No existen pruebas de que la carta que habría probado el pedido de intervención estadounidense, sea legítima.
A Evaristo Estenoz, mártir de la patria cubana, y a Vicenta, su esposa, “valor amiga mía, que el triunfo será recompensa”.1
Una carta, supuestamente firmada por Evaristo Estenoz, uno de los líderes del Partido Independiente de Color, fechada en 15 de junio de 1912 (12 días antes de su asesinato, en condiciones de gran aislamiento y persecución), ha servido para afirmar que “los Independientes de Color habían apostado por Washington”2, y ha sido tomada como muestra de “sus ideas sobre la insurrección y lo que deseaban de los americanos.”3
Los investigadores que han citado la carta, como Rolando Rodríguez y Rafael Fermoselle, lo han hecho desde su copia en National Archives, en los Estados Unidos. En caso alguno, se ha aportado, hasta donde conozco, información que contradiga su veracidad.
Es lo que hago aquí. Reproduzco, por primera vez en Cuba desde 1912, un intercambio cruzado de prensa —de diversa filiación política en ese contexto—, y de material de archivo. El cotejo de esas fuentes muestra consenso en considerar esa carta como apócrifa, esto es, “que no es auténtica o no es obra de la persona a la que se atribuye”.
“La supuesta carta de Estenoz”
El historiador Rolando Rodríguez transcribió la carta de 15 de junio de 1912 y comentó la correspondencia relacionada con ella desde el mismo archivo que ya había sido trabajado antes por Rafael Fermoselle, que se conserva (en microfilmes) en National Archives.
La carta en cuestión dice:
“Al HONORABLE SECRETARIO DE LOS E. U. de AMERICA.POR CONDUCTO DEL CONSUL DE SU NACION CON RESIDENCIA EN SANTIAGO. DE CUBA PARA SER TRASMITIDA POR CABLE O POR LA VIA MAS RAPIDA.-
// Hon. Sr.// Adjunto tengo el honor de acompanar a Vd. la siguiente exposición con el fin de que haga conocer al mundo civilizad o los crimines y desaciertos realizados hasta hoy por las fuerzas del Gobierno del Predte Gómez, al mando del Mayor Gral. Monteagudo. Este es el caso: Al lanzamos los Independientes de Color al campo para declarar la guerra al Gobierno del Predte. Gomez por no sernos posible tolerar por mas tiempo los atropellos que con nosotros se han venido cometiendo por parte de los blancos preocupados de este país.// De todos nuestros atropellos esta perfectamente enterado el Gobierno de su Gran Nacion, toda vez que este fue quien reconocio oficialmente a nuestro partido al amparo de Gob. Provisional de los E.U. en la segundo intervencion en esta Republica.// 1ro. Ese Dep rtamento a su digno cargo publicó mi primera exposición, la cual cumplimos al pie de la letra. Nuestro proceded para con nuestros enemigos y el elemento pacífico e s completamente distinto al que vienen empleando las fuerzas del Gob.// Son ya numerosos los crimines, violaciones y demás lajezas realizadas por p rte de las fuerzas del Gral. Monteagudo Y como prueba de ello citare ligeramente los ya realizados en el departamento del ‘Ramón de las Yaguas’: 1ro. Un padre honrado y pacifico asesinado vilmente con dos hijos menores de diez años, ciento veinte casas de pacificos vecinos quemadas sin dejar sacar de ellas nada absolutamente, tres ninas y una señorita violada.// De todo lo cual tengo conocimiento y lo cual comunico a Vd. para que así lo haga saber al Gob. de que tan dignamente es Vd. Representante.// Quiero con esto demostrar al mundo entero que somos nosotros mas capacitados y mas civilizados que las propias fuerzas de este Gob. que tan mala mente nos ha venido dirijiendo.// Por tanto, nosotros creemos del todo imposible llegar a un acuerdo con este Gob. toda vez que no nos merece absolutamente ninguna confianza; pues este no ha hecho otra cosa más que dividir la opinion en el país, haciendo creer a los blancos nativos que nosotros le odiamos y que nuestra justa reclamación es puramente una guerra de raza, de negros contra blancos, siendo todo lo contrario toda vez que nuestros hechos son las mejores pruebas de lo ya dicho por mi.// Esperamos pues, que igual que otras veces, nombre ese Gob. un Representante si lo cree a bien para que en el mismo campo de la Revolución se convenza de todo lo que le expongo; pues de seguir asi los atropellos con nuestras familias nos veremos en la necesidad de establecer la represalia, cosa que daran al traste con la civilizaci n y con los ¿sanos? consejos que de Vds. hemos recibido durante el tiempo que nos han gobernado.//Quiero con esto honorable Sr. demostrar al Gob. de esa Gran Nacion y al mundo entero que somos nosotros los mas perjudicados y los mas sacrificados por la Independencia de este país; y lo demuestra el hecho de haber tenido el Gob. de vuestra Nacion que enviar fuerzas del ejercito de su nacion para proteger los intereses de sus súbditos en esta Nacion.// Tambien me consta que el Gral. Monteagudo trata de valerse de algunos individuos de la fuerza a su mando para quemar algunas propiedades americanas y con ello proporcionarse el odio de Vds. todos.// Lo que comunico a Vd. para su conocimiento y para que sepa a la vez a cuanto se atreve esos que nos tildan de salvaje a nosotros.// Por ultimo hace tres dias han atado en la cola de un caballo por los dos brazos a un individuo honrado y laborioso de esta comarca, al cual dejo colgado en dicha cola los dos brazos realizando con esto el mayor de los crimines que la historia registra.// Quedo de Vd. attmente// (sgd) Evaristo Estenoz// Gral. en Jefe del Ejército Reinvindicador// Cuartel General en Campana, Junio 15 de 1912”.(copy).4
Rodríguez califica la carta de “angustiosa, casi desesperada”. Ese documento no ha sido el único que se ha considerado como prueba de que el patriota cubano habría pedido la intervención estadounidense a la Isla. El autor de La conspiración de los iguales comenta también otro documento, de fecha anterior. El comentario de Rodríguez dice lo siguiente: “Después que tomaron las armas, el 20 de mayo de 1912, Estenoz le envió un mensaje al cónsul en Santiago de Cuba, Holaday, con Wheeler y Collister, dos estadounidenses a quienes se había creído prisioneros de los insurrectos, para que lo transmitiera al departamento de Estado: ´Solo luchamos contra los cubanos y el gobierno de Cuba por nuestros derechos como cubanos y ciudadanos de este país…` y más adelante declaraba de forma deplorable: `…deseo declarar que antes que ser gobernados por los cubanos como en el pasado, sería mucho más preferible ser gobernados por extraños´ (…)”.
La cita de Rodríguez continua así: “Estenoz finalizó ese mismo mensaje de una manera inaceptable al mostrarse partidario de la intervención; es decir, ocupación del gobierno de los EE.UU. en la Isla: ´esperamos que el pueblo de los Estados Unidos comprenda nuestra posición y estudie el asunto exhaustivamente antes de convencerse de la necesidad de la intervención`.”5
Sin embargo, hay diferencias entre los dos postulados. En la carta supuestamente firmada por Estenoz, de 15 de junio, se pedía: “….un Representante [del Gobierno de los EEUU] si lo cree a bien para que en el mismo campo de la Revolución se convenza de todo lo que le expongo”. [Subrayado mío], mientras que en el documento de fecha anterior se dice algo diferente “…[Estados Unidos] estudie el asunto exhaustivamente antes de convencerse de la necesidad de la intervención”.
La posibilidad inminente del desembarco de tropas estadounidenses era un hecho, que en efecto tuvo lugar. Sin embargo, solo en la carta del 15 de junio hay una petición expresa de intervención. Por ello, es necesario atender en detalle esta carta. Su autor pide en ella a un Representante estadounidense, hecho que podía significar ya en efecto la ocupación estadounidense.
El consenso de la época: la carta es apócrifa
En lo adelante, aporto las pruebas documentales que argumentan el carácter apócrifo de la carta del 15 de junio de 1912. He respetado la escritura de los documentos, y agregado breves comentarios, en cursivas, cuando lo he considerado necesario.
El Mundo, 19 de junio de 1912
“Santiago de Cuba, junio 18. (De nuestro enviado especial señor Varela Zequeira)
“De público se dice que el cónsul americano ha recibido una carta de Estenoz, fechada el 15 del actual y puesta en el correo de Guantánamo, en la cual denuncia el jefe de los alzados que las fuerzas del gobierno cubano no hacen guerra civilizada, y piden que los americanos impidan los incendios de casas de pacíficos y las muertes de hombres y niños negros. Los términos de la carta indican que Estenoz desea la intervención de los Estados Unidos en Cuba.”
[Esta es la versión tradicional, aceptada hasta hoy, sobre la carta “de Estenoz”.]
El Mundo, 21 de junio de 1912
“¿Carta de Estenoz?
“Hoy recibió el cónsul americano de esta ciudad una carta fechada el 15 de junio, echada al correo en Guantánamo y firmada «Evaristo Estenoz». Yo cablegrafié [habla el periodista Varela Zequeira] brevemente esta noticia y no fue amplio mi cablegrama por temor a que no llegara a poder de El Mundo.
“Esa carta la mostró el cónsul [Holaday] al general en jefe [Monteagudo] y en un cotejo de firmas resultó tanto para el cónsul como para el señor Monteagudo, que la firma no era auténtica, no era del puño y letra de Evaristo Estenoz.
“La carta esa parece una continuación de aquella proclama del brigadier exterminador, de la zona de Cambute, señor de Antomarchi. (…).”
[Dice Varela Zequeira]: «La carta de `Evaristo Estenoz`, que es falsa según oficialmente se afirma, no ha circulado por qué iba dirigida el cónsul americano, que es persona discreta y grato al pueblo, en la alta sociedad y en el Cuartel General.”
Diario de La Marina, 22 de junio de 1912
“Carta dícese recibida periódico neoyorquino, firmada por Estenoz, recibióla aquí el cónsul americano Holaday. Comprobóse que la firma era apócrifa.” (Ver más abajo The New York Times, July 10, 1912)
La Discusión, 22 de junio de 1912
“La carta que se dice recibió un periódico neoyorquino firmada por Estenoz, la recibió también aquí el cónsul norteamericano Mr. Holaday; pero pudo comprobarse que la firma era apócrifa. La carta contenía el relato de multitud de mentiras, que demuestran bien a las claras que ha sido escrita por un manifiesto enemigo de Cuba con el propósito de causar daño y producir alarma.”
[En otra nota de esta misma fecha, se modifican algunos aspectos de la carta, en comparación con lo publicado por El Mundo. Señaladamente, la referencia a la amenaza de la “guerra de razas”, que seguiría como represalia.]
“[La carta] Aparecía haciendo graves cargos a las fuerzas del gobierno. Al general Monteagudo le imputaba ser el inductor de los incendios a las propiedades norteamericanas, para provocar la animosidad de los EE.UU. contra los alzados.
“En otro lugar de esta edición publicamos la noticia de que se ha podido comprobar que la carta recibida por el Cónsul norteamericano en Santiago, Mr. Holaday, que aparecía firmada por Estenoz, es apócrifa y obra de algún enemigo de Cuba.
“Esa carta tuvo el `privilegio` de ser ampliamente extractada por los periodistas norteamericanos, y así aparece con grandes titulares en las ediciones de la prensa de los Estados Unidos, según las noticias llegadas a Palacio.
(…)
“Pero demostrado que la carta no ha sido producto de la cosecha de Evaristo, demás está que la comentemos. Sólo tenemos la más enérgica de nuestras frases para el cobarde y criminal que, ocultándose detrás del anónimo, trató de alarmar la opinión norteamericana, creando una dificultad más en estos momentos de tantos peligros.”
The New York Times, July 10, 19126
“Gómez es exonerado
Los documentos muestran que no conspiró con Estenoz, líder negro.
La Habana, 9 de julio. Documentos encontrados en el cuerpo de Evaresto (sic) Estenoz, organizador del levantamiento de negros en Cuba, fueron identificados positivamente esta tarde por cuatro peritos caligráficos como escritos por Estenoz. El portavoz Ferrara y otros declaran que estos documentos refutan claramente las acusaciones hechas por los enemigos del presidente Gómez de que conspiró con Estenoz para iniciar la rebelión de los negros. ‘Se encontraron dos documentos. Uno estaba dirigido al Secretario de Estado Knox en forma de cable, para ser enviado a través del Cónsul Americano en Santiago. Es una larga exposición de los cargos contra el Gobierno de Gómez y las tropas federales a quienes Estenoz acusó de muchas atrocidades. Declara que el presidente Gómez sembró deliberadamente las semillas de la discordia entre blancos y negros, y tergiversó los hechos con la esperanza de obtener la simpatía de los estadounidenses y distraer la atención de sus faltas’. Estenoz pidió finalmente que el Gobierno estadounidense envíe una comisión de investigación a Cuba para esclarecer los hechos. El segundo documento es una respuesta a la proclama emitida por el presidente Gómez llamando al país a las armas para sofocar el levantamiento negro. Estenoz declaró que todo lo que dijo el presidente Gómez en su proclama era falso, que el Partido de los Independientes de Color estaba en paz hasta que Gómez le quitó todas las oportunidades posibles para que existiera legalmente. Dijo que el Presidente había llevado a cabo deliberadamente y sin causa una verdadera persecución contra los negros, negándoles sus derechos civiles, por los cuales lucharon tan valientemente como lo hicieron los cubanos blancos”.
[Los medios cubanos que abordaron el asunto criticaron el abordaje que le dio The New York Times, en la línea de que el hecho había sido “privilegiadamente” —en el sentido de “convenientemente”— extractado para los lectores estadounidenses. Así lo hicieron, por ejemplo, Diario de La Marina, 22 de junio de 1912; y La Discusión, 22 de junio de 1912.]
Julio 1 de 1912. (Nota sin firma, atribuible a José de Jesús Monteagudo, “Mayor General Comandante en jefe de las fuerzas militares”).7
“En campaña Cuartel Moncada julio 1 de 1912. Santiago de Cuba.
“Mi querido presidente [José Miguel Gómez]: Entre los documentos encontrados a Estenoz se encuentran el original de la carta que éste dirigió al Secretario de Estado, de los Estados Unidos y otro que parece escribió para que sirviera de contestación a su proclama. [La proclama de Gómez fue publicada en El Triunfo, el 07 de junio de 1912] Se los remito pues su contenido, sobre todo del segundo, serviría, si se publicase [este segundo documento, escrito por Estenoz, fue publicado en La Discusión. No he encontrado impugnaciones de su autenticidad], para dar el más rotundo mentís a los difamadores é inventores de las patrañas de connivencia entre el Gobierno y los Alzados, pues en él se evidencia el propósito y fines de esa gente, y su disposición de ánimo respecto al Gobierno. “De Vd. respetuosamente
Mayor General”.
Nota al presidente José Miguel Gómez, atribuible a Monteagudo.8
“Conocía el original del absurdo documento [la carta de 15 de junio] porque el cónsul me lo enseñó, no creo sea verdadera firma Estenoz. Cada día que pasa tengo más confianza en el dominio de la revolución y no temo ningún acto contra propiedades por los alzados que solo pueden atender á esconderse huyendo. Hay mas interés en elementos dentro los pueblos por la intervención que el que pudiera tener Estenoz- ellos hacen obra de gran laborantismo mientras mas decaída ven revolucion.” (…)
Conclusión
En los papeles de Ejército cubano aparece que el teniente Lutgardo de La Torre le dio muerte “personalmente” a Estenoz. El líder del PIC llevaba años prometiendo que la lucha tendría como final, si no era victoriosa, el sacrificio de la vida. Así murió, sin ser sobornado —y, por supuesto, sin ser protegido por las fuerzas estadounidenses—, después de estar durante tres días sin comer.
La existencia, y difusión, de la carta del 15 de junio convenía al gobierno de José Miguel Gómez, para mostrar ante la opinión pública los intereses “anexionistas” del PIC. Monteagudo vio la carta, reportó su presencia y desestimó su autenticidad. No existe evidencia de que el presidente Gómez insistiera más sobre ella.
Lo mismo hicieron los periódicos que reportaron sobre el carácter apócrifo de la carta. Ninguno había mostrado simpatías por el levantamiento del PIC, sino lo contrario: atizaron la represión bajo la etiqueta de “brote racista”, según ellos promovida por el PIC.
Por qué esta información ha “dormido” dentro de los periódicos y archivos desde entonces hasta hoy, y ha servido para deslegitimar el programa y la memoria del PIC, hace parte de los problemas de investigación sobre ese movimiento. Más en general, se vincula con los problemas del estudio de la historia de los negros cubanos en la construcción nacional y republicana del país.
Dejo para otro momento un análisis en profundidad sobre este, y otros documentos relacionados, encontrados en esta investigación. Por ejemplo, afirmar que la carta es apócrifa no sustituye el estudio de las ideas y declaraciones del PIC sobre los EEUU, ni las del resto de los actores del sistema político cubano hacia ese país en aquel contexto.
El análisis del contexto y la cantidad de actores que en la época consideraron la carta apócrifa y así lo hicieron saber por diferentes vías, hacen imposible —cuanto menos— considerar la carta legítima sin aportar otras pruebas.9 Es un aspecto crucial en el “caso” del interés del PIC en la intervención. A la luz de lo aportado, su uso debería ser desestimada como tal, a menos que se elabore prueba en contrario.
Por ahora, solo pongo este hecho en conocimiento de la opinión pública, y de los investigadores interesados, con la esperanza de que contribuya a seguir abriendo caminos de estudio, y de reparación histórica, sobre la gesta republicana democrática, nacionalista y patriótica, del Partido Independiente de Color.
Notas:
1 Lo entrecomillado pertenece a una carta enviada por Rosa Brioso a Vicenta, esposa de Estenoz. Publicada en el periódico Previsión (del PIC) en 1910.
2 Rolando Rodríguez (2010). La conspiración de los iguales. La protesta de los Independientes de Color en 1912. La Habana: Imagen Contemporánea y Fermoselle, p. 5
3 Rafael Fermoselle (1998) Política y color en Cuba. La guerrita de 1912. Madrid: Colibrí, pp 160 y ss.
4 “De Estenoz a Knox, por conducto del cónsul en Santiago de Cuba”, 15 de junio de 1912. NA/RS, microcopy 488, rollo 7. Para poder reproducirla por mi parte, agradezco la generosidad del investigador cubano Emilio Cueto, que la localizó en Washington, y del jurista estadounidense Bradley Hayes, que me envió otra copia del mismo documento desde Yale University.
5 Rolando Rodríguez (2010). La conspiración de los iguales. La protesta de los Independientes de Color en 1912. La Habana: Imagen Contemporánea y Fermoselle, p. 13
6 Original del New York Times, traducción al español: OnCuba
“Gómez is exonerated
“Documents Show He did Not Plot with Estenoz, Negro leader. “Havana, July 9. Documents found on the body of Evaresto (sic) Estenoz, the organizer of Cuba`s negro uprising, were positively identified this afternoon by four handwritten experts as written by Estenoz. Speaker Ferrara and others declare that these documents clearly disprove the charges made by the enemies of President Gómez that he plotted with Estenoz to start the negro rebellion. “Two documents were found. One was addressed to Secretary of State Knox in cable form, to be sent through the American Consul at Santiago. It is a lon statement of the charges against the Gómez Government and the Federal troops whom Estenoz accused of many atrocities. He declare that President Gómez purposely sowed the seeds of discord between the whites and negroes, and misrepresented the facts in the hope of obtaining the sympathy of Americans and distracting attention from his faults. Estenoz asked finally that the American Government send a committee of investigation to Cuiba to ascertain the facts. “The second document is an answer to the proclamation issued by President Gómez calling the country to arms to put down the negro uprising. Estenoz declared that everything President Gómez said in his proclamation was false, that the independent colored party was peaceful until Gomez removed every possible opportunity for it to exist legally. He said the President had deliberately and without cause conducted a veritable persecution against the negroes, denying them their civil rights, for which they fought as bravely as did the white Cubans.”
7 Fondo: Ejército de Cuba (Instituto de Historia de Cuba)
8 Fondo: Ejército de Cuba (Instituto de Historia de Cuba)
9 Por ejemplo, podría hacerse un análisis caligráfico, comparándola con otros manuscritos de Estenoz. También se podría hacer un cotejo de firmas entre esa carta y documentos en los que la firma aparece de puño y letra la firma de Estenoz. Uno de ellos, muy legible, y perfectamente conservado, puede encontrarse en: Archivo Nacional de Cuba. “Carta dirigida a Juan Gualberto Gómez por Evaristo E. Estenoz”, fechada en La Habana 9 de agosto de 1905 (19 de diciembre de 1906), Fondo Adquisiciones N-19. Caja 19, signatura 1259.
Fuente: https://oncubanews.com/opinion/columnas/la-vida-de-nosotros/vindicacion-de-evaristo-estenoz/
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