Quisiera saber según qué ley es un delito izar la bandera republicana y comprender así porque la Fiscalía pide un año de cárcel para Jaume d’Urgell, el protagonista de la acción imputada. O ¿sólo lo es cuando se iza en un edificio público pero no en un espacio privado? Pues no: hace unos días agentes […]
Quisiera saber según qué ley es un delito izar la bandera republicana y comprender así porque la Fiscalía pide un año de cárcel para Jaume d’Urgell, el protagonista de la acción imputada.
O ¿sólo lo es cuando se iza en un edificio público pero no en un espacio privado? Pues no: hace unos días agentes de la Guardia civil irrumpieron en el interior del local de IU en Medina Sidonia (Cádiz) y exigieron que se retirara la bandera republicana que suspendía de un biombo porque, según adujeron, su exhibición, aún dentro de un recinto privado, es anticonstitucional. Y ellos mismos, sin ningún pudor, la descolgaron y se la llevaron.
La bandera franquista, en cambio, la del águila de San Juan, el castillo, el león, las cadenas, las barras y el Non Plus Ultra que ondea en las manifestaciones de la iglesia, y se iza en Ayuntamientos e instituciones regentadas por nostálgicos de la dictadura, no debe ser anticonstitucional.
Yo sé, y debería saberlo también la Fiscalía, que la bandera republicana corresponde a un periodo democrático de la Historia de España, mientras que la otra, la del Águila de San Juan, por el contrario no corresponde a ningún periodo democrático sino todo lo contrario, es decir, es la bandera impuesta no por una Constitución debidamente refrendada y legalizada por el sentir y el voto de la población, sino por un dictador que no sólo montó un golpe de Estado y traicionó el juramento de fidelidad que había hecho a la República, sino que además sometió España a una cruenta guerra civil y tiene sobre su alma -si es que los dictadores la tienen- cientos de miles de muertos, exiliados, hombres y mujeres encarcelados sin más motivo que haber sido fieles a sus convicciones y haber defendido las ideas que defendía la República. Democracia contra fascismo.
Bien está que los franquistas tengan sus nostalgias y defiendan los males en los que se fundamenta un golpe de Estado, pero que treinta años después de la muerte del dictador, todavía un juez inspirado en ellos pueda condenar a alguien por izar la bandera republicana, nos deja pasmados. Porque es así y no con la bandera republicana como se vulnera la Constitución Española, cuyos artículos 14, 16 y 20,1 garantizan la «libertad ideológica» y el derecho a «expresar y difundir libremente los pensamientos, ideas y opiniones mediante la palabra, el escrito o cualquier otro medio de reproducción»..
Nos consta que los que así la vulneran no sólo no votaron la Constitución, sino que, se diría, ni siquiera la leyeron.
Firma el Manifiesto por la Libertad de Expresión y exige la absolución de Jaume d’Urgell