El acuerdo que han firmado PSOE y Unidas Podemos, plasmado en un Programa de Gobierno titulado «Coalición Progresista – Un nuevo acuerdo para España», ha suscitado una ola de esperanza en todo el país. De esperanza y de ilusión de que se abra una nueva etapa que nos permita avanzar con medidas de justicia social […]
El acuerdo que han firmado PSOE y Unidas Podemos, plasmado en un Programa de Gobierno titulado «Coalición Progresista – Un nuevo acuerdo para España», ha suscitado una ola de esperanza en todo el país. De esperanza y de ilusión de que se abra una nueva etapa que nos permita avanzar con medidas de justicia social para contribuir a la dignidad del trabajo, para una mayor justicia fiscal, para un decidido progreso en los derechos de la mujer, en los de los consumidores, para una necesaria mejora del sistema educativo, para hacer frente a la emergencia climática, para la profundización y actualización del Estado Autonómico, para el equilibrio, la igualdad y la solidaridad territorial… para construir nuevos espacios de libertad para el mayor y mejor ejercicio de los derechos democráticos.
No será fácil. Las fuerzas de las diversas derechas han manifestado con claridad su radical voluntad de dificultar, de impedir si pudieran, la aplicación de este Programa de Gobierno. Es necesario por ello que la voluntad popular de avanzar encuentre formas de expresión, de útil y resuelto apoyo a la gestión del gobierno, impulsando todas las posibles formas de participación de la ciudadanía en el soporte a esta propuesta de gobierno, a su programa de progreso.
Los partidos políticos que integran la coalición de Gobierno tienen evidentemente una gran e inmediata responsabilidad para hacer realidad su Programa, y es necesario reforzarlos por parte de todas las personas que se sientan identificadas con sus propuestas y formas de trabajo a corto y largo plazo. Pero no es suficiente. La esperanza suscitada no debe quedarse en la espera de sus deseados éxitos, debe traducirse en el apoyo inmediato de la amplia mayoría de la ciudadanía que se sienta identificada con el programa de gobierno, que entienda ya su interés en que se materialice. Estamos convencidos de que existen condiciones para transformar esta esperanza en un amplio movimiento social capaz de expresarse y, al hacerlo, de dar fuerza y eficacia a los objetivos inmediatos de la coalición de gobierno de progreso recién investido, para que el apoyo ciudadano contribuya a superar la incierta fuerza parlamentaria. Para que la ciudadanía no se sienta sólo receptora de los esperados beneficios del programa de gobierno, sino también agente activo en su desarrollo y aplicación.
Este apoyo supone ciertamente exigencia al Gobierno y a los partidos que lo apoyan de cumplimiento de sus compromisos, de trabajar para conseguirlo desde las instituciones. La esperanza y exigencia de la ciudadanía han de ir acompañadas de la intervención social para contribuir a superar las resistencias que se van a producir, que se están produciendo ya desde las fuerzas de la derecha, así como desde los sectores de nuestra sociedad que todavía no comprendan la relación de las propuestas de gobierno con sus intereses inmediatos.
Por todo ello, las personas que suscribimos este documento como promotores de esta iniciativa afirmamos nuestra voluntad de impulsar el amplio movimiento que se está ya configurando, encontrando colectivamente las formas de trabajo más adecuadas en cada lugar y momento, a lo largo y ancho de la geografía de nuestro país.
A ello llamamos a toda la ciudadanía, sin ningún otro requisito previo, y sin ningún otro objetivo a más largo plazo, que el apoyo al programa de gobierno progresista. De las primeras formas de trabajo colectivo para tal fin surgirán propuestas de información, de debate y de acción, de relación con las instituciones de gobierno y con los partidos que las sustentan.
Como primera propuesta para este proyecto sugerimos que en cada ámbito de nuestra sociedad (territorial, social, vecinal, institucional…) se constituya un NÚCLEO PROMOTOR, necesariamente autoconvocado a partir de la coincidencia en los objetivos inmediatos. Su difusión a través de las redes y otras vías de comunicación permitirá unas primeras formas de coordinación objetiva y posibilitará seguir avanzando en las formas de trabajo y de acción que en cada lugar se decidan.
Como primer objetivo, los núcleos promotores impulsamos la adhesión o inscripción a este proyecto.
Proponemos como primera meta que en un breve plazo lleguemos a las 25.000 adhesiones. Para ello hemos habilitado una vía para manifestar la adhesión a la propuesta en https://www.facebook.com/groups/676264126501899/.
Se crearán colectivos que para su identificación proponemos el nombre de «Plataforma local de Apoyo al Programa de Gobierno Progresista». Los diversos colectivos autoconstituidos deberán encontrar en el inmediato futuro las formas de relación y coordinación que en cada uno se estimen más adecuadas, también con los demás colectivos, así como con las instituciones de gobierno y las organizaciones políticas que apoyan el programa de progreso.
A todo ello contribuirá la más amplia difusión de esta Declaración como elemento común y aglutinante, junto a las específicas de cada lugar, y con ambas la difusión y explicación del programa de gobierno progresista, así como las experiencias concretas que en este trabajo vayan produciéndose a lo largo de toda la geografía española. Las primeras reacciones que se han producido a partir de la expresión de ideas en este sentido, así como otras experiencias, indican que este desarrollo es posible.
¡Que la esperanza se transforme en iniciativa para contribuir a hacerla realidad!
Para más información sobre este documento: Isidor Boix ([email protected])