Aunque las cifras no resisten la comparación con Italia o Grecia, cientos de inmigrantes han intentado cruzar la frontera de Melilla en los últimos días del año. El balance de 2014 es la estabilización del número de entradas en las ciudades autónomas, un progresivo cambio de perfil (sirios y refugiados centroafricanos frente a la inmigración […]
Aunque las cifras no resisten la comparación con Italia o Grecia, cientos de inmigrantes han intentado cruzar la frontera de Melilla en los últimos días del año. El balance de 2014 es la estabilización del número de entradas en las ciudades autónomas, un progresivo cambio de perfil (sirios y refugiados centroafricanos frente a la inmigración económica magrebí de hace años), mientras que se dispara la presión sobre otros lugares de Europa.
Medio centenar de inmigrantes han logrado acceder al Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI) de Melilla tras protagonizar pasadas las seis horas del último día del año un nuevo asalto a la valla en el que han participado varios cientos de personas. Otros dos centenares de personas de origen subsahariano lo intentaron en la jornada anterior, de las que un total de 102 lograron entrar en la Ciudad Autónoma.
En torno a 2.200 personas han entrado en Melilla este año saltando la valla fronteriza, los últimos este mismo martes, cuando 102 han superado el perímetro y han llegado al CETI de la ciudad autónoma en el que se ha convertido en salto más numeroso de todo 2014, según los datos de la Delegación del Gobierno consultados por Europa Press.
Desde la Delegación se compara con las llamadas ‘crisis de las vallas’ del año 2005, cuando después de que se produjera la entrada de más de 5.500 personas en Ceuta y Melilla se reforzó el vallado y se instalaron alambradas con cuchillas.
En Ceuta y Melilla, la inmigración irregular mantiene las cifras de 2013
En 2014, las cifras de saltos de las vallas siguen estando muy por debajo de las registradas en aquella época, con las citadas 2.200 personas que han entrado en Melilla tras 71 saltos en grupo. En el mismo año, han llegado a la ciudad autónoma 10 pateras, fundamentalmente embarcaciones de juguete, con algo más de 190 personas a bordo en total.
En cuanto a Ceuta, en 2014 el salto de la valla ha sido excepcional, según informan fuentes de la Delegación del Gobierno. La mayoría de las personas que han llegado sin permiso cruzaron ocultos el puesto fronterizo o entraron por mar, ya fuera a nado o en pequeñas embarcaciones. Incluyendo estos casos, han entrado 1.653 personas a lo largo de doce meses.
Ceuta no obstante recordará 2014 por la tragedia de El Tarajal. El pasado 6 de febrero, al menos 15 personas murieron intentando bordear a nado el espigón que separa en este punto España de Marruecos. El fallecimiento de los cinco jóvenes cuyos cuerpos fueron recuperados en aguas españolas está siendo investigado por un juzgado ceutí, para esclarecer si el uso de material antidisturbios por parte de la Guardia Civil, que disparó pelotas de goma y botes de humo cuando había personas en el agua, pudo determinar el desenlace.
Con este balance provisional, las llegadas irregulares a las ciudades autónomas se mantendrían en línea con las registradas el año pasado, cuando al cierre de diciembre se contaban 4.235 personas. Aquella cifra suponía un incremento del 48,5% frente a 2012, aunque un descenso del 15% respecto de 2001.
3.200 inmigrantes se han ahogado en 2014 en el Mediterráneo
La Agencia de la UE para la Frontera Exterior (FRONTEX) vaticinó la semana pasada que la tendencia en España era una estabilización de las migraciones y calculó en unas 7.000 personas las interceptadas en la entrada irregular al territorio nacional. En Italia la cifra asciende a 170.000, Grecia y Bulgaria suman entre ambos 50.000 y Hungría, en su frontera con Serbia, 22.000.
Eso, en un año en que se han batido todos los récords de migraciones hacia Europa, con más de 260.000 inmigrantes rescatados mientras intentaban alcanzar la UE, la mayoría por mar, según los mismos datos de FRONTEX. Es el doble que el año pasado y supera con creces las cifras registradas durante las primaveras árabes.
También tiene 2014 el triste récord en mortalidad. Según la Organización Internacional de Migraciones, ha sido el año «más mortífero» con 4.868 personas fallecidas sólo hasta el 12 de diciembre intentando completar su proyecto migratorio, de las que 3.224 se ahogaron en el Mediterráneo.
Mayoría de refugiados sirios y centroafricanos
En cuanto a las personas que llegan, en las vallas fundamentalmente se encuentran ciudadanos de países subsaharianos, aunque a las ciudades autónomas acceden en proporción mayor personas de otras nacionalidades, como Siria, cuyos refugiados han sido la población mayoritaria del CETI de Melilla en la recta final del año. Por primera vez desde la guerra de Argelia, no se producía una minoría de subsaharianos en estas instalaciones en favor de otras nacionalidades.
Cada vez llegan más refugiados de países en guerra o perseguidos
El Alto Comisionado de Naciones Unidas (ACNUR) en España ha venido contrastando a lo largo del año la consolidación de un cambio de perfil en las personas que llegan a las ciudades autónomas que ya comenzó a apuntalarse en 2013: la proporción de potenciales refugiados es cada vez mayor, es decir, en torno al 70% de los que llegan podrían pedir asilo en España porque proceden de países que o están en guerra o no garantizan los derechos fundamentales de todos sus ciudadanos.
En este sentido, coincide con FRONTEX cuando afirma que desde las primaveras árabes (2011), la mayoría de las personas que intentan llegar a Europa son refugiados. Según los cálculos que facilitó el director adjunto de la agencia, Gil Arias, a la SER, más del 80% de las personas interceptadas este año huían de países como Siria, Irak, Somalia, República Centroafricana o Eritrea. En el 70% de los casos, salieron desde las costas de Libia a países distintos de España.
Patera en Lanzarote
Una patera ha arribado sobre la medianoche del último día del año a Lanzarote con un total de 41 inmigrantes en su interior, entre ellos cuatro mujeres y cinco menores de edad, según informa el Centro Coordinador de Emergencias y Seguridad (Cecoes) 112. Salvamento Marítimo el que localizó la embarcación y la remolcó hasta Puerto Naos, dentro del término municipal de Arrecife.
La llegada por vía marítima se ha reducido un 90%
Allí esperaban personal de Cruz Roja y del Servicio de Urgencias Canario (SUC), que se encargaron de asistir a los inmigrantes, que se encontraban todos en aparente buen estado de salud.
Con esta patera, han llegado durante 2014 hasta las costas del archipiélago un total de 288 inmigrantes que viajaban abordo de 16 pateras o cayucos, según datos facilitaros a Europa Press por la Delegación del Gobierno en Canarias.
La llegada de inmigrantes por vía marítima a España se ha reducido drásticamente en los últimos años. Por medio de embarcaciones alcanzaron las costas españolas en 2013 un total de 3.237 inmigrantes irregulares frente a los 3.804 que lo hicieron en 2012, lo que supone un descenso del 15%. La disminución alcanza el 90,7% respecto a 2006, año en que se registró la llegada masiva de 39.180 inmigrantes irregulares.