Crisis nacional de agua y sus causas de muerte, en el marco de la abundancia

Las precipitaciones pluviales del país nos brindan una riqueza de agua en cifras de 1,823 milímetros. Equivalente a un total de 38,283 millones de metros cúbicos anual.

Se considera una evapotranspiracion potencial de 67% de esta agua, quedando un 33% como oferta hídrica restante, que equivale a 12,633 millones de m3 de agua al año, superficial y subterránea.

El agua necesaria para el abastecimiento de la población del país que llega a 6.5 millones de habitantes con una dotación diaria de 250 litros por persona, es de 593 millones de m3 anual.

Este consumo anual representa el 4.8% de la disponibilidad hídrica potencial. O sea, del 33% de agua lluvia.

A partir de estos datos surge la siguiente pregunta. ¿Porque tanta escasez de agua potable, si vivimos en un país de abundancia?… Y la respuesta es la siguiente:

– La deforestación de bosques que ya ha sobrepasado las 4,500 hectáreas anual y reducido las Áreas Naturales a 1.87% en todo el

territorio Nacional a causa de la construcción de autopistas como el Anillo Periférico en el AMSS, centros industriales, urbanísticos, y la expansión demográfica sin ninguna medida de ley que proteja el medio ambiente por parte del gobierno, sumado a la sucesiva pavimentación y erosión de los suelos en la ciudad y el campo, nos ha conducido a que buena parte de ésta agua lluvia, ya no se infiltre a los acuíferos profundos, la cual, la Hemos obligado a deslizarse a los ríos y al mar, generando Escasez y crisis.

El gobierno con estos hechos, es el principal responsable de estar hiriendo de muerte las cuencas hidrograficas del país para que el agua se baya, a costas de sacrificar nuestras riquezas naturales para beneficio del gran poder económico nacional e internacional, sacrificando también de esta manera la vida de nuestro pueblo como lo demostraremos en el desarrollo de este tema.

Otro impacto que se esta agravando a consecuencia del incremento de las escorrentías de agua lluvia sobre los suelos, Quebradas y Ríos en épocas de invierno, son las inundaciones, derrumbes y aluviones, que ya están golpeando a las comunidades más vulnerables que viven en zonas de alto riesgo, como lo ocurrido en la Quebrada el Garrobo en mayo del 2004, alubión en la Colonia los Ángeles Apopa el 10 de junio del mismo año, lo ocurrido en la colonia las vegas entre el 2 y 4 de mayo del 2005 y la tragedia ocurrida el 27 de junio de este año en la quebrada El Palmarcito de Cuisnahuat, Sonsonete etc.

– El grave impacto ambiental sobre los recursos hídricos que ésta deforestación y expansión demográfica, ya esta teniendo en los ríos del país, se expresa en los siguientes datos:

— Según el último estudio del SNET, que registra 360 ríos en todo el territorio nacional, de los volúmenes históricos, en los últimos 30 años, la mayoría de zonas del país, han experimentado una deplorable reducción del 35% del caudal superficial.

— En la zona norte de Chalatenango y Morazán, y en todo el Departamento de Cuscatlan, hay una reducción entre 35 y 70% de los caudales de los Ríos. Y en el resto de Chalatenango oscila entre el 70 y 100% la situación, expresándose síntomas de zonas desérticas.

— Otro dato revelador de la grave crisis ambiental que estamos viviendo en el país, se expresa en el AMSS, en donde según informes presentados por el presidente de ANDA a la ASAMBLEA LEGISLATIVA el 14 de febrero de 2005, expresan que en los últimos tres años, se han secado entre 24 y 29 pozos de agua, siendo la mayoría de Soyapango.

— El impacto es mortal, como consecuencia del alto grado de insalubridad ambiental en el cual ya hemos colocado al país, estamos sufriendo oleadas incontrolables de epidemias víricas y bacterianas que están matando a más de 12,000 niños al año, por enfermedades gastrointestinales y respiratorias, relacionadas según los informes del Ministerio de salud, con la contaminación del agua y del aire.

— Con la construcción del Anillo Periférico en el AMSS, y más aun con la destrucción de la finca el Espino para construir un campo de golf y otros proyectos que el gobierno tiene en plan ejecutar en el interior del país tales como represas El chaparral sobre rió corola San Miguel y represa El Cimarrón en Chalatenango, que atentan en contra del medio ambiente, la situación se nos complicará mucho más.

— Los siguientes datos, nos ilustran de mejor manera el nivel de impacto que de 1992 al 2002 vienen sufriendo los pozos y manantiales del gran San Salvador, a consecuencia del alto grado de destrucción de bosques que se viene realizando en las pocas zonas de máxima protección ambiental que van quedando en la periferia del AMSS, las que nos mantienen con vida, dándonos agua y oxigeno.

En el AMSS, por esta causa, estamos enfrentando un déficit de agua potable que ya sobrepasa el 23%, razón por la cual más del 60% de la población que vivimos en los barrios y colonias pobres estamos siendo victimas de un racionamiento en la distribución de ésta, que va creciendo y golpeándonos cada vez más con mayor fuerza, soportando en buena parte de casos, hasta meses de ausencia de agua, que viene provocando en dichas comunidades desde principios del 2004, reacciones y amotinamientos que se vienen desbordando en tomas y bloqueos de calles para exigirle a ANDA que nos resuelva el problema, la cual ante lo insostenible de la crisis no le queda más que hacer las veces del cuerpo de bomberos, quitándole a unas colonias para darle a otras, amortiguando de esta manera la presión social que apenas comienza.

Otro caso grave, es el alto grado que ha adquirido la contaminación del aire en el AMSS. Según el último estudio realizado por fusades, publicado en la prensa grafica el 17 de septiembre del 2004, las partículas menores a 10 micras en los últimos tres años se han incrementado en un 50%, las cuales en el 2002 estaban en el 40%, subiendo al 90%, y el dióxido de carbono aumentó el 24%, muy por enzima de los parámetros establecidos por la organización Mundial de la Salud.

Ante esta grave situación ambiental que ya estamos viviendo, a causa de las graves irresponsabilidades del gobierno, a las comunidades que somos las que sufrimos las consecuencias y pagamos los costos, no nos queda otro camino, más que el de la organización y lucha por la defensa de nuestros derechos fundamentales que por derecho de ley nos corresponden.

Por defender lo poco que nos dejan, preservarlo y desarrollarlo, por un medio ambiente sano y debidamente equilibrado, para asegurar la vida de nuestras futuras generaciones, por que sin árboles no hay agua y oxigeno, y sin agua y oxigeno no hay vida.