El presidente cubano, Fidel Castro, anunció hoy el incremento del salario mínimo de los trabajadores, en una medida que beneficiará a partir de mayo próximo a más de un millón 650 mil personas. Al intervenir ante autoridades y representantes de organizaciones populares, el estadista indicó que la medida entrará en vigor el venidero mes y […]
El presidente cubano, Fidel Castro, anunció hoy el incremento del salario mínimo de los trabajadores, en una medida que beneficiará a partir de mayo próximo a más de un millón 650 mil personas.
Al intervenir ante autoridades y representantes de organizaciones populares, el estadista indicó que la medida entrará en vigor el venidero mes y elevará las remuneraciones para todos los empleados que se sitúan actualmente en una escala entre 100 y 224 pesos.
El aumento, añadió, consiste en llevar el salario mínimo a un nuevo tope de 225 pesos, con ingresos adicionales para un millón 657 mil 191 trabajadores, lo cual representa al estado una erogación anual superior a los mil millones de pesos.
Asimismo, el mandatario aseguró que se mantendrán los esquemas de pago por resultados de trabajo (vinculación), así como los mecanismos surgidos del proceso de perfeccionamiento empresarial en varias entidades del país.
La modificación del salario mínimo, indicó, favorece a obreros agrícolas, fumigadores, operadores de equipos ligeros en la agricultura, técnicos en fitosanitarios, auxiliares diversos en centros educacionales y hospitales, entre otros.
De esa forma, señaló, el salario medio crecerá de 282 a 312 pesos, a lo cual se suma la reciente resolución que elevó el monto de las pensiones, todo lo cual beneficia a tres millones 600 mil personas «que recibían los más bajos ingresos».
Ambas iniciativas, señaló Fidel Castro, representan para el gobierno el desembolso de dos mil 255 millones de pesos más anualmente, con un incremento promedio por persona beneficiada de 52 pesos mensuales.
El mandatario recordó también que «todos los salarios se van a estudiar, no se va a olvidar a nadie», pero se imponía la necesidad de comenzar por aquellos que menos percibían.