Zainah Anwar, de origen malasia, es la directora de una de las organizaciones de mujeres islámicas más importantes, Sisters in Islam. Gracias a sus palabras podemos entender, en esta entrevista, cómo la mujer musulmana se encuentra hoy entre dos desafíos: de un lado, contra el patriarcado en las sociedades islámicas tradicionales y, de otro lado, contra el estereotipo islamofóbico occidental que la identifica eternamente como oprimida.
Háblanos de la organización «Sisters in Islam». ¿De que se ocupa?
Básicamente es un grupo formado por mujeres que trabaja por los derechos de las mujeres en el marco del Islam. Estos derechos se basan sobre principios de igualdad, justicia, libertad y dignidad y no hay nada que contradiga la coexistencia de la religión con el pedido por los derechos de las mujeres. Para tener una visión más amplia de las actividades de la organización, os invito a visitar el portal Internet www.sistersinislam.org.my
¿Crees que los problemas que sufren las mujeres dependan del Islam? ¿O sea, el Islam, en cuanto religión, es un problema?
Creo que el problema es, antes de todo, el patriarcado, no la religión, sino como el hombre ha preparado convenientemente el uso de la religión escondiéndose detrás de la infalibilidad de la palabra de Dios. Es entonces realmente el patriarcado el problema y no el Islam en sí mismo. No es la religión, sino el uso de la religión, a través de una mala interpretación, que justifica la discriminación.
¿Crees que la representación de la mujer musulmana en Occidente sea un retrato real?
El Occidente presenta a menudo a la mujer islámica sólo como oprimida, controlada, discriminada, pero no todas las mujeres son oprimidas, controladas, discriminadas en el mundo musulmán, sobre todo durante los últimos diez años. Son las mujeres musulmanas que han empezado a introducir nuevos desafíos dentro de la sociedad, desafiando las tradicionales políticas religiosas y el uso de la religión para fines discriminatorios. Son las mujeres, más que los hombres, que tienen el coraje de empujar las reformas en el Islam y en las sociedades islámicas.
¿Crees que la situación de algunas mujeres musulmanas puede ser utilizada como caballo de Troya, como instrumento, para criticar el Islam y los países islámicos?
Claro, y eso no es nada nuevo. Durante el periodo colonial pasaba lo mismo. Los colonialistas dicen siempre que están llegando para liberar a las mujeres, llevar la civilización, llevar justicia, cuando en sus propios países la mujer es discriminada. Mira lo que está pasando en Afganistán, las mujeres tienen todavía problemas enormes para conseguir sus propios derechos y el gobierno afgano está soportado por EEUU! Y los EEUU han ido a Afganistán, contándonos que una de sus motivaciones y razones era liberar a la mujer del burqa!
El Islam en Occidente, en Europa por ejemplo, está creciendo mucho. He oído decir que muchas veces las mujeres musulmanas, dentro del propio contexto islámico, sufren mayores problemas aquí que en sus propios países. ¿Eso es debido a la falta de un contexto social homogéneo y familiar?
Si, claro. Estamos hablando de la función de la Comunidad, que es muy consistente. Si vives en un país extranjero, no tienes tu familia estable, el cambio es muy consistente, estás en contacto con un ambiente diverso, una cultura extranjera, y está claro que puedes tener problemas. No tener al lado a los miembros de tu familia, los amigos de toda la vida, las personas de las cuales dependes, significa no poder acceder a una importante red de ayuda y está claro que faltando esa red y viviendo en una tierra extranjera, se vuelva todo más difícil.
En estas situaciones a veces se encuentra una interpretación todavía peor del Islam y de sus preceptos.
Si, y en este caso creo que si sos parte de una Comunidad minoritaria, de una identidad minoritaria, tendrías que hacer lo posible para preservar la unidad de la Comunidad, mostrar el placer de ser parte de ésta y no avergonzarte de la misma ante las otras Comunidades mayoritarias.
Durante el ultimo año se han ido creando muchas organizaciones de mujeres musulmanas, uno de los últimos ejemplos lo podemos encontrar en Italia, donde hace poco ha nacido el «Observatorio sobre Islam y Genero». Mujeres que piden de hablar con su propia voz y que ya no quieren ser el objeto de discusiones y debates demasiadas veces equivocados.
Veo como una cosa positiva el hecho que las mujeres islámicas se están organizando y creo que podría ser también un particular desafío en Occidente. ¿Quién habla por los musulmanes en Occidente? Muchas veces es el hombre, el hombre patriarca, el viejo hombre que habla por cuenta de la Comunidad, pero la Comunidad está compuesta por elementos de gran diversidad. Por supuesto ellos hablan por cuenta de la Comunidad, pero como si ésta fuera monolítica y muchas veces no representan los intereses de las mujeres musulmanas. He interactuado, en distintas oportunidades, con las Comunidades islámicas, sobre todo en Gran Bretaña, y allí también las mujeres se están organizando para lograr sus derechos, sus intereses. Son ellas mismas las que quieren representar sus propios intereses y no delegarlos en algún patriarca de la Comunidad. Hay también mujeres muy conservadoras en las Comunidades musulmanas occidentales. De todos modos, estas organizaciones son muy útiles y pueden además proveer una base y una ayuda a mujeres en dificultad y que tienen que hacer frente a diferentes problemas.
Pues, de un lado hay las sociedades patriarcales y conservadoras, del otro lado en cambio, en los países occidentales, tenemos una equivocada y superficial interpretación del Islam y de la mujer en el Islam. ¿Se puede decir que la mujer musulmana está sola?
Bueno, no, no diría que la mujer musulmana está sola. Es un proceso en el cual las mujeres se están levantando y están ganando terreno. Mira por ejemplo qué pasa en las universidades en los países islámicos, las mujeres son muchas más que los hombres, la situación está cambiando rápidamente, la realidad está cambiando y es por eso que ahora quieren hablar con su propia voz. Y hay una azote de parte de los tradicionales grupos islámicos conservadores contra su organización, porque saben que es un cambio real de la base. ¡Y lo temen! De verdad no creo que la mujer musulmana esté sola, al revés, las mujeres musulmanas se están levantando, organizando, están luchando por sus propios intereses y están en primera fila, más que los hombres, en la batalla por los cambios y las reformas en la sociedad. Es un gran desafío.
Según el ultimo informe de la ONU sobre el desarrollo humano en el mundo árabe, los problemas de la mujer y su propia condición, no dependen exclusivamente de la existencia de sociedades conservadoras o de una equivocada interpretación del Islam, sino muchas veces dependen de la existencia de conflictos, guerras, ocupaciones extranjeras, terrorismo, crisis económicas. ¿Que piensas?
Claro, es verdad, pero no es sólo la mujer, sino toda la Comunidad musulmana que sufre por causa de estas situaciones. Son problemas enormes y cuestiones reales que toda la población musulmana está intentando afrontar, buscando traer desarrollo, paz e igualdad. No hay duda que, en presencia de estas condiciones, las mujeres sufran las mayores consecuencias.
¿Que consejo puedes dar, que solución puedes proponer para que no se tenga una visión equivocada del Islam y una visión equivocada de la relación entre Islam y mujer?
Creo que los medios de comunicación juegan un papel fundamental en este sentido y sobre todo tendrían que mostrar la diversidad que compone la Comunidad musulmana. Hay muchos musulmanes, como yo, que no encajan absolutamente en los tópicos, en los estereotipos tradicionales retratados por los medios de comunicación occidentales. Además, hay que ser conscientes que las Comunidades musulmanas y las mujeres de estas comunidades se están organizando, están desafiando, se están levantando contra el patriarcado y contra el uso de la religión. Hay que saber que hay un creciente movimiento formado por mujeres que están desafiando los radicalismos y es muy importante entonces que los medios de comunicación muestren las diversidades de voces existentes en el mundo musulmán.