El pueblo elige. La representación incluye a ¡casi la mitad de Delegados/as de Circunscripción! El Presidente, tras amplia consulta. Nuestra prensa, activa.
Este 11 de Marzo, trabajadores/as cubanos/as y pueblo en general protagonizamos la culminación del proceso de selección de nuestros Delegados/as y Diputados/as a nivel provincial y nacional, respectivamente (1), un digno homenaje al Capitán de la clase obrera cubana, Lázaro Peña, en el aniversario 44 de su partida física (2). La Hazaña realizada en el 2017 (3) en el marco de nuestra Revolución que está fortalecida y se perfecciona (4), devino premisa.
Queda por delante la elección de quienes serán responsables de conducir las Asambleas Provinciales y Nacional del Poder Popular, así como escoger al Consejo de Estado o sea, el Presidente, el Primer Vicepresidente, los Vicepresidentes, el Secretario y demás integrantes -a tono con la Ley Electoral (5). Precisamente acerca de este asunto y del comportamiento de los medios de divulgación de nuestro país al respecto, deseo llamar la atención de mis lectores/as.
En rigor, en esta ocasión abordo el tema a propósito de un trabajo firmado por José Raúl Gallego Ramos el dos del corriente con el título «Fuera de agenda/ La elección del próximo presidente en los medios cubanos» y la inscripción que continúa: «La prensa oficial analiza los procesos electorales presidenciales de otros países pero no toca el caso cubano. Los medios no oficiales tampoco han dado prioridad al tema. Mientras los primeros no dan respuesta al porqué de esta ausencia, los segundos exponen indistintamente estar centrados en el diarismo, las carencias de información sobre el tema y la falta de previsión» (6) -las negritas son mías, para indicar puntos de desacuerdo.
Debo apuntar que Gallego identifica en esta oportunidad como «prensa oficial» a Granma, Juventud Rebelde y el sitio web Cubadebate; mientras que establece como «medios no oficiales» a los sitios «El Toque, OnCuba y Cuba Posible por ser estos, medios con áreas de interés amplias, que suelen abordar temáticas relacionadas con la política nacional y que cuentan con un importante número de lectores dentro y fuera de la Isla».
En cuanto al quehacer de la «prensa oficial» en este orden de ideas, certifico que la indagación que se realice conduce a sostener que es incierto que ella «no toca el caso cubano» en lo concerniente a la «elección del próximo presidente». Si no, medítese alrededor de lo que puntualizo a continuación: Dianet Doimeadios e Ismael Francisco firmaron en Cubadebate el rótulo «¿Cómo lograr que el Parlamento se parezca al país?» el 24 de Octubre de 2017, a partir de la entrevista a Gisela María Duarte Vázquez, Presidenta de la Comisión de Candidatura Nacional (7).
A los efectos de la trama que trato, resalto que Gisela María, una vez que deja sentado que Cuba exhibe un sistema electoral en el que no participan partidos políticos -el Partido Comunista de Cuba no propone ni nomina ni apoya a ningún candidato/a; el pueblo es quien tiene la facultad de proponer y nominar en tal sentido-, destaca cómo es imprescindible comisiones como la que ella encarna también a nivel de municipios y provincias que en cada instancias elaboran y proponen cubrir los cargos de Presidente/a y Vicepresidente/a de las respectivas Asambleas del Poder Popular, así como del Consejo de Estado en la integración que expuse en el segundo párrafo de este trabajo. Todo, en base a la Constitución de la República de Cuba, artículo 74 (8), y a la Ley electoral que en su artículo 22 detalla las funciones de la Comisión Electoral Nacional y en el 73 las atribuciones de la Comisión de Candidatura Nacional (9).
No obstante, más luces aparecen en «¿Cómo se elige al Presidente en Cuba?» con la rúbrica de Yudy Castro en el Granma del 7 de Febrero de 2018 y la etiqueta que sigue: «Para que una persona llegue a ser Presidente del Consejo de Estado en Cuba tiene que pasar por varios momentos electorales, en los cuales participa el pueblo directamente o sus representantes electos (10).
Yudy trae a colación al Doctor José Luis Toledo Santander, Presidente de la Comisión de Asuntos Constitucionales y Jurídicos de la Asamblea Nacional del Poder Popular (ANPP), quien dice:
«El Presidente del Consejo de Estado en Cuba se elige en elecciones de segundo grado, o sea, los diputados, electos por el pueblo y en representación del pueblo, aprueban la candidatura y luego votan, de manera directa y secreta, por quienes integrarán el Consejo de Estado, es decir, el Presidente, el Primer Vicepresidente, los vicepresidentes, el Secretario y demás miembros». «[Existen personas que se cuestionan] si la elección del Presidente responde a una expresión directa popular. Desconocen, sin embargo, que para que alguien en Cuba llegue a ese cargo tiene que pasar por varios momentos electorales, en los cuales participa el pueblo directamente o sus representantes electos [luego de que] el compañero (o compañera) resulta propuesto como precandidato a diputado a la Asamblea Nacional en el pleno de una organización de masas» [sea de los trabajadores/as, de los campesinos/as, de los estudiantes…].
Toledo Santander continúa diciendo que «tras ser elegidos los diputados y tomar posesión en la ANPP, la Comisión de Candidaturas Nacional llama a consulta a cada uno de los electos y todos tienen el derecho de proponer quiénes serían, a su juicio, los integrantes del Consejo de Estado, o sea, sugerir 31 personas de entre ellos, que incluye, como es obvio, al Presidente. Posteriormente, dicha Comisión pone a consideración de la Asamblea Nacional, en votación abierta, una candidatura, fruto de las propuestas realizadas, y es un derecho de los diputados modificarla total o parcialmente; y luego de ser aprobada, se somete al voto libre, directo y secreto de estos. Es ahí entonces cuando se elige, finalmente, al Presidente del Consejo de Estado».
Y para cerrar, aclara el Presidente de la Comisión de Asuntos Constitucionales y Jurídicos de la ANPP que «Cuba no es el único país que elige a su Jefe de Estado en comicios de segundo grado. Hay muchas naciones que implementan ese tipo de elección, que no limita, en ningún sentido, su legitimidad y amparo democrático». Pero ello no es objeto de tratamiento para el propósito de lo que escribo ahora. En tanto, me permito agregar que en trece trabajos con el título «Sistema electoral cubano» Granma ofreció a sus lectores, todos los jueves y por varias semanas, algunos detalles y precisiones sobre el proceso electoral, firmado por Oscar Sánchez y la misma Yudy Castro, a partir del 5 de Julio de 2017 -apenas cito el último; allí está la referencia de los demás (11); al tiempo que recuerdo que en «Diez preguntas y respuestas sobre el diputado» a cargo de Juventud Rebelde el 19 de Febrero de 2018, ese medio de prensa compartió otros elementos de interés de la población (12).
Con estos presupuestos, pregunto: ¿Será acaso defendible la tesis según la cual «La prensa oficial analiza los procesos electorales presidenciales de otros países pero no toca el caso cubano»? Seguidamente, expongo el porqué en mi consideración «Los medios no oficiales tampoco han dado prioridad al tema». Parto de lo que esos sitios han publicado y mi apreciación sobre sus posturas, sin descartar otros puntos de vista.
Sobre El Toque, ilustro con un par de sus artículos: uno, «¿A qué le temen los periodistas cubanos?» con fecha 28 de Abril de 2017 (13); el otro, «¿Qué pasa con el periodismo en Cuba?» cuya data es 07 de Julio del mismo año (14). Imagino que esos títulos les adelanten a mis lectores/as cuál es la percepción predominante en ese blog auspiciado por ¿amigos? holandeses que son ¿enemigos? de estadounidenses (15). Tras leer esos artículos, redacté «Cuba: su Periodismo, ¿en eltoque.com?«, después de tres días del último de ellos, con el resumen siguiente: «considero que la procedencia de los aplausos a determinados actores políticos y/o mediáticos, apuntan hacia la calidad de los contenidos que postulan y/o defienden. Por tanto, en Cuba el Periodismo facturado por eltoque.com evidencia el perfil antipatriótico del sector informativo divorciado del PCC [Partido Comunista de Cuba] y entregado, en última instancia, a las pretensiones del ‘Norte revuelto y brutal'» (16).
Acerca de OnCuba, traigo a colación que publicó «Che» el 27 de Octubre de 2015 con la firma de Carlos M. Álvarez (17), todo un desatino -uso un vocablo decente- que mereció la réplica de Norelys Morales en «¿Qué te pasa OnCuba?» (18); y más recientemente dio a conocer «Paro Internacional de Mujeres… ¿Cuba?» firmado por Ailyn Torres (19) que me convocó a esclarecer al respecto en «Cuba: la Revolución Dignifica a sus Mujeres» el 07 de Marzo de 2018 -argumentos para cuestionar la pertinencia de un paro de nuestras féminas contra su Gobierno Revolucionario (20).
Y sobre Cuba Posible -proyecto cuyos líderes han declarado sin tapujo que «trabajaremos con contrapartes extranjeras, entre las que se encuentra Open Society Fundations, de George Soros» (21), un contrarrevolucionario internacional (22)-, llamo la atención de su «Propuesta de Declaración de Derechos Humanos para una Constitución en Cuba» escrita por un conjunto de sus autores que precisaron en el artículo 39: «[…] El pueblo tiene el derecho a oponerse a decisiones del gobierno y la administración pública de forma directa por medio de la resistencia, rebelión, sedición, exilio y la huelga política. La Institución del Tribuno del Pueblo defenderá los derechos de las personas cuando estas se dirijan a ella en busca de auxilio. La ley electoral regulará la forma en que se ejercerá este derecho» (23). De cara a tal propuesta, escribí «Cuba: ¿credibilidad en sus adversarios?» el 30 de Agosto de 2017 donde, sin dejar de reconocer aspectos positivos, llegué a la conclusión de estar en presencia de un actor más solapado que documenta sus intenciones vs. la mayoría del pueblo cubano (24).
O sea, no tengo la menor duda de que El Toque, OnCuba y Cuba Posible son órganos caracterizados por una línea editorial susceptible de sobredimensionar cuantos defectos puedan estar presente en el Socialismo cubano (25) -puntualmente, rozan lo grotesco y sintonizan con nuestros enemigos declarados-, y es difícil encontrar en ellos alusión a la obra bienhechora de nuestra Revolución. He aquí quizás la razón por la cual estos «medios no oficiales» no se han metido en el asunto que me ocupa en estos párrafos.
En correspondencia con todo lo que acabo de examinar -el recién concluido proceso electoral/qué de él se deriva en lo inmediato y el quehacer mediático en torno a ello en Cuba-, acredito que el pueblo elige para las diversas instancias; que la representación es por sexo, edad, grupos étnicos, sectores sociales, áreas geográficas ¡y casi la mitad de Delegados/as de Circunscripción! (26); que en consulta/propuestas con/de cada uno de los compañeros/as seleccionados/as para integran nuestro Parlamento, surge el Consejo de Estado -incluyendo a su Presidente; y que a la sazón de este suceso, nuestra prensa ha estado activa.
Obviamente, toda esta trama puede/debe ser mejorada -en línea con el Eterno Fidel Castro (27). Pienso en lo que aludí en «El Diputado/a de mi preferencia» (28), en «Cuba: ¿qué arquetipo de Senado necesita?» (29), «Cuba: una propuesta para su Parlamento» (30) y en la serie «Cuba: ecos de la última sesión de su Parlamento» (31, 32 y 33). Prometo compartir otros razonamientos en la perspectiva de la pulcritud en nuestra Democracia (34).
Referencias:
2.- http://kaosenlared.net/lazaro-
3.- http://kaosenlared.net/cuba-
8.- http://www.cubadebate.cu/cuba/
12.- http://www.juventudrebelde.cu/
13.- https://eltoque.com/blog/que-
14.- https://eltoque.com/blog/que-
17.- http://oncubamagazine.com/
18.- https://islamiacu.blogspot.
19.- https://oncubamagazine.com/
21.- https://cubanosporelmundo.com/
23.- https://cubaposible.com/
28.- http://2014.kaosenlared.net/
29.- http://2014.kaosenlared.net/
30.- http://www.cubainformacion.tv/
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