El relator especial de la ONU sobre el Derecho a una Vivienda Adecuada, Miloon Kothari, afirmó el miércoles sentirse preocupado por el acceso a la vivienda en el Estado español para personas de bajos ingresos y grupos vulnerables y señaló que los altos precios hace que «los pobres se vean desplazados del centro de las […]
El relator especial de la ONU sobre el Derecho a una Vivienda Adecuada, Miloon Kothari, afirmó el miércoles sentirse preocupado por el acceso a la vivienda en el Estado español para personas de bajos ingresos y grupos vulnerables y señaló que los altos precios hace que «los pobres se vean desplazados del centro de las ciudades a la periferia». También mencionó la situación de los trabajadores inmigrantes, especialmente en el sur, donde, en muchos casos, viven en «viviendas claramente inadecuadas».
En este sentido, en la presentación de su informe sobre el Estado español ante el Consejo de Derechos Humanos, Kothari criticó el gran aumento de los precios experimentado en los últimos años -más del 100% entre 1997 y 2007 en Madrid y Barcelona-, el escaso cupo de viviendas subsidiadas -una media del 6,3% desde principios de 2000 frente al 13,7% de la UE- y la especulación inmobiliaria, entre otros aspectos. Sin embargo, afirmó que el Gobierno español ha dado «algunos pasos positivos» en 2007, entre las que citó las ayudas para el alquiler destinadas a los jóvenes y las medidas adoptadas por el Ministerio de Vivienda para luchar contra el acoso inmobiliario.
Polémica en Flandes
Por otro lado, flamencos y valones se vuelven a enfrentar por la preocupación mostrada por la ONU porque los aspirantes a una vivienda social protegida en Flandes están obligados a mostrar disposición a aprender su lengua oficial, el neerlandés. El Comité de las Naciones Unidas para la eliminación de la discrimi- nación racial ha advertido de que este «código de vivienda» flamenco, incluido en un decreto adoptado en 2006, podría pro- vocar discriminación indirecta por razones étnicas o de nacionalidad.
El ministro flamenco de Vivienda, Marino Keulen, subrayó que «el decreto no exige pasar ningún examen, sólo obliga a hacer un esfuerzo» para aprender el neerlandés.