El comité del Consejo de la UE para América Latina (COLAT) alcanzó hoy un consenso para recomendar a los Veinticinco la suspensión de las sanciones diplomáticas contra Cuba acordadas en junio de 2003, según anunciaron fuentes diplomáticas españolas. Según las fuentes, la recomendación conlleva el restablecimiento de las visitas de alto nivel a la isla […]
El comité del Consejo de la UE para América Latina (COLAT) alcanzó hoy un consenso para recomendar a los Veinticinco la suspensión de las sanciones diplomáticas contra Cuba acordadas en junio de 2003, según anunciaron fuentes diplomáticas españolas.
Según las fuentes, la recomendación conlleva el restablecimiento de las visitas de alto nivel a la isla «a un ritmo regular».
Los expertos de los Gobiernos la Unión Europea recomendaron una revisión profunda de las relaciones de la Unión Europea con Cuba, al establecer que su objetivo es «restablecer las relaciones diplomáticas» con el gobierno de Fidel Castro pero también mantener un diálogo con la disidencia, indicaron a Europa Press fuentes de la presidencia de la UE.
También se propone que la UE suspenda temporalmente, hasta junio de 2005, las invitaciones a disidentes a las fiestas nacionales que organicen las embajadas de sus estados miembros en la isla. Dado que la medida decidida por la UE en junio de 2003 de invitar a los disidentes a las embajadas fue el punto que llevó a La Habana a «congelar» sus relaciones con los Estados miembros, los expertos han decidido suspender «temporalmente» esta decisión.
La UE tampoco invitará a altos funcionarios del Gobierno cubano. Igualmente, el COLAT recomendó que la UE abandone su política de perfil bajo en los actos culturales oficiales europeos en Cuba.
La recomendación deberá ser analizada por los ministros comunitarios de Asuntos Exteriores en enero, añadieron fuentes de la Presidencia de turno holandesa de la Unión.
Esta decisión supone una desautorización a las directrices marcadas por el gobierno Bush, cuyo gobierno, a través del ex presidente español José María Aznar, logró llevar al seno de la Unión Europea su propuesta de enfrentamiento total con Cuba. Aquel modo de confrontación no sólo no dio resultado alguno por suponer un bloqueo absoluto al diálogo con el gobierno cubano, sino que incluso algunos países de la Unión Europea nunca llegaron a ponerlo en práctica.