Pasa el tiempo y los del Partido Popular no se recuperan del batacazo electoral que sufrieron el ya lejano 14-M. La táctica de la mala leche y del NO como respuesta parecía algo pasajero de la Faes aznariana, pero conforme pasan los meses nos estamos dando cuenta de la conversión estratégica de este discurso que […]
No es que a mí no me guste el debate, al contrario, pienso que las sociedades democráticas se caracterizan por la participación y la confrontación de ideas. Pero el Partido Popular, realmente, no persigue esto, más bien lo opuesto: perturbar la convivencia para restar credibilidad al artículo 1 de la Constitución que habla del Estado social y democrático de Derecho. Un claro ejemplo lo tenemos en el comportamiento cicatero y mentiroso al respecto de la nueva ley de educación, la LOE. Quien se lea la ley, que es mejorable, sin duda, percibirá que todos los motivos que condujeron a las pasadas movilizaciones no tienen razón de ser ya que los padres podrán elegir la educación de sus hijos, la religión mantiene su estatus, los colegios concertados recibirán más dinero, etc. ¿Qué buscan, entonces? Minar eso que la Constitución llama Estado social, ya que saben que la educación, junto con otros derechos, con un desarrollo legislativo adecuado, es lo que da coherencia y sentido a estos valores constitucionales. Preferirían una ley que menguara los años de obligatoriedad de la enseñanza, que estableciera itinerarios y reválidas, que nos examinara con nota cuantitativa de moral católica y que para su mejor gestión, fueran los centros concertados y privados los adjudicatarios de este derecho, que es de todos.
Ante esta situación, la respuesta de la izquierda permanece en el limbo de los justos y con eso se queda. La reacción más aireada que se les ha ocurrido fue la de enviar un mensaje con el texto «el dinero público, para la escuela pública. Pásalo». Y lo pasé, pero hay que hacer más. El PSOE tiene tantos frentes abiertos que teme que la educación le dé la puntilla y busca la externalización de las acciones sin encontrar la fuerza movilizadora en los sindicatos o en la misma Izquierda Unida, que buen papel haría en estos momentos, si no se hubiera puesto tanto empeño en acabar con ella. Quizás Zapatero se tenga que «plantar» y, educadamente, haga las cuentas de los obispos y les sugiera que el más de medio billón de las antiguas pesetas que anualmente se llevan, podría invertirse directamente en educación y sanidad, que es lo que más valoran los españoles, según la encuesta del CIS, y así conseguir más votos.
Al Partido Popular le da igual, esta semana con la carta de Rajoy comienza la tregua de siete días, pero muy pronto se rayarán de nuevo con su ataque al Estado social y democrático de Derecho. El colectivo Tersites, que es de izquierdas, que quiere movilizarse, pero que no sabe qué hacer, se ha puesto al lado de las nuevas tecnologías y ha creado un chat sobre este artículo 1 de la constitución, al que puedes entrar sin registrate y sin nick y que ha empezado así:
-Fijo, los coleguis del pepé están enteros rayaos. No paran con el temón educata de la LOE. Sabesss, tronquito, no son buena gente, se aprovechan del buen rollito de zetapé que les da la pasta y luego le curran una mani con juliandronas desocupás. (Cibertersites)
– Sí tío, estamos ya tronchaos de los pibes del pepé, pero cuando hay flojera y no se cierran filas, pasa que vienen los del cuello blanco otra vez con el vinilo. (comisiones.com)
– No reconozco vuestro nick. A mí me gusta pinchar con el ordenata y paso de longuis con sangre de horchata, lo que mola es ir de garitos y luego hacértelo con quien sea. (soyuppi.hotmail)
– Tú flipas, contigo no vamos ni al simo.(ifabcongresos.es)
– Pues yo, cuando oiga la palabra educación, echo mano a la pistola (delosdemillánastray)
(continúa en el foro)