Las iniciativas de restauración se promovieron cada vez con mayor fuerza como soluciones basadas en la naturaleza en la reunión climática de la ONU, con lo cual se corre el riesgo de expandir el acaparamiento de tierras del bosque a una superficie mucho mayor de tierras de la agricultura campesina afirma Jutta Kill del Movimiento […]
Las iniciativas de restauración se promovieron cada vez con mayor fuerza como soluciones basadas en la naturaleza en la reunión climática de la ONU, con lo cual se corre el riesgo de expandir el acaparamiento de tierras del bosque a una superficie mucho mayor de tierras de la agricultura campesina afirma Jutta Kill del Movimiento por los Bosques Tropicales (WRM, por su sigla en inglés).
Las modas son ideas o cosas que se reciben con entusiasmo y luego se abandonan cuando aparece la siguiente tendencia. Nos resultan familiares las modas en la vestimenta, por ejemplo.
En las últimas décadas la política forestal internacional ha producido su propia colección de modas en materia de conservación de bosques: Pago por Servicios Ambientales (PSA), Ecoturismo, Proyectos Integrados de Conservación y Desarrollo, y más recientemente, RED, REDD, REDD+ y REDD a escala del paisaje jurisdiccional.
La 25 conferencia de la ONU sobre el clima, celebrada en diciembre de 2019 en Madrid, España, será recordada como el momento en que el discurso y la propaganda de la ONU y de la industria de la conservación sobre REDD+ fueron reemplazados por la nueva moda en materia de conservación de bosques: las soluciones basadas en la naturaleza.
«Queremos ampliar rápidamente el financiamiento por parte del sector privado y aprovechar el potencial de la naturaleza para ayudar a alcanzar los objetivos del Acuerdo de París», explicó el CEO de la Asociación Internacional de Comercio de Emisiones (IETA, por su sigla en inglés), un grupo liderado por empresas que tiene como objetivo crear mercados mundiales de carbono y que ahora está entusiasmado con el nuevo término. (1)
Las soluciones basadas en la naturaleza (a veces también referidas como soluciones naturales para el clima) son una peligrosa cortina de humo que impide prevenir el desastroso cambio climático. Una razón para esto es que, al igual que REDD, las soluciones basadas en la naturaleza se promueven como una herramienta de compensación: esto significa que las empresas se considerarán a sí mismas carbono-neutrales aunque sigan quemando petróleo y carbón.
Todo lo que se requiere es alguna inversión en reforestación (plantación de árboles), restauración de bosques o una nueva área protegida. Los árboles, según el argumento, absorberán el exceso de carbono de la atmósfera.
Las compañías petroleras y de carbón seguirán embolsándose sus ganancias. Y las emisiones derivadas de la combustión de petróleo y carbón seguirán acumulándose en la atmósfera porque el carbono que hay en los árboles a la larga también terminará en la atmósfera, junto con el carbono del petróleo o del carbón. Esto es lo que hace que las soluciones basadas en la naturaleza sean tan atractivas para la industria de los combustibles fósiles.
Foto: Aque Fundación
Las compañías petroleras y las ONG conservacionistas se unen para promover la próxima falsa solución
Entre los numerosos espacios que promovieron las no-soluciones basadas en la naturaleza durante la reunión climática de la ONU, destacó uno. El 5 de diciembre de 2019, la Asociación Internacional de Comercio de Emisiones (IETA) lanzó una iniciativa llamada Mercados de Soluciones Naturales para el Clima. (2)
Entre los miembros fundadores figuran las compañías de petróleo y gas Shell, Chevron, BP y Woodside Energy y la compañía minera BHP-Billiton. A todas ellas se une una organización de plantación de árboles con sede en Estados Unidos, Arbor Day Foundation, mientras que el panel asesor de la iniciativa incluye a los grupos conservacionistas con sede en Estados Unidos: The Nature Conservancy, Conservación Internacional, Environmental Defense Fund y Earth Innovation Institute. (3)
De manera demostrativa, ninguna de las citas de las empresas incluidas en el comunicado de prensa de IETA menciona la necesidad de abandonar la combustión de petróleo y carbón.
En cambio las citas de las compañías petroleras subrayan las expectativas de su sector industrial de que las negociaciones sobre clima de la ONU adopten las normas para un mercado mundial de carbono. El asesor de cambio climático de la Shell, David Hone, declara que
«las Soluciones Naturales para el Clima […] ofrecen una oportunidad excelente de eliminar el dióxido de carbono. Para que esto suceda, el mundo necesita un mercado robusto, ampliamente reconocido, que canalice capital hacia proyectos basados en la naturaleza al tiempo que garantice los más altos estándares en materia de contabilidad de carbono».
Arthur Lee, de Chevron, quiere «un mercado bien diseñado en el que se puedan comercializar las compensaciones de carbono resultantes de las soluciones naturales para el clima».
Sin embargo, lo que se necesita para evitar el caos climático es reconocer que estas empresas, principales agentes de la contaminación, están motivadas por el lucro y promueven falsas soluciones que son una cortina de humo que impide asumir la urgente tarea de mantener el petróleo y el carbón bajo tierra. (1)
Una segunda reunión, organizada por las ONG conservacionistas The Nature Conservancy y Conservación Internacional, reveló otra forma en que la industria de la conservación está allanando el camino para que continúe la combustión de combustibles fósiles.
En la reunión, los representantes de ambas organizaciones sugirieron que los países del Sur global, donde la pérdida de bosques es alta, podrían solucionar fácilmente ese problema con mecanismos de compensación. (7) Argumentaron que con ello los países no solo compensarían todas las emisiones de dióxido de carbono en su país sino que también podrían acumular un «almacenaje» de carbono que podría venderse a otros (algo que en la jerga climática se denomina como «emisiones negativas»).
Peter Ellis, de la organización The Nature Conservancy, sugirió en relación con los compromisos voluntarios hechos por los países bajo el Acuerdo de París de la ONU, que se denominan contribuciones determinadas a nivel nacional (NDC, por su sigla en inglés), que «más de la mitad de los países con bosques tropicales podrían cubrir la mitad de sus [NDC] (4) con soluciones naturales para el clima. […] Algunos pueden cubrir el 50 por ciento de sus [NDC] tan solo mejorando la tala de impacto reducido», continuó, alegando que esto era «posible de alcanzar sin reducir la producción de madera». (6) Lo más notable de estas afirmaciones es quizás el reconocimiento, contrario a lo que previamente aducían la industria maderera y la industria conservacionista, que la «tala de impacto reducido» sí tiene un impacto negativo.
«Muchos países tropicales pueden ir más allá de ser carbono-neutrales» Imagen mostrada en el evento paralelo «Acción climática en los trópicos: evidencias y políticas para expandir las soluciones naturales para el clima».
De los llamados de la sociedad civil para detener la deforestación hasta el entusiasmo empresarial por la restauración
Hubo otro cambio perceptible en la última conferencia climática de la ONU en Madrid. La retórica sobre REDD+ al menos incluía el reconocimiento de que la deforestación libera emisiones de gases de efecto invernadero y debe detenerse. Pero en las soluciones basadas en la naturaleza el enfoque está cambiando hacia la necesidad de la restauración.
Las compañías mundiales de productos alimenticios y agrícolas que se comprometieron a lograr cadenas de suministro con deforestación cero, que saben que no pueden mantener, (8) se entusiasmarán: la deforestación parece haber sido eliminada con éxito de la agenda. Y su reemplazo, la restauración, está llena de oportunidades para el sector empresarial (ver en este boletín el artículo «Conceptos que matan los bosques»).
La amenaza que subsiste en el discurso sobre las soluciones basadas en la naturaleza y la restauración es que, al igual que con REDD+, la culpa de todo ese «bosque degradado» que necesita restauración no recae en las empresas responsables de la deforestación y la degradación forestal a gran escala, sino en la agricultura campesina.
La búsqueda de tierras «disponibles» para estas iniciativas de restauración pondrá más tierras comunitarias y tierras utilizadas por la agricultura campesina en riesgo de quedar bajo control externo, con el argumento de que estas iniciativas son necesarias «para el clima».
Las iniciativas de restauración se promovieron cada vez con mayor fuerza como soluciones basadas en la naturaleza en la reunión climática de la ONU, con lo cual se corre el riesgo de expandir el acaparamiento de tierras del bosque a una superficie mucho mayor de tierras de la agricultura campesina.
Los directivos de IETA quieren hacer de las soluciones naturales para el clima «una clase de activos para inversión», una nueva posibilidad para que los inversores de capital ganen dinero. Es por eso que IETA lanzó sus «Mercados de soluciones naturales para el clima» junto con las compañías petroleras. Y por eso IETA presionó a los negociadores climáticos para que culminaran las normas para los mercados de carbono bajo el Acuerdo de París.
Quizás fue bueno que los negociadores climáticos de la ONU no pudieran ponerse de acuerdo sobre las normas para el artículo referido al comercio de carbono (Artículo 6.4) del Acuerdo de París. (5)
Podría significar que habrá menos dinero del sector privado en busca de una inversión lucrativa que amenace la agricultura campesina. Además, si el objetivo es evitar el caos climático, es necesario abandonar el comercio de carbono, no expandirlo.
Sería un buen comienzo si los negociadores climáticos de la ONU se tomaran en serio el objetivo principal y solo se enfocaran en medidas para mantener el petróleo, el gas y el carbón bajo tierra.
Notas:
(1) Comunicado de IETA: https://www.ieta.org/page-18192/8185755
(2) REDD-Monitor: Launched at COP25, IETA’s Markets for Natural Climate Solutions is greenwash for the oil industry. https://redd-monitor.org/2019/12/11/launched-at-cop25-ietas-markets-for-naturalclimate-solutions-is-greenwash-for-the-oil-industry/
(3) Página web de IETA, A New Initiative from IETA to Bring the Power of Markets to Natural Climate Solutions. https://www.ncs.ieta.org/
(4) Los compromisos para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero realizadas por los países, en el marco del Acuerdo de París sobre cambio climático de la ONU, se llaman contribuciones determinadas a nivel nacional, NDCs por su sigla en inglés.
(5) Ver por ejemplo: https://www.boell.de/en/2019/12/20/process-brink-collapse-confronts-world-move
(6) Peter W. Ellis et al (2019): Reduced-impact logging for climate change mitigation (RIL-C) can halve selective logging emissions from tropical forests. Forest Ecology and Management. Volume 438, 15 April 2019. Pages 255-266.
(7) Reunión organizada por The Nature Conservancy y Conservación Internacional en el espacio de Asociación NDC, el 5 de diciembre de 2019: «Acción climática en los trópicos: Evidencias y políticas para ampliar las soluciones naturales para el clima»
(8) Ver, por ejemplo, el Boletín 245 del WRM: OLAM Palm Gabon pretende usar la definición de bosques para implementar su compromiso de «cero deforestación», https://wrm.org.uy/es/articulos-delboletin-wrm/seccion1/olam-palm-gabon-…
Jutta Kill es miembro de la secretaría internacional del WRM. [email protected]
Publicado por el World Rainforest Movement (WRM), Boletín 247, noviembre/diciembre de 2019 en: https://wrm.org.uy/es/files/2020/01/Boletin-247_ESP.pdf