GRR rechaza el documento publicado en septiembre, «El boom de la soja: bendición o maldición para los bosques y sabanas de América del Sur» comisionado por el WWF (World Wildlife Fund – Fundación Vida Silvestre) en lo que se propone un modelo de «Soya Sustentable.» Señala GRR que se propone incorporar más de 10 millones […]
GRR rechaza el documento publicado en septiembre, «El boom de la soja: bendición o maldición para los bosques y sabanas de América del Sur» comisionado por el WWF (World Wildlife Fund – Fundación Vida Silvestre) en lo que se propone un modelo de «Soya Sustentable.» Señala GRR que se propone incorporar más de 10 millones de hectáreas a los actuales 15 millones de soya transgénica. Significa destrucción masiva de las Amazonas. Las empresas y los gobiernos, para evitar una catástrofe ecológica o un estallido social, han buscado aliados entre las ONG para que los ayuden bajo la pretensión de que se trata de un proyecto sustentable. Mientras tanto, el ROTARY y CARITAS continúan incorporando alimentos sobre la base de soja en los comedores para niños y para indigentes en Argentina, legitimando así entre los más pobres el modelo de los monocultivos genéticamente modificados, a la vez que establecen un doble estándar alimentario para la población, en el cual a los pobres les tocan los forrajes transgénicos.
«Lo rechazamos porque pone en evidencia actitudes de resignación y de aceptación del modelo globalizado de las sojas, modelo manejado en todas las fases de la producción y comercialización por las transnacionales agroquímicas, desde la producción y venta de semillas, la distribución de pesticidas, las máquinas para siembra, cosecha y fumigación, hasta el dominio de los puertos de exportación. Necesitamos recuperar nuestra dignidad nacional y denunciar el modelo de la Soja y el rol de país productor de » commodities » y experimento biotecnológico que se nos ha impuesto. Necesitamos volver a producir semillas, recuperando nuestros patrimonios genéticos extraviados y creando las bases para un modelo agrario diferente en el cual la Soberanía Alimentaria y el Desarrollo Local sean las metas nacionales que nos propongamos.»
«Estas producciones de soja forrajera transgénica para la producción industrial de carnes significa mayor deterioro de la vida en el campo, una enorme amenaza de desertización de los suelos, desplome de los ecosistemas agrarios y hambre para nuestros pueblos, innumerables pérdidas de puestos de trabajo y de un gigantesco desplazamiento de población rural hacia los suburbios de pobreza en las grandes urbes….Argentina fue el granero del mundo y uno de los países que mayor producción orgánica certificada tenía. La agricultura de commodities basada en agrotóxicos y en OGM le cambió el perfil en el mercado internacional pero el maíz orgánico no se puede producir más debido a la contaminación y la miel Argentina ha sido desplazada del mercado debido a sus residuos químicos.»
Aceptando una realidad dibujada por las transnacionales, la WWF intenta condenar a todo el sur de nuestro continente, al rol de meros productores de forrajes, y sin alternativas de intentar defender nuestra seguridad y soberanía alimentaria ( para suplir las necesidades del norte) y no existe una mirada para la creciente pobreza y el hambre de la Argentina. » GRR considera la propuesta un vergonzoso intento de colaboración de grupos ambientalistas y de ONG del primer mundo tanto como de sus filiales y representantes locales, con las grandes empresas transnacionales. … «Somos un experimento masivo de paquetes biotecnológicos, un país laboratorio de las multinacionales de la Biotecnología, una Argentina Colonial.»
Argentina: Monsanto exige Pago de Patente de la Soya Transgénica
Monsanto exige al gobierno argentino el pago de $3 por tonelada de soya RR (soya tolerante al herbicida Round-Up de Monsanto) exportada durante los últimos 10 años, en total, aproximadamente $150 millones. Según el Pergamino Rural Corporation , Monsanto tiene la intención de cobrar hasta 7$ por tonelada.
Roxana Balsetti , especialista de la CONABIA (Comisión Nacional Asesora en Biotecnología Agropecuaria) aclaró que el gen RR no fue patentado en Argentina porque no se presentó la solicitud dentro del plazo reglamentario (12 meses) después de su creación. Sin embargo, Monsanto tiene derecho a impedir la importación de soya RR Argentina en aquellos países donde se ha autorizado la patente. Además, explicó, en Argentina se compra la variedad registrada, no el gen patentado.
Dr. Nestor Vittori , presidente de CARSFE (Confederación de Asociaciones Rurales de Santa Fe) recordó que Monsanto trajo soya RR a Argentina hace 10 años, sin condiciones, y a diferencia de los Estados Unidos los productores estaban autorizados para guardar y usar las semillas para las próximas siembras sin pagar regalías. Dijo que Monsanto utilizó a Argentina para lanzar soya transgénica. Afirma que, pretender cobrar regalías en los puertos de destino, constituye una deslealtad comercial. Refiriéndose a otras acciones de la empresa Monsanto, señaló que si Monsanto no se alinea con los intereses del país que se vaya definitivamente de la Argentina y si intenta entorpecer el comercio internacional, se le prohíba toda operación en Argentina.
Información de Adolfo Boy del GRR. , http://www.barrilli.com/bw/index.jsp