Mesas de Conversación con la Ciudadanía y una manifestación frente a la catedral, fueron las actividades realizadas en Santiago por las organizaciones feministas y de mujeres en torno al día por la Despenalización del Aborto en América Latina y el Caribe el 28 de septiembre. La Coordinadora de Feministas Jóvenes, organizó desde el 26 […]
Mesas de Conversación con la Ciudadanía y una manifestación frente a la catedral, fueron las actividades realizadas en Santiago por las organizaciones feministas y de mujeres en torno al día por la Despenalización del Aborto en América Latina y el Caribe el 28 de septiembre.
La Coordinadora de Feministas Jóvenes, organizó desde el 26 hasta el 28 de septiembre, mesas de conversación ciudadana acerca de la Interrupción Voluntaria de los Embarazos (IVE) dispuestas a debatir y entregar argumentos a quienes se acercaran.
En tanto, el mismo 28 al medio día, el Foro Red de Salud y Derechos Sexuales y Reproductivos, la Red de Salud de las Mujeres Latinoamericanas y del Caribe, y la Red Chilena contra la Violencia Doméstica y Sexual, entre otras, organizaron una manifestación lúdica frente a la catedral de Santiago.
Estas organizaciones señalaron respecto de las interrupciones voluntarias de los embarazos que: «levantamos nuevamente nuestras voces exigiendo la apertura de un gran diálogo nacional sobre el aborto, alejado de dogmas y falsa moral. Un diálogo que nos permita asumir el aborto no solo como una prioridad para la salud pública, ya que el tratamiento de sus complicaciones exige altos costos para el sistema, sino que sobre todo como un tema de derechos humanos y de justicia social. Un diálogo que nos conduzca de una vez por todas a legislaciones respetuosas de la vida y autonomía de las mujeres».
Las mesas organizadas por la Coordinadora Feministas Jóvenes tuvieron como objetivo interpelar a la ciudadanía respecto de un tema que atañe a todos y todas en tanto ciudadanas/os con derechos, dentro de un Estado laico y democrático, según explicaron las participantes de esta organización.
En la calle República, Plaza de Armas, y el paseo Huérfanos, integrantes de la Coordinadora, del Foro de Derechos Sexuales y Reproductivos, y de otras organizaciones feministas y de mujeres se instalaron en las mañanas y tardes a repartir material y conversar con quienes pasaban por la calle o se acercaban curiosos/as a los stands.
El punto con mejor recepción fue República, barrio universitario donde los y las jóvenes se acercaron de buena gana a pedir material o a escuchar los argumentos que las feministas entregaban respecto de la libertad de las mujeres sobre sus cuerpos, y la necesidad de vivir la maternidad como un deseo y no un castigo u obligación.
Macarena Fritis, quien estuvo en la mesa de República junto a su hija de meses y su pareja, señaló «según mi evaluación fue todo un éxito. Los y las cabros/as estudiantes estaban muy interesados/as en los derechos sexuales y reproductivos, nos preguntaban cosas… se nos hizo poco el material».
A esta actividad también se sumaron otras organizaciones, como «Humanas», que instaló una mesa en Providencia, donde se enfocaron principalmente en las jóvenes. Lorena Fries, presidenta de la organización, señaló se refirió al interés de la ONG en ser parte de las mesas ciudadanas: «Humanas es una ONG feminista que promueve los derechos humanos de las mujeres. ¿Qué mas humano de las mujeres que los derechos sexuales y reproductivos? ¿Qué mas evidentemente controlado que el cuerpo de las mujeres y en ese sentido el aborto como la expresión máxima de la falta de dicha soberanía?»
La Interrupción Voluntaria del Embarazo (IVE), es una realidad en nuestro país donde se practican 160.000 al año. Las malas condiciones sanitarias y psicológicas en que estos se realizan debido a que es ilegal, atenta contra los acuerdos internacionales que Chile ha firmado y ratificado, como la Declaración universal de Derechos Humanos, el Pacto internacional de derechos económicos, sociales y culturales; y la CEDAW, según explicaron las organizadoras de esta actividad.
Hasta 1989 existía en Chile el aborto terapéutico, procedimiento cuyo fin es salvar la vida de la madre cuando ésta se encuentra en peligro; derecho que la dictadura le arrebató a las chilenas, transformándonos en el único país en Sudamérica, y uno de los 17 en el mundo, donde no existe el aborto terapéutico.
La comisión organizadora de las Mesas de Conversación Ciudadana, señaló que en lugares supuestamente menos modernos, como Irán o Afganistán, se permiten las interrupciones voluntarias de embarazos, siendo la salud mental una de las causas que justifican esta alternativa por ejemplo en Irak.»Las restricciones que la Iglesia Católica impone en un Estado supuestamente laico, redundan en poca educación sexual, doble estándar y falta de derechos sexuales y reproductivos.
«La Iglesia y los sectores conservadores de este país no han aceptado las campañas de educación sexual o de VIH, se espantan por la mención del preservativo como método de protección, se sulfuran cuando se intenta entregar la píldora del día después y finalmente se ciegan ante la práctica de IVE en nuestro país», señaló la Coordinadora de Feministas Jóvenes en un Comunicado.
Paradójicamente la vida sexual en Chile se inicia en promedio a los 15 años, y el embarazo adolescente es una realidad: 38 mil niñas y niños nacen al año de madres menores de 19 años, sin planificación ni deseo. Y aún en Chile todo tipo de Interrupción Voluntaria del Embarazo (IVE) es ilegal; y la Píldora del día después ha debido pasar por los tribunales para poder repartirse libremente en los establecimientos públicos de salud.