El 13 de enero de 2005, murieron 10 trabajadores de una contrata del Ayuntamiento de Burgos y 2 quedaron heridos. A pesar de las advertencias de los vecinos y del indudable riesgo que conllevaba, los responsables de la empresa (Arranz Acinas) no tuvieron problema en situar maquinaria y combustible en el lugar que servía de […]
El 13 de enero de 2005, murieron 10 trabajadores de una contrata del Ayuntamiento de Burgos y 2 quedaron heridos. A pesar de las advertencias de los vecinos y del indudable riesgo que conllevaba, los responsables de la empresa (Arranz Acinas) no tuvieron problema en situar maquinaria y combustible en el lugar que servía de vestuario a los trabajadores y que, para mayor negligencia, tenía un techo de poliuretano, altamente inflamable.
Un año después, el pasado 13 y 14 de enero de 2006, el colectivo de Corriente Roja (CR) de Burgos organizó un singular acto de denuncia contra la siniestralidad laboral. Una representación teatral recreó un accidente laboral inspirado en los sucesos acaecidos en la ciudad un año atrás y convocó en torno al centenar de personas ambos días.
La valoración que CR-Burgos hace del resultado del acto «es muy positiva, tanto por la asistencia de público como por el carácter reivindicativo y original del acto, que nos ha permitido concienciar a 100 personas en los escasos 20 minutos que duró la representación, consiguiendo mayor atención que la lograda a través de otros actos de tipo más tradicional como una concentración. Además, la representación se realizó enfrente de las oficinas de Arranz Acinas y del Ayuntamiento, los máximos responsables, generándoles una sensación, cuanto menos, de inquietud. También queremos resaltar que se han creado considerables expectativas alrededor del acto, a pesar del boicot informativo a cargo de los medios de comunicación al servicio de la patronal. Especialmente emotivos han sido el mensaje de apoyo recibido de Michael Collon, así como de los múltiples compañeros/as de CR y CO.Bas, algunos/as de los/as cuales se desplazaron para asistir personalmente al acto, y de colaboradores/as y simpatizantes de Burgos».
Reivindicar a los trabajadores muertos como bandera de lucha no ocurre todos los días. Normalmente mueren en silencio, en medio de tímidas protestas de CCOO y UGT. En este sentido, CR-Burgos afirma que «todos/as los/as trabajadores/as muertos/as por la patronal deben ser bandera de lucha de la clase obrera, no sólo de CR. Este siniestro fue especialmente brutal por el número de fallecidos y por la absoluta dejadez en las condiciones en que se obligaba a trabajar a los obreros, pero este tipo de hechos se repite a diario. Nos sentimos identificados como jóvenes precarios, explotados. El objetivo es, a través de la memoria de los hechos, concienciar, y no, como hacen los sindicatos burócratas, ir a hacerse la foto para después echar tierra sobre estos sucesos. Creemos, por ello, que es un día en que especialmente no podemos olvidar la precariedad a que nos vemos sometidos/as. Para otros años seguiremos dando caña».
Pero la protesta contra la cruda realidad laboral continuará. El Gran Tripartito (Gobierno, CEOE y CCOO-UGT) está cocinando a escondidas una nueva reforma laboral que está provocando la lenta pero decidida gestación de un movimiento estatal de sindicatos combativos, organizaciones políticas y sociales que pretende hacer frente a está nueva vuelta de tuerca del capitalismo. Así mismo, para CR-Burgos el acto del pasado fin de semana supone «el pistoletazo de salida en la campaña contra la reforma laboral».
Según comentan los organizadores, esta peculiar movilización ha pretendido compartir la calle con otras protestas que se están dando en Burgos, como las acciones contra cines Golem (en solidaridad con un compañero despedido y procesado por la empresa), la dura lucha vecinal en el barrio de Gamonal (contra la construcción de un parking privado) o la intensa actividad que mantienen en la ciudad militantes castellanistas. «Consideramos particularmente importante el movimiento vecinal originado en Gamonal, porque siempre ha sido un barrio obrero y la reacción popular ha sido consecuencia de la política represiva del PP. Pero tampoco hay que olvidar la protesta de los/as trabajadores/as de Matutano, los/as despedidos/as de Foto-Nice, ahora denunciados/as por injurias y amenazas por su ex jefe… Y otras más. El problema es que se trata de luchas no coordinadas, con lo que el tejido social a veces crece aisladamente. En este sentido, nuestro acto ha pretendido ser una contribución a la lucha obrera y a ampliar el tejido social», subraya el colectivo.
Por último y según señala CR-Burgos, pronto podrá descargarse un video del acto desde su web (www.corrienterojaburgos.org)
www.la-plataforma.net