«Tuvimos que esperar 74 años desde que nos arrebataron el sueño con Jorge Eliécer Gaitán y hoy por lo menos acariciamos ese escenario».
-En comunicación con William Díaz en la ciudad de Bogotá. Buenas tardes, William.
-Buenas tardes, Mario. Un saludo para todos los que escuchan su programa, para usted y para el equipo de trabajo. Estamos en un escenario bien complejo de nuestro país, estamos aquí a la orden y lo que requieran desde nuestro punto de vista estamos dispuestos a compartir.
-Bien William, un primer balance de esta primera vuelta presidencial.
-El primer balance que podemos hacer es que hemos logrado cosas que antes en Colombia no habíamos logrado, ganar una primera vuelta con un candidato de centroizquierda, un candidato alternativo, un candidato que podemos caracterizar como liberal progresista. Primera vez en la historia que llegamos a tener ese avance en lo político. Yo soy de los que dijo que tuvimos que esperar 74 años desde que nos arrebataron el sueño con Jorge Eliécer Gaitán y hoy por lo menos acariciamos ese escenario.
Primera vez que se gana. Es decir, hay que celebrar, pero no celebrar para que después la amargura de lo que llamamos aquí el guayabo, después de ponernos ebrios por esta victoria, nos haga tener dolores de cabeza tales como entender, como lo dije la semana pasada, que ya está cocinado de alguna manera desde los sectores de derecha y ultraderecha en mi país su proyecto de colocar un tercero, en términos de la disputa que antes se marcaba, entre Gustavo Petro y Federico Gutiérrez y que por la mitad lograron meter a un neonazi como Rodolfo Hernández.
Desde esa perspectiva es claro que se la jugaron en ese escenario de distracción para colocarlo a él y sumar entre ambos 52% la derecha y nada más el 40% para la centroizquierda. Si colocamos en la derecha al señor Fajardo, que yo lo colocaría en la derecha, estarían con el 56%, es decir, claramente tratando de resolver ya quién es el presidente y no importando si hay balotaje o no. Planteando que ya, como colocan los medios de comunicación, inclusive le hablan a Rodolfo Hernández como el nuevo presidente de la República.
Es un balance agridulce. Dulce porque hicimos algo inédito, pero muy amargo o muy agrio porque confirmamos que la derecha y los sectores neofascistas y neonazis en Colombia y uribistas no han sido derrotados. Como el mismo Petro lo ha planteado de manera muy coloquial ‘no se ha derrotado al Uribismo que es una expresión clara del fascismo y del neonazismo en Colombia’. No se han derrotado sino, por el contrario, salen muy fortalecidos por este escenario.
-William, ¿cómo juega el acercamiento del compromiso del uribismo a votar por Hernández? Dado que podríamos decir que el voto de este outsider de alguna manera expresó también un voto contra la política tradicional y contra la corrupción, por lo menos esa fue la propaganda. Y en otra cuestión te quiero preguntar por qué los niveles de abstencionismos se mantuvieron, los niveles históricos del 54%, aclaremos que el voto no es obligatorio en Colombia. ¿Frente al balotaje qué posibilidades tiene Petro de interpelar a este electorado históricamente desencantado?
-Bueno, lo primero que tendría que decir ante esos dos interrogantes es que el señor Rodolfo Hernández no es ningún candidato antisistema. No es ningún candidato del cambio. No es lo que él y su equipo de campaña se ha autodenominado la liga anticorrupción. No es un voto de protesta contra la institucionalidad ni muchísimo menos contra las castas que han dirigido nuestro país. Y para la prueba un botón muy sencillo de descubrir y ubicar.
Para la prueba es que en las regiones donde el uribismo ha venido controlando de manera más sencilla el proceso electoral fue donde más se consolidó y ganó el señor Rodolfo Hernández que lo han querido colocar como un fenómeno mediático a través de TikTok y las redes. Inclusive el mismo Petro ha caído en esa trampa de creer que es un fenómeno de redes. No es un fenómeno de redes. Es un fenómeno que el uribismo ha sumado a partir de la derrota que ha tenido Federico Gutiérrez el pasado 29 de mayo, ha sumado de tiempo atrás.
Los resultados en ciertas regiones donde gana Rodolfo Hernández si se comparan con votaciones del plebiscito son zonas controladas por el uribismo y muchas de esas zonas son controladas por el narco-militarismo donde de manera muy disciplinada ponen a votar a la gente de acuerdo al interés que ellos tengan. Es decir, es claro que el uribismo votó en masa para consolidar a Rodolfo Hernández y dejó solamente victorioso a Federico Gutiérrez en Antioquia.
Eso tiene mucho que ver en términos de simbolismo porque además de ganar en Antioquia ganan sobradamente en Medellín, donde esta ciudad es un escenario en disputa entre el presidente Duque y el alcalde Quinteros destituido supuestamente por hacer proselitismo político siendo funcionario público, es decir, no hay ninguna sumatoria después de la primera vuelta del uribismo, sino que el uribismo ha sumado y ha jugado una carta muy suya como es Rodolfo Hernández.
-No te quiero interrumpir, simplemente muchos analistas han hablado y han hecho un análisis del declive del uribismo y esto que vos estás señalando un poco iría en contra de esa idea, ¿no?
-Total Mario. Yo no me trago, no digiero, no asumo esa postura equivocada de creer que al uribismo en estas elecciones se le ha dado un golpe contundente. Muy por el contrario, ha mostrado gran habilidad y gran sagacidad y no por su fortaleza en términos electorales, políticos y demás, sino por la gran fortaleza que yo argumenté también en la entrevista pasada de la concordancia con potencias extranjeras, principalmente EE UU, de generar todo el ambiente necesario para imponer el fraude.
El fraude está impuesto y es un hecho. Aquí el fraude es endémico, el fraude no se da en estas elecciones, el fraude quedó evidenciado en las elecciones del 2018, el fraude quedó visibilizado en el plebiscito de 2016, el fraude es una constante en la política colombiana. Que lo saben aplicar, sí. Que saben generar las condiciones, sí.
El uribismo no está derrotado. Sí tiene ciertos escenarios donde se ha debilitado, pero está muy fuerte. Estamos a puertas de que se vuelvan a salir con la suya colocando un presidente como el neonazi Rodolfo Hernández. Pero usted me decía antes de dónde puede agarrar, echar mano Gustavo Petro y el Pacto Histórico para tratar de darle la vuelta a esta situación. Yo expreso un dicho muy popular en Colombia ‘uno no está perdido siempre y cuando siga dando la pelea o la batalla’. Yo sí creo que el pueblo colombiano está harto del uribismo. Está harto del neofascismo. Está harto de esta política de guerra y de exterminio. Estamos hartos de eso y vamos a seguir peleando hasta el último momento. Y si perdemos, perdemos peleando. Si ganamos, ganamos peleando.
En ese sentido, ¿qué le corresponde a Petro? A Gustavo Petro y al Pacto Histórico no caer en la trampa de creer que el fenómeno de Rodolfo Hernández es un fenómeno estrictamente mediático, que a través de las redes sociales y de hablar de la manera más simplona y ordinaria con groserías e insultos, con expresiones muy simples, porque es que así piensa. Entonces sobre esa premisa debemos aplicar un modelo similar. Yo creo que esa es una trampa que un coterráneo de ustedes, el publicista Ángel Beccassino, ha querido colocar y en el que ha caído y está cayendo el Pacto Histórico.
Esto no es un tema solo de redes. Las redes sociales de la virtualidad tienen que convertirse para contrarrestar eso en redes reales. Es decir, en acción de masas, en las redes populares y para la muestra otra. Las zonas más consolidadas en términos de voto petrista, que son las regiones del sur occidente del país, la zona del Pacífico, donde votaron masivamente por el Pacto Histórico, por Gustavo Petro y por Francia Márquez. El trabajo que ahí se nota es el trabajo de Francia Márquez, un trabajo directo con las masas, un trabajo concreto en términos de las necesidades que aquejan estas comunidades y las comunidades a pesar de estar en zonas muy para-militarizadas y de altísimo conflicto se atrevieron a votar por el Pacto Histórico y por Gustavo Petro, y no lograron revertir en el escenario del fraude estos resultados. La gente está en acción de calle, en acción de masas y luchando contra el régimen y contra el sistema.
Eso en ese sentido, en el otro sentido es no caer tampoco en la trampa donde ayer Gustavo Petro cometió un error garrafal. Después de invocar que el señor Rodolfo Hernández no tiene programa para gobernar este país de forma seria y responsable y que sería un salto al vacío, como lo dijo en su discurso el pasado 29 de mayo, Petro dice ‘ustedes pueden elegir entre un supuesto salto al vacío por el supuesto cambio con Rodolfo Hernández, un corrupto, o podemos definir un cambio responsable, un cambio claro, un cambio con un programa completo realizable de cara a la justicia social’. Ese buen argumento del 29 de mayo de Petro, se desdibuja 1° de junio cuando dice que está dispuesto a llamar a Rodolfo Hernández para definir un pacto por la vida, un pacto por un programa influyente y social porque el programa de Rodolfo Hernández es muy parecido y coincide con muchísimas cosas con el programa del Pacto Histórico de Gustavo Petro. ¿Qué significa eso? Darle un aval y un reconocimiento que no merece el panfleto que ha utilizado Rodolfo Hernández como programa de gobierno, porque es un panfleto. Son solamente generalidades, no hay nada organizado sistemáticamente con especialistas orientando cómo puede ser la labor de un estadista liderando el proceso que necesita Colombia.
Pero Gustavo Petro erróneamente le está dando el nivel y la altura que no merece y no tiene Rodolfo Hernández para gobernar nuestro país. Esa es la situación, se está cayendo en la trampa. En esa trampa no se puede caer. Termino diciendo en esta parte que Gustavo Petro debe hacer más que lo que le sugiere Beccassino o el mismo Rodolfo Hernández de copiar su estilo. Más que hacer eso debe reconocer que la gente ya está en las calles, que hay convocatoria de mujeres en las calles, convocatoria de estudiantes en las calles, son varias Universidades públicas que desde ayer están en las calles porque la juventud se ha decidido a salir a las calles porque en las calles consideran ellos, y yo creo que es parte del camino, para enseñarle a la oligarquía, a la burguesía y al narco-militarismo que no vamos a soportar seguir con esta estructura de gobiernos guerreristas, militares y narco-paramilitares.
-William, vamos a hacer un paréntesis hasta dentro de dos semanas. El próximo jueves 16, previo a la segunda vuelta.
-Claro, hagamos ese paréntesis. Hay que recordar que salieron unas encuestas ya planteando una de ellas cifras muy elevadas con relación de la ventaja que le toma el candidato Rodolfo Hernández a Gustavo Petro y otra más o menos define un empate técnico, 39% para Petro y 41% para Rodolfo Hernández donde ya están marcando la diferencia, y lo van a hacer de manera muy fuerte en términos mediáticos. Repito, los medios de comunicación ya lo dan como presidente a Hernández. Gustavo Petro está ahí. Esperemos y estoy seguro de que Petro y Francia y todo el Pacto Histórico comprendan que las calles, en términos de la movilización, es el camino. Más allá de las redes sociales, que no hay que descuidarlas. Más allá de querer tener una izquierda en la medida de la derecha es tener una izquierda en la medida de las necesidades del pueblo colombiano que resiste y seguiremos resistencia. Muchísimas gracias.
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