tanta fuerza no funcionase en el pasado, por ejemplo en plena época del GAL y del bipartito, PNV-PSE. Nos llama la atención también que gentes éticamente irreprochables en lo relativo a ETA, apoyen a un gobierno responsable de gestionar y potenciar un sistema que genera pobreza, y además manda tropas a Afganistán (¿a defender un orden ético?); un gobierno que nos metió en la OTAN, que bombardeó Serbia matando civiles; que es co-responsable de la situación del pueblo saharaui (prioriza las relaciones con Marruecos y los beneficios que ello reporta a la clase empresarial española, en detrimento de los derechos humanos conculcados en los territorios ocupados, y sobre todo del derecho del pueblo saharaui a su autodeterminación). ¿Es el gobierno del PSE un gobierno ético, o en los grandes temas nacionales, geopolítica y economía no cabe la ética… por ejemplo, los intereses españoles en la explotación de Suramérica?
¿Y el PP, que además de apoyar la invasión de Irak no se ha detractado…? ¿La diferencia es el espacio geopolítico? ¿O sea, el asesinato político dentro del estado nos debe de unir en el castigo ético y en el ámbito internacional no?
Sabemos que la lejanía desdibuja el impacto de los hechos: el cadáver de Isaías nos es muy cercano, lo de Afganistán es cosa de telediarios.
Acaba de ocurrir el accidente de Ascó, donde la salud de los ciudadanos ha estado en juego y se ha ocultado, y no ocurre nada. Los intereses privados de las eléctricas y el programa nuclear nacional se imponen. ¿Es un gobierno ético y además fiable quien no toma cartas en el asunto?
El método para castigar la corrupción moral y política es, en unos casos, votar en contra (retirarles la confianza) y en todo caso manifestar la divergencia.
4. Poliética o la pretensión de una síntesis entre unos principios éticos y políticos: es bastante más complicado de lo que parece y desde luego, nada tiene que ver con lo que se pretende con la moción de censura. Paco Fernández Buey, uno de los pocos pensadores o teóricos que se ha enfrentado al reto de entrar al trapo, en su introducción al tema dice lo siguiente: «poliética es un termino ambivalente…, sugiere al mismo tiempo pluralidad de éticas y fusión de lo ético y lo político…, la poliética no es una afirmación normativa…, entendida como un deseo de fundir ética y política establecida en los orígenes de la modernidad…, que por razones analíticas conviene mantener separado el juicio ético y el juicio político.»
Un intento, que ahora se tergiversa en interés de la llamada lucha antiterrorista. Y ya sabemos lo que son esas unidades, al final, gestionadas por quienes carecen de ética. ¿No fue el PSOE quien nos quiso convencer de la preeminencia de la ética de la responsabilidad (de Estado) respecto a la ética de la razón y el derecho?
Frente a la demencial campaña de ETA de ablandar al PSOE, está la pretensión del PSE de aprovechar esa campaña (que le viene políticamente de maravilla), para anular al PP, y de paso meterle un gol al PNV con serios problemas, de cara a las próximas elecciones. Saben que yendo a por ANV, inauguran un escenario que sólo a ellos beneficia, y emputece al mundo abertzale, además de generar graves problemas a la izquierda social, que en muchos temas tiene a ANV como aliado.
En realidad, tras la batalla «ética», se ocultan intereses estratégicos bien definidos. Como venimos diciendo desde hace mucho nosotros, «ni con el estado ni con ETA». Apostamos por una democracia que incluya el derecho a decidir en paz sobre nuestro futuro, sin ningún tipo de imposiciones, ni de las Constituciones defendidas por las Fuerzas Armadas, ni las autodeterminaciones tuteladas por organizaciones armadas, que paradójicamente, no hacen caso de las opiniones del pueblo que dicen defender. Son muchos los años que lleva este pueblo exigiendo su desaparición.
Notas:
(1) La localidad es Arrasate-Mondragón, cuna del cooperativismo vasco considerado modelito, y sede de Mondragón Corporación Cooperativa.
(2) Incluido en las filas de EB y Zutik. Ezker Batua es la organización homologa de Izquierda Unida en Euskadi o País Vasco. Zutik es una organización de ámbito vasco, resultante de dos antiguas organizaciones de izquierda revolucionaria, el EMK (Movimiento Comunista de Euskadi) y la LKI (Liga Comunista Revolucionaria).
(3) ANV. Acción Nacionalista Vasca. Organización superviviente de la Guerra Civil del 36 y que ha sustituido en el terreno electora a la ilegalizada Batasuna con la que compartía importantes acuerdos en materia social, ecología, etc., no así en lo relativo al llamado conflicto vasco y su resolución. La organización EA (Eusko Alkartasuna) se autodefine como nacionalista y socialdemócrata, y Aralar como «de izquierda aberzale», esto es, «izquierda nacionalista», y es una escisión de Batasuna.
(4) Llamazares cuestionó la autonomía local de sus militantes y los insultó llamándoles «insensibles». Precisamente a ellos, que han aguantado firmes contra las presiones de los dos mundos que tan terrible es en estos casos.
(5) Nos situamos fuera de la lógica de las dos fuerzas en pugna: la que no quiere pronunciarse contra ETA y la que quiere pronunciarse pero no contra la tortura y además apoya la ley de partidos. No somos equidistantes sino todo lo contrario, beligerantes con ambas posiciones por más que en determinados momentos nos solidaricemos con cada parte, cuando son injustamente agredidos. En realidad, somos otro extremo del triángulo, o si se quiere otro vértice del cuadrado. Esto es lo que les cuesta entender a los que nos acusan de pretender una cierta equidistancia mostrando flojera ética. Nada de flojera ética, sino unas convicciones éticas muy claras y sobre todo una síntesis de ética profundamente democrática y antisistémica.
Joxe Iriarte Bikila, Juan Ramón Garai, Josu Perea, Iñaki Martín y Natalie Pelage, autores de este artículo, son miembros de ZUTIK.