A propósito de la entrega del Premio Maria Moor Cabot a la bloguera mercenaria cubana Yoani Sánchez , agencias cablegráficas y diferentes medios de prensa no han vacilado en reproducir las mentiras y manipulaciones procedentes de la Facultad de Periodismo de la Universidad de Columbia en Estados Unidos que, con el premio otorgado por esa institución, […]
A propósito de la entrega del Premio Maria Moor Cabot a la bloguera mercenaria cubana Yoani Sánchez , agencias cablegráficas y diferentes medios de prensa no han vacilado en reproducir las mentiras y manipulaciones procedentes de la Facultad de Periodismo de la Universidad de Columbia en Estados Unidos que, con el premio otorgado por esa institución, sólo dejan en evidencia que, a pesar de los recientes y supuestos «cambios» en el gobierno de Estados Unidos, la guerra mediática contra Cuba continúa. Veamos algunas de las tergiversaciones perpetradas por la Universidad estadounidense:
1 -Según Nicholas Lemann, el decano de la Escuela de Periodismo de la Universidad de Columbia: «Sánchez ejerce su oficio con ingenio y recursos escasos».
-Resulta curioso decir que Generación Y se hace con escasos recursos. Un «blog» que tiene ¡60 veces el ancho de banda que dispone toda Cuba para todos sus usuarios de Internet!, cuenta con versiones en 18 idiomas (no un sencillo traductor para bloguers), posibilidades para la publicidad en Internet y para almacenar la memoria del sitio por un buen tiempo. Eso únicamente, como dice la periodista Norelys Morales Aguilera , sólo se puede mantener gracias a una fuerte subvención. La propia Yoani, en un video colgado en Youtube bajo el titulo de Conversacion con Yoani en La Habana Mi blog: Jinetero… ¿y qué?, corrobora lo costoso que resulta mantener un blog de ese «calibre». A la sugerencia del entrevistador de que a otros blogueros fuera de la Isla les había llamado la atención de que en Generación Y apareciera un botón solicitando donaciones, la bloguera responde: «Mi blog me consume mucha energía y dinero, porque yo tengo que actualizar mi blog en sitios públicos, donde el precio de una hora de internet oscila entre 5 y 7 pesos convertibles y a veces llega a mucho más, con las velocidades de aquí. Entonces mi blog es un sacerdocio. Yo no recibo dinero por hacer mi blog. Recibo donaciones…que tampoco son muchas porque la gente muchas veces habla más de lo que ayuda, pero que me permiten financiar mi acceso a internet directamente, o sea, lo uso para eso. Paralelamente a eso, yo me gano la vida dando clases de español. Enseño mi lengua, esa que aprendí, que domino bastante bien, hago traducciones de alemán. Paseo a turistas por La Habana…enseño… hasta el museo de la Revolución… Además tengo que pagar un dominio en Internet. Tengo un servidor que pagar y todo eso genera gastos que yo no puedo asumir. Activé el botón precisamente por la presión de los comentaristas, de los visitantes, que me querían ayudar de alguna manera. Pero no creo haber cambiado mi perfil editorial, ni las cosas que escribo por eso. Y el que se sienta defraudado, un poco insultado con el asunto, bueno, pues entonces desconoce los detalles de la vida cubana…las complicaciones… Y además, yo lo he dicho. Dependiendo de la autonomía económica que tenga una persona, podrá tener mayor o menor autonomía política. Las personas en Cuba que dependen salarialmente del Estado, está claro que no se pueden permitir una actividad así… Es realmente una pena que el «desinteresado» Josef Biechele, quien administra Generación Y desde Alemania, así como los fans de Yoani que le envían «comisiones», no se muestren tan altruistas y solidarios con otros blogueros cubanos ajenos a la guerra mediática contra Cuba. Muy bien podrían sufragar blogs en la isla sobre temas tan disímiles como las distintas razas de perros, las orquídeas cubanas o la extinción de las cotorras. En un país donde al acceso a Internet es un lujo, a uno y a otros, no les van a faltar internautas a quienes ayudar. Entre premios como el Ortega y Gasset y el Maria Moors Cabot parece que los recursos de la bloguera mercenaria cubana no son tan escasos. Según el periodista español del diario La República, Guillermo Nova –el mismo que hace unos meses fotografió a «la perseguida de lageneraciony» mientras posteaba, en medio de la mayor paz del mundo, en un lujoso hotel de La Habana- la mercenaria necesita una cuenta en un banco de Valencia para guardar sus «ahorros».
2- El blog de Yoani: «Se trata de una mezcla de observaciones personales y de sólidos análisis, que refleja mejor que la mayoría la vida diaria, tal y como viven los cubanos en la isla, llena de frustraciones y esperanzas», añade la Escuela de Periodismo.
-Realmente deja mucho que pensar del prestigio de una institución académica el afirmar que los inventarios y auditorías de bodega que conforman los post de Yoani son unos «sólidos análisis» de algo. Si la facultad de Periodismo de la Universidad de Columbia, o cualquiera otra persona, desea saber qué falta en las tiendas cubanas, puede muy bien consultar el extenso y profundísimo informe contra el bloqueo de Estados Unidos contra la Isla que se presenta cada año ante la Asamblea de las Naciones Unidas. Las carencias y las necesidades del pueblo cubano no son ningún descubrimiento, ni algo que Cuba, para nada, oculte. Más bien, todo lo contrario. Son los medios de comunicación internacionales -los mismos que engendran globos mediáticos como la mercenaria Yoani- los que se empeñan en silenciar que la principal causa de esas carencias se encuentra en la guerra sucia desatada, desde hace medio siglo, por los Estados Unidos contra Cuba.
3-Yoani no es una política: y tiene un poder extraordinario» para narrar el día a día de la vida cubana,»sin reiterar la batalla dialéctica que Cuba y Estados Unidos han fomentado hasta la saciedad por cinco décadas».
-Los promotores de la ex trabajadora de la revista contrarrevolucionaria Consenso se encaprichan igualmente en repetir una y otra vez que la «labor» de bloguera de Yoani Sánchez nada tiene que ver con la política. O sus patrocinadores son tan mentirosos como ella, o no han leído una palabra de lo que la «pacifista y apolítica» bloguera escribe. Como ya hemos dicho en otras ocasiones, la degeneracióny parecer seguir al dedillo, en buena parte de sus textos, el guión trazado por ese engendro anticubano denominado como Plan Bush. La mercenaria, en sus delirios, escucha pasar manifestaciones antigubernamentales bajo su ventana,ruega porque ocurra una noche de los cuchillos largos y además pronostica una ola verde en Cuba aún más intensa que la de Irán.
Nada más parecido a incitar a la subversión y a la violencia, y a»reiterar la guerra sucia que Estados Unidos ha fomentado contra Cuba hasta la saciedad por cinco décadas». ¿O se tratará de alguna nueva conspiración contra Cuba organizada por las Islas Palau?
4- «Yoani está prisionera en la Isla…» -La Escuela de Periodismo de la Universidad de Columbia, en EE.UU., lamentó igualmente que el Gobierno cubano no permitiera a la bloguera Yoani Sánchez viajar a Nueva York para recibir la mención especial a la excelencia periodística que le fue concedida en los premios María Moors Cabot de este año. No recuerdo que esa Institución estadounidense haya dicho una sola palabra sobre la visa que el gobierno de Estados Unidos le negó recientemente a Silvio Rodríguez ni sobre la prohibición a científicos de EE.UU. de participar en un evento médico en la isla. No tengo noticias de que el claustro de la Facultad de Columbia haya emitido ninguna declaración sobre la negativa de la OFAC a que viajen a Cuba los patrocinadores de la Orquesta Filarmónica de Nueva York. Los directivos de la Facultad de Periodismo de Columbia deberían preocuparse seriamente de cómo es posible que en el país más «democrático y libre del mundo», desde hace 50 años -el Estado-, lniega el derecho a viajar a Cuba nada menos que a cerca de 400 millones de estadounidenses. Sólo, por el simple hecho de que, en la Isla, la gente vive y piensa de una manera diferente a la administración de turno en Washington.