Sostiene que hay falta de pruebas y que los indicios son «muy débiles e insuficientes». Dice que no se ha podido acreditar que Egunkaria fuese un instrumento de ETA. La Fiscalía de la Audiencia Nacional ha retirado las acusaciones contra los siete procesados en el caso Egunkaria y ha pedido el archivo de la causa […]
Sostiene que hay falta de pruebas y que los indicios son «muy débiles e insuficientes». Dice que no se ha podido acreditar que Egunkaria fuese un instrumento de ETA.
La Fiscalía de la Audiencia Nacional ha retirado las acusaciones contra los siete procesados en el caso Egunkaria y ha pedido el archivo de la causa abierta contra este diario, clausurado en 2003 por su presunta vinculación a ETA.
El fiscal ha presentado un escrito ante la Sección Primera solicitando el sobreseimiento provisional de la causa al considerar que hay falta de pruebas y que los indicios incriminatorios son «muy débiles e insuficientes».
El sobreseimiento podría suponer el cierre del proceso, iniciado en noviembre de 2004 por el juez Del Olmo, sin que se celebre juicio alguno, pero al ser provisional podría reabrirse de aparecer nuevos indicios. La petición no es determinante, aún así, porque se mantienen las acusaciones de la AVT y Dignidad y Justicia.
La Fiscalía sostiene que no se ha podido acreditar que Egunkaria fuese un instrumento de ETA. Sí considera demostrado, en cambio, el interés de ETA por el proyecto de este periódico.
Actualmente, los siete procesados por esta causa se encuentran en libertad con fianza. Son Xabier Alegría, que que se encuentra también procesado en el macrosumario 18/98; Martxelo Otamendi, último director del diario; Peio Zubiria, ex director; Xabier Oleaga, redactor jefe; Juan María Torrealday, presidente del Consejo de Administración y del Consejo Editorial; Iñaki Uria, ex director; y José María Auzmendi, presidente del Consejo de Administració
Casi cuatro años después del cierre de ‘Euskaldunon Egunkaria’
La Guardia Civil precintó el edificio del único diario escrito íntegramente en euskera el 20 de febrero de 2003. Diez personas fueron detenidas y varios denunciaron torturas.
El último ejemplar de Euskaldunon Egunkaria salió a la calle por última vez el 20 de febrero de 2003. Esa misma madrugada, varias dotaciones de la Guardia Civil entraron en las oficinas del rotativo en Andoain (Gipuzkoa) y precintaron el edificio.
Además, en la misma operación diez personas fueron detenidas, acusadas de formar una asociación ilegal: Xabier Alegria, Txema Auzmendi, Xabier Oleaga, Martxelo Otamendi, Joan Mari Torrealdai, Iñaki Uria, Pello Zubiria, Inma Gomila, Luis Goia y Fermin Lazkano.
Tras permanecer cinco días incomunicados, Gomila, Lazkano, Otamendi y Goia fueron puestos en libertad y el juez ordenó prisión para los seis restantes. A lo largo de tres años largos han ido saliendo de la cárcel, pagando sus respectivas fianzas, y están a la espera de juicio.
El proceso que puso en marcha Del Olmo ha seguido adelante, a pesar de que numerosas asociaciones e instituciones de diferente índole han exigido el archivo del caso en los últimos tres años. Los imputados también interpusieron un recurso en la Audiencia Nacional, pidiendo el archivo, pero la Audiencia Nacional confirmó el procesamiento de los acusados.