Ecologistas en Acción denuncia las contradicciones entre los discursos de movilidad sostenible y las políticas reales, que siguen apostando por facilitar el uso del coche en nuestras ciudades. Las consecuencias de esta situación son nefastas para nuestra calidad de vida. El lunes 22 de septiembre se celebra el Día sin Coches. Se trata de una […]
Ecologistas en Acción denuncia las contradicciones entre los discursos de movilidad sostenible y las políticas reales, que siguen apostando por facilitar el uso del coche en nuestras ciudades. Las consecuencias de esta situación son nefastas para nuestra calidad de vida.
El lunes 22 de septiembre se celebra el Día sin Coches. Se trata de una convocatoria de ámbito internacional, apoyada desde el año 2000 por la Comisión Europea. Pero, a pesar de sus cercanos comienzos, el Día sin Coches ya ha perdido empuje y contenido en manos de unos gobiernos municipales que, en su gran mayoría, continúan desarrollando cada día una política de movilidad destinada a favorecer la circulación de coches como principal modo de transporte urbano. Del mismo modo, la propia Comisión Europea apenas si hace énfasis en esta jornada, que casi ha desaparecido de sus convocatorias desde 2007.
Es cierto que todos los administradores públicos hablan de movilidad sostenible, pero no es menos verdad que por cada euro que se invierte en movilidad alternativa muchos más se gastan en favorecer el uso del automóvil. El resultado: cada día utilizamos más veces el coche y menos el transporte público o los desplazamientos a pie o en bicicleta.
A causa de este escaso interés, la mayor parte de los Ayuntamientos improvisan actividades, que luego no se traducen en la adopción de medidas permanentes, sin apenas cortes de tráfico (verdadero núcleo del Día sin Coches), sin dar prioridad al transporte público ni a peatones y ciclistas, con escasa o nula implicación de las organizaciones ciudadanas, a las que no se da la oportunidad de participar, e inexistencia de campañas de información a la ciudadanía.
Por cierto que ésta última es, también, una grave carencia achacable no sólo a los Ayuntamientos, sino también al Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino, coordinador de la campaña en España. No es de recibo que la mayor parte de los automovilistas se entere del Día sin Coches ése mismo día, oyendo la radio dentro de un atasco.
Ecologistas en Acción quiere transmitir a nuestras corporaciones locales su preocupación por la gravedad de los problemas ambientales que la expansión del automóvil provoca en la ciudad: degradación y ocupación del territorio, contaminación atmosférica y acústica, siniestralidad y destrucción de la vida urbana, emisiones de CO2 (la mitad de las emisiones del transporte causantes del cambio climático se producen en las ciudades)…
Y recordarles que el éxito o el fracaso del Día sin Coches es el resultado de las políticas de movilidad llevadas a cabo todos los días del año. Hace tiempo ya que llegó la hora de los planes de movilidad sostenible, de democratizar la calle, dándole prioridad a sus principales usuarios, los peatones, y reduciendo el abusivo espacio ocupado por el automóvil, para permitir la expansión de otros modos de transporte más racionales, eficaces, seguros, sostenibles y saludables. Hasta el momento, parece que nuestros administradores no se han enterado.