Victor Serge, la conciencia de la revolución, una recopilación de estudios sobre Victor Serge publicado estos días por Laertes. Se trata de un trabajo arduo dirigido por Pelai Pagés y por el que escribe, y recoge textos de especialistas reconocidos internacionalmente sobre Victor Serge (Susan C. Weissman, Claudio Albertani, Pierre Broué, Horacio Tarcus), con aportes […]
Victor Serge, la conciencia de la revolución, una recopilación de estudios sobre Victor Serge publicado estos días por Laertes.
Se trata de un trabajo arduo dirigido por Pelai Pagés y por el que escribe, y recoge textos de especialistas reconocidos internacionalmente sobre Victor Serge (Susan C. Weissman, Claudio Albertani, Pierre Broué, Horacio Tarcus), con aportes de estudiosos de casa como Pelai Pagés, Andy Durgan, Ángel García Pintado, Ferran Aïsa, y y o mismo que aparte de realizar una extenso estudio bibliográfico del Serge en castellano, me atrevo a criticar a Susan Sontag en el tema del «comunismo».
Es una aportación necesaria en lo que algunos hemos llamado el «año Serge» en el que se incluye numerosas reediciones así como actividades diversas, como las jornadas organizadas por la Fundación Andreu Nin en Madrid y las que se están gestando en Barcelona.
Serge, hijo de radicales rusos exiliados, políglota, novelista y poeta, destacó como anarquista, se hizo bolchevique en los tiempos gloriosos, fue el rostro más internacional de la Oposición de izquierdas llamada «trotskista», escapó de los campos de la muerte por los pelos, militó en el POUM en París, viajó a México con los surrealistas y dejó unas memorias y unas reflexiones sobre «el destino de una revolución» que están justamente estimados como el propio de alguien que fue «la conciencia de la revolución».
Tenemos que agradecerle a Laertes se apuesta por la memoria revolucionaria, especialmente la relacionada con el POUM.