Edith Franco: María, debido a la posición revolucionaria de nuestro Presidente Hugo Chávez Frías y a su presencia en diferentes países y escenarios internacionales, nuestra Revolución Bolivariana se ha convertido en un punto de inflexión en la historia de la humanidad; asimismo, en lo interno se están dando cambios continuos y profundos en la vida […]
Edith Franco: María, debido a la posición revolucionaria de nuestro Presidente Hugo Chávez Frías y a su presencia en diferentes países y escenarios internacionales, nuestra Revolución Bolivariana se ha convertido en un punto de inflexión en la historia de la humanidad; asimismo, en lo interno se están dando cambios continuos y profundos en la vida humana de la nación venezolana; por supuesto cambios impregnados de problemas difíciles y concretos (entre los que se encuentran la continuidad de la burocracia, la corrupción y la falta de ideología comprometida con el proceso); pero estos problemas han hecho que nazcan preocupaciones reales por un nuevo concepto de vida social, política, económica y cultural en la que ya se ve naciendo una diferente y más controvertida forma de pensar o de reflexionar.
Por una parte, se encuentran los y las que se afanan criticando los cambios que se van dando, son los y las que se observan, la menos de las veces más racionales, pero las más de las veces irracionales; son los y las que más exageran en la discusión y al final no dan soluciones ni plantean proyectos para la mediación de los problemas; y también están los y las que están dispuestas a sacrificar todo a favor de la esperanza de convertirse en un nuevo ser y en nuevo país en lo sublime; es decir, los y las vanguardistas, los y las que hacemos política revolucionaria.
Han transcurrido pocos años de nuestra Revolución Bolivariana y consideramos que tus pensamientos y criterios de mujer intelectual y comunista comprometida con el proceso, pueden influenciar y ampliar el campo de observación y análisis de nuestra realidad; reflexiones que segura estoy, nos conducirán a la indagación de la belleza moral y política, que a decir de ciertos filósofos y filósofas , no es más que la búsqueda de un acuerdo siempre mejorable de las relaciones e instituciones humanas que ya existen, mejoras en el sentido de un florecimiento humano mayor. Por eso hoy, sobre estos aspectos, te invito a conversar.
María León: Tus palabras me hacen pensar en ciertas categorías filosóficas; me obligan a plantear lo esencial y lo fundamental de nuestra Revolución Bolivariana. Fíjate Edith, hay un cuento de un francés llamado Antoine de Saint-Exupéry, titulado El Principito, que tiene una frase muy sencilla y a la vez muy reveladora para el tema que gratamente ha salido a desarrollarse en esta conversación; la máxima dice así: «lo esencial es invisible para los ojos»; y a propósito de ello, en estos días le regalé a cada uno de los trabajadores y trabajadoras de INAMUJER una edición de esta obra, para que analicen y sientan, y les llegue ese mensaje tan filosófico, que cada vez que una lo lee aprende algo nuevo, porque como seres humanos estamos implícitos en negaciones, refutaciones y argumentos de todo tipo; bien sean sociales, económicos, culturales o políticos y hasta religiosos; y esa situación nos conduce, cada vez que razonamos la frase, a tener una visión y un sentir diferente de nuestra realidad que en ciertas oportunidades no puede decirse fácilmente con palabras; entonces, fíjate, si nosotros y nosotras entendemos como él dice que: «lo esencial es invisible para los ojos»; o sea que no se puede ver, entendemos por deducción, que para la esencia de la Revolución Bolivariana no bastan los fenómenos que vemos; es necesario, como lo hizo Carlos Marx aplicar la ciencia; es decir, que para comprender la esencia del capitalismo, hoy en su fase neoliberal, es indispensable realizar un estudio crítico acerca del desenvolvimiento de ese sistema imperial, devastador y criminal, como en su tiempo histórico lo logró vislumbrar Carlos Marx.
¿A qué conclusión llegó el filósofo alemán? ¿Qué condiciones políticas, económicas, sociales nos develó que eran invisibles a los ojos? Nos reveló que la contradicción fundamental en el capitalismo estaba dada por el carácter social de producción y la forma privada de apropiación. Es decir, los y las que pertenecemos a la clase trabajadora producimos socialmente, pero los capitalistas se apropian del trabajo social de la mayoría; ésta es la principal o una de las principales contradicciones, porque son muchas; sin embargo, podemos asegurar que ésta es la contradicción fundamental del capitalismo; y hasta que nosotras y nosotros no superemos esa situación de desigualdad y de injusticia social y política, no podremos decir que hemos culminado con el capitalismo o mejor, con el neoliberalismo; porque no es posible que millones de seres humanos trabajemos y produzcamos, desde el científico que investiga hasta quien produce un botón, y vengan unos señores y señoras que conocemos como la oligarquía y que en nuestro país está representado aproximadamente por unas treinta y dos familias, y se apropien de lo producido por la clase trabajadora acrecentando su capital; se adueñen del trabajo de todos y todas, convirtiéndonos en esclavos de la burguesía como lo expresó a través del materialismo histórico el filósofo alemán. Esa es una de las principales contradicciones del capitalismo; te invito pues, en esta conversación a que juntas, busquemos y pensemos cuáles son las contradicciones que se presentan en la Revolución Bolivariana para poder llegar a la esencia, a lo que no se ve por lo fenómeno, a lo que es necesario aplicarle el lente de la ciencia…
Edith Franco: Estamos viendo fenómenos económicos, políticos, sociales muy alentadores; asimismo, distinguimos fenómenos muy graves. No podemos pasar por alto lo que dicen los dueños de los medios de comunicación de la oposición, en sus programas televisivos y de comunicación radiofónica, aún a sabiendas de que son títeres de quienes realmente conforman el poder neoliberal, en donde se limitan a arrastrar, diariamente, sus viles y malsanos comentarios de un programa a otro, en un escenario que se convierte en algo que embrutece; irónica y descaradamente señalan: ¿De cuál socialismo nos están hablando, si todavía están en el poder quienes siempre lo han ostentado en este país? Sólo que ahora están disfrazados de revolucionarios; también marcan que con el proceso bolivariano va naciendo una nueva clase aristocrática, oportunista, semipequeñoburguesa, salida del «pueblo»…
M.: Sí, esa situación forma parte en estos momentos del proceso histórico revolucionario que estamos construyendo; y eso hay que desenmascararlo y enfrentarlo; pero también está el otro escenario, como dijo Marx, en donde llegará el momento en que : «Las armas de que se sirvió la burguesía para derribar al feudalismo se vuelven ahora contra la propia burguesía. Pero la burguesía no ha forjado solamente las armas que deben darle muerte; ha producido también a los hombres que empuñarán esas armas: los obreros modernos…». Así que podemos decir de la clase oligárquica venezolana que ¡están heridos de muerte!, aunque se sientan con el poder, aunque compren conciencias con el poder ¡están heridos de muerte! ¡el neoliberalismo, fase actual del capitalismo, aquí en Venezuela y en el mundo entero, está herido de muerte!
Ahora sigamos, tres contradicciones son esenciales en la Revolución Bolivariana. ¿Cuál es la primera contradicción a resolver? A la que llamamos contradicción principal, y fíjate que no es la fundamental sino la principal, y que es necesario develarla, y además, superarla para poder llegar a las contradicciones más profundas y para poder resolverlas también de forma paralela: La primera contradicción es la que se da entre la nación venezolana y una potencia imperial extranjera, que en este período histórico está representada por el imperialismo norteamericano; pero que desde hace quinientos trece años, cuando nació esta contradicción estuvo representada por el imperialismo español, y que después de la Independencia de Venezuela, ha seguido desplegándose porque no hemos logrado como pueblo la independencia total; tenemos una independencia política, pero no una independencia económica; en tal sentido, una vez que sale de nuestro país el imperialismo español derrotado políticamente, ingresa el imperialismo norteamericano y nos convirtieron en neocolonia, y llegamos a ser propiamente colonia del imperialismo norteamericano; luego los neoliberales con su sistema criminal, manifestaron: ya no bastan los latigazos, ahora vamos a ahorcar a estos esclavos y esclavas; pretendiendo al ahorcarnos como nación eliminar al Estado, acabar con la protección social, política y económica de las mayorías; pero la gente sencilla, la anónima, la trabajadora, que estaban concientes de esta nueva situación que se nos quería imponer comenzó a despertar.
Y reaccionaron los neoliberales y dijeron: no necesitamos al Estado y tampoco a los ejércitos; y pongo como ejemplo lo que hicieron con el ejército de Panamá que lo pusieron a pasar coleta; e igualmente acabaron con varios ejércitos del continente para convertirlos en policías; sin embargo, los militares también despertaron del engaño y al ver el destino que le esperaba al continente latinoamericano: ser policías del imperio; vislumbraron que la única posibilidad que tenían era la de aliarse con el pueblo para que juntos: pueblo y militares, pudieran impedir que acabasen con nuestros Estados Nacionales.
E.: La situación que describes la pudimos ver retratada fielmente en Haití; fíjate allí el 75 % de la población vive con 2 dólares por día; el 50% de sus habitantes se encuentra en estado de desnutrición y el desempleo ronda en aproximadamente un 80%; pero lo más grave fue observar como en la toma de posesión del presidente René Preval el ejército hacía las veces; y perdóname si de repente suena muy dura la expresión, pero eran como una especie de marionetas, que van marchando al son del soka, la música que colocaron en tan importante acontecimiento; pero detrás de ellos, a los lados y por todos los ángulos estaban ubicados los cascos azules, socavando lo que queda de democracia de Haití ; es decir «las fuerzas de mantenimiento de paz de las Naciones Unidas» se mantienen vigilándolos; el ejército haitiano se ha convertido realmente en la policía; marchando al son de los que los vigilan, los cascos azules «la fuerza apropiada»; y duele ver cómo otros ejércitos, latinoamericanos y de otras latitudes, manchan la dignidad y la soberanía de un país.
M.: Ese será su destino si no se revelan, pero más temprano que tarde se revelarán. Como sucedió aquí, cuando nuestro Comandante Hugo Chávez se reveló; acontecimiento comparable al 19 de abril de 1810; cuando él se alzó empezó a revelarse la América. Te quiero decir, pues, que esta contradicción tan terrible que hay entre la nación venezolana y el imperialismo norteamericano, que se ha radicalizado con el neoliberalismo, con la imposición de la cultura de ellos; incluso te puedo contar que yo he encontrado aquí en nuestra patria revolucionarios y revolucionarias celebrando la fiesta de Hallowen, la fiesta norteamericana de las brujas y yo me quedaba horrorizada y me preguntaba ¿Qué es esto? ¡Dios mío! ¡Estos no son los diablos de Yare!. Bueno, así observamos que venían acabando con nuestra cultura, con nuestra manera de ser; nuestras élites se la pasaban y aún lo hacen en los Estados Unidos, pensando que esa cultura era y es lo más avanzado; nuestro ejército estaba amenazado de desaparecer; nuestro pueblo estaba sufriendo los peores horrores en la educación, habían destrozado el sistema de salud para privatizarlo y así solamente tuvieran salud los poderosos. Entonces, esta contradicción esencial, es lo que hay que ver y es lo que hay que comprender porque está develada gracias al discurso de nuestro Presidente Hugo Chávez Frías; no sólo porque se alzó, sino porque fue allá en Québec, en el 2001, el único presidente latinoamericano que hizo que tomáramos conciencia sobre lo que representaría el ALCA para los pueblos de este continente, firmando con objeciones aquella nueva manera de colonizar y esa decisión repercutió en Venezuela y en el mundo; esa fue una posición de valentía, por eso yo digo que Chávez y el proceso bolivariano son para la América y son para el mundo lo que fue el 19 de abril de 1810; y hoy gracias a su posición de lucha y claridad política estamos viviendo, sintiendo y palpando los logros del ALBA, la Alternativa Bolivariana para las Américas.
Y esto es lo esencial del enfrentamiento de un pueblo como Venezuela que quiere ser libre, que quiere ser soberano, que quiere ser exitoso y progresar; pero no progreso entendiendo que nos hagan aquí un Mc’Donald y ese tipo de negocios; no, no es ese el progreso para nosotros y nosotras; el progreso es el desarrollo de los planes de educación, de la cultura, el rescate de nuestros valores, el rescate de nuestro ecosistema, el rescate de nuestras riquezas petroleras y mineras, la implementación de los programas de salud; el rescate de los valores de nuestras heroínas y héroes; de nuestros ancestros e indígenas, de nuestras negras y negros; eso es el justo progreso y no es venirnos a poner unas gríngolas para que veamos sólo hacia el norte; el progreso es que se nos respete como nación, y se nos está respetando gracias a nuestro líder y a nuestro pueblo; esto es lo primero, que te vengo diciendo, es lo esencial. Es como preguntarse ¿Cómo se mide a un patriota? Si un patriota está de acuerdo con la dominación extranjera no es un patriota. ¿Qué patria tiene? Si una persona, bien sea un científico, obrero, mujer, hombre, niño, niña, o estudiante quiere que el imperialismo invada nuestro país, ¡Por favor!, no entiende lo esencial, que es la soberanía de este pueblo; que ha derramado sangre desde Guaicaipuro hasta hoy, quinientos trece años después, y la seguirá derramando porque no aceptará dominación extranjera; y que de ser invadido por el imperio norteamericano sacrificará su vida así como murió Guaicaipuro diciendo: ¡Vengan a ver morir el último hombre libre de estas altas montañas que no acepta esclavitud!
E.: Cómo condiciona el neoliberalismo, a través del exterminio sistemático de los pueblos; es importante considerar la influencia que ejerce este sistema cruel sobre la imagen que poseemos de nosotros mismos como seres humanos. María, una de las observaciones que hicimos en Haití es que las personas no te miran de frente, teníamos que recordarles a las personas que entrevistábamos: por favor miren a la cámara; se nota que fue y es un pueblo de gente bondadosa, como lo fue el revolucionario Alejandro Petión, el primero en respaldar los principios de la Declaración de los derechos del hombre y del ciudadano; y el primero en combatir la esclavitud en el Caribe; y quien sólo le pidió a nuestro Libertador Simón Bolívar, en 1806, al ayudarlo con soldados haitianos y logística militar, que proclamara la abolición de la esclavitud en todas las tierras que sus armas libertaran. Esa fue la característica de ese pueblo, la defensa de su dignidad y soberanía. Pero ahora, la situación política, económica, cultural y social que viven, esta situación nos hace recordar a nuestro Alí Primera, cuanto canta «LA NOCHE DEL JABALÍ», que dice así:
Apaga la radio compañera
hay tantas cosas para conversar
no preguntes cuántas veces por segundo
mueve las alas el colibrí
pregunta por ejemplo
¿Qué estamos haciendo por Haití?
¿Qué dónde queda, dices?
En un lugar cercado por la noche
en el inmenso cobalto del Caribe
La noche en este caso
es la miseria, es el hambre
es la palabra presa
es negar el camino a la inteligencia
es negar que el obrero es un poeta
¿Qué cuántos habitantes tiene?
Los que le quedan
después de tanta masacre
¿Qué si luchan, además de sobrevivir, qué si luchan?
Claro que sí, pequeño amor, claro que sí.
Los patriotas haitianos
andan con luces y colores en las manos
y andan florecidos
como la tierra regada por lloviznas y por cantos
Pero han luchado solos, compañera, solos
aunque andan florecidos
como andan los hombres cuando andan luchando
¡Han luchado solos compañera!
Hasta que nuestra conciencia dispare
en la lucha por liberar a Haití
hasta que el mundo se alce en una sola voz
luminosa, solidaria
y entre todos hagamos la mañana
que acabe para siempre
con la noche del jabalí
Ahora, (… María…)
pongámonos en marcha
que la palabra sin los pasos
es una palabra muerta
y el tiempo nos dice: ¡AVANZA!
alma profunda en llamas, ¡AVANZA!
Construyamos entre todos la mañana
que acabe para siempre
con la noche del jabalí
con la noche del jabalí
No permitamos que el futuro
nos pregunte
¿Qué hicieron ustedes por Haití?
Y respondamos bajando la cabeza:
los hombres que cayeron
son el número exacto
de las veces que en un siglo
mueve las alas el colibrí.
Sí María, sí tenían las armas y las siguen teniendo: la creatividad, el colorido, todas sus raíces; a Alejandro Petión con su ejemplo de lucha; pero a ese pueblo bondadoso los invasores le han mermado todo su valor histórico; pareciera que ni siquiera se pueden reconocer en ellos mismos y lo que hacen es bajar la mirada cuando se les pregunta; y una insiste: miren a la cámara y les da pena; y entonces, una se dice: tiene que ser algo muy interno, esa subyugación la han interiorizado tanto y después pienso: cómo tenemos que darle gracias a todos nuestros próceres, a nuestras heroínas y héroes, porque nosotras y nosotros no sabemos mirar sino es de frente y somos hasta groseros con la mirada, decimos muchísimo con la mirada…
M.: ¡Somos desafiantes con la mirada!
E.: Entendiendo la condición de opresión que impone el imperio norteamericano actualmente; no es difícil encontrar a personas que responden en tono bajito cuando se les llama: «mande», o dicen: «mi señorcito», o «diga mi señorita»como aceptando una orden, aceptando la subordinación; nosotros y nosotras no respondemos así y es por nuestra herencia cultural; tenemos siempre presente a nuestros guerreros y guerreras originarios, tenemos a los negros y negras en nuestra sangre, ese retumbe de tambor, esa mirada, este color, sino fuese así no miraríamos quizás de frente…
M.: ¡Así es!, pero te voy a decir una cosa que complementará tu reflexión, porque sé que lo que más deseas, como muchas de nosotras también deseamos es que no exista subordinación ni explotación ni discriminación de ningún tipo ni a ningún nivel. Fíjate, yo siento un orgullo ilimitado por mi pueblo; sin embargo, voy a decirte que esta grandeza que nosotros tenemos también la tienen otros pueblos del mundo; vamos a comentar un trabajo de José Martí que se llama: «Un paseo por el país de los anamitas»; voy a parafrasear algo de ese libro: Los anamitas de ayer serían los vietnamitas de hoy, y José Martí señala en ese relato, y lo recordé por la observación que hacías de nuestros hermanos y hermanas haitianos; él cuenta que en su visita a aquel país, Anam, que estaba dominado en ese momento histórico por el imperio francés, que algunos anamitas se encontraban en sus pagodas donde iban a orar, que ellos se decían algo en voz baja y cabizbajo que no se entiende; que no se sabe qué es; dice él y a su vez cree descubrir que aquello que se dicen calladitos y casi al oído y cabizbajo como si estuvieran poniéndose de acuerdo para algo, para el futuro. También él relata que ve a unos anamitas llevando a unos franceses como si fueran ellos las mulas; es decir, llevan a su opresor en una silla de mano y hacen las veces de animales cargando al francés, al imperialista, al dominador, y él dice: ¿Cómo es posible esto? ¿Cómo es posible que esto le suceda a un pueblo que ha luchado tanto como este pueblo?; se pregunta él y a su vez se responde: ¡Hasta trotones se vuelven los hombres que se cansan de luchar!. Eso le había pasado en aquel momento al pueblo de los anamitas. ¡Ah! pero Martí, luego piensa, previendo el futuro, algo muy hermoso: así cabizbajos y casi calladitos, lo que aquellos anamitas cabizbajos se secreteaban lo vimos nosotros y nosotras históricamente, cuando los vietnamitas, en primer lugar, derrotaron al imperialismo francés y lo echaron de su tierra; y en segundo lugar, derrotaron al imperialismo norteamericano y también lo echaron de su tierra, y son aún hoy día el más grande ejemplo; el General Nuyen Yap, el genio de la guerra del siglo XX junto con el heroico pueblo de Vietnam echaron a esa gente, a los imperialistas bien armados y bien adelantados y bien crueles y bien malvados, los echaron de su tierra. ¡Así que los haitianos, calladitos y cabizbajos; y los latinoamericanos, calladitos y cabizbajos andan buscando cómo echar a ese imperialismo y a todos los imperialismos del suelo libre de América que no quiere ni puede ser esclavo!
E.: De eso no tenemos la menor duda; ya las estructuras mentales de opresión comienzan a caer. En las recientes elecciones presidenciales de Perú pudimos observar como en organización política ganó el pueblo en contra de la oligarquía peruana; ya está el pueblo motivado para la organización civil y política, verdaderamente democrática y participativa del pueblo, ese es un buen saldo; Ollanta Humala al reconocer los resultados de la ONPE que dio como «ganador» a Alan García hizo un llamado a las fuerzas de izquierda, a los movimientos y organizaciones de base para conformar un Frente Nacionalista; y esa María, es gente que ha estado trabajando por allí de manera anónima, calladita y cabizbajos, apostándole a la justicia social; hombres y mujeres trabajando sin ser reconocidos, allí están y podemos decir que políticamente ganamos, Latinoamérica está encendida y en eso tenemos que trabajar, allí es donde nos tenemos que unir como pueblos latinoamericanos y caribeños contra la opresión del imperio norteamericano.
M.: Ganamos en Perú y seguiremos ganando como pueblos soberanos y dignos, porque decía el Presidente Chávez en estos días: «No hay nada más poderoso que una idea a la que le llegó su tiempo»; y el tiempo es nuestro; es el tiempo de los y las patriotas; el tiempo de los y las que luchamos porque estas tierras y altas montañas sean libres, soberanas e independientes, ¡el tiempo ha llegado! Martí decía: «cuando se levante el indio se levantará la América», y el día que llegó Evo Morales, ese humilde boliviano, a la presidencia de Bolivia y vimos aquel impactante y emocionante acto de manifestación del pueblo hacia su líder, me acorde del prócer cubano y expresé con júbilo: ¡Martí, se cumplió tu profecía!. ¡Se levanta el indio y se levantará la América, de arriba hasta abajo!
E.: No contaron con la fuerza revolucionaria ancestral de Tupac Amaru y Micaela Bastidas, independientemente de que sea Perú, Bolivia o México, ya se levantó el indio…
M.: No importa que sea en Centroamérica, en Sudamérica o en Norteamérica; es este suelo que ha sido hoyado, que ha sido humillado, que ha sido maltratado, pisoteado, herido, ensangrentado; ese suelo es el que se recupera. Ahora es importante que hablemos de la segunda contradicción, que también, como todo lo que hemos dicho, tiene mil fenómenos y muchísimas expresiones; pero que es sólo el lente del marxismo lo que nos permitirá comprenderla. Es la contradicción entre la oligarquía y el pueblo trabajador.
Desde mi punto de vista ahora se revelan las dos clases sociales de las cuales habló Marx. Él dijo que en el capitalismo, cada día la sociedad se va dividiendo radicalmente en dos clases sociales opuestas; y nuestro pueblo venezolano esta viviendo ésta situación; en la mayoría de los países latinoamericanos y caribeños existe también la dominación de la oligarquía, que aquí es histórica; formada por los españoles en el período colonial y asentada en el período de la independencia; esa oligarquía que dice siempre nuestro Chávez que expulsó al Libertador Simón Bolívar, porque no entendieron que Bolívar, no se estaba planteando la independencia para apoderarse de las tierras sino para darlas a quien la necesitaba; esa clase social excluyente, ha seguido acumulando riquezas y poder desde entonces hasta ahora; y con el período de los cuarenta años de los adecos y los copeyanos y sus aliados se acrecentó con la riqueza petrolera y constituye hoy el enemigo interno fundamental del pueblo trabajador de Venezuela.
E.: Y aún hoy andan enardecidos y dicen no entender el proceso revolucionario y exclaman: ¿Qué es eso de la titularidad de la tierra? Que si hay que revivir las batallas de independencia para poder demostrar de quiénes son los títulos de tierras que hoy se abrogan…
M.: Entonces fíjate, esa contradicción de todos los que tienen tierra porque pudieron ampliar tramposamente los linderos; de todos los que tienen tierra porque sus antepasados les compraron en la época de la independencia los bonos de tierra a los soldados; de todos los que tienen tierra porque se la han apropiado a cuenta de ladronismo y las han legalizado falsamente; esa gente que luego vino y se apropió no sólo del suelo sino de los beneficios del subsuelo en los cien años de petróleo; esa oligarquía; ese grupo que en Venezuela está conformado por pocas familias con bastante servidores para que los defiendan; ese grupo está enfrentado a la gran mayoría del pueblo, al que yo llamo pueblo trabajador y en el que no se excluye ni al científico, porque el científico es un trabajador; ni al artista, porque el artista es un trabajador; ni a ningún profesional; ni a ninguna ama de casa; ni a ningún trabajador informal; ni a ningún campesino; ni a ningún cooperativista; es decir, somos dos clases, dos grupos sociales enfrentados; uno: la oligarquía explotadora y vende patria; otro: el pueblo trabajador de Venezuela; y solamente entendiendo que ésta es la contradicción fundamental de nuestro pueblo; podremos superar al neoliberalismo. No puede ser que todo el pueblo, desde el científico que produce la vacuna, desde el creativo que trabaja para que se vendan los productos; desde el obrero u obrera; desde la madre; que todos y todas trabajemos para que ellos, la oligarquía, se apropie del producto de nuestro trabajo; eso se llama la contradicción fundamental del sistema capitalista en Venezuela y contra quien el pueblo lucha por salir de ese sistema aunque dentro de un proceso pacífico. ¿Cuándo dejará de ser capitalista Venezuela? Cuando esas relaciones de producción y apropiación sean equitativas; es decir, que lo que produzcamos socialmente sea colectivamente apropiado por el pueblo trabajador; allí estaremos en una nueva sociedad, en un nuevo proceso que tendrá otras contradicciones porque el ser no dejará nunca de tener contradicciones en la lucha por la justicia humana y en su ascenso hacia un nuevo humanismo.
Tener contradicciones en la vida es lo normal y esta la tenemos que superar, esa es la segunda contradicción profunda en la Revolución Bolivariana ¿Qué pasa? ¿Qué observamos en nuestro proceso revolucionario? Que los ministros y ministras no se sienten trabajadores y trabajadoras; los diputados y diputadas no se sienten trabajadores y trabajadoras; los señores y señoras del Tribunal Supremo de Justicia no se sienten trabajadores y trabajadoras; ellos y ellas no sabemos qué se creen, porque solamente tienen cargos; pero la gente apenas tiene un cargo y ya se sienten de la otra clase social y muchas veces expresan: «Yo soy clase media» «Yo soy clase no se que» «Yo pertenezco al estrato tal» ¡No, mi amor! ¡TU ERES PUEBLO TRABAJADOR, RECONÓCETE!; y hasta que en la Revolución Bolivariana esto no se reconozca no avanzaremos en la superación de las contradicciones políticas del sistema opresor, así como el patriota tiene que reconocer que el principal enemigo es una potencia extranjera que quiere impedir nuestra libertad y nuestra independencia como nación; también , el enemigo interno es una oligarquía que quiere impedir nuestra independencia como pueblo, nuestra independencia interna no puede estar subordinada a ninguna oligarquía; tenemos derecho a ser dueños y dueñas de nuestro trabajo; bien sea si se es profesional o si se es limpiabotas o si eres juez o jueza.
E.: María, fíjate qué interesante lo que estás diciendo, y nos parece muy aleccionador, porque se nos ha presentado el caso de que si nos ven sacar la papelera de la oficina donde laboramos, nos dicen: ¡No! ¿Por qué usted hace eso? ¡Eso no puede ser!; si una agarra el cepillo de barrer, expresan igualmente: ¿Por qué usted va a barrer? ¿Por qué va a limpiar?; y esa es una actividad tan normal, que limpies el sitio donde trabajes; se hace porque se quiere ayudar a otra persona que con su actitud manifiesta que no quiere limpiar, quizás porque no se siente identificada con su labor o porque no ha entendido que pertenece a una cadena que necesita liberarse; no entiende que hay que servir y no ser servido.
M.: Evidentemente, no entiende su aporte sencillo y noble, ni su papel en la sociedad y mucho menos comprende sobre el proceso revolucionario que hombres y mujeres vanguardistas estamos desarrollando en beneficio y defensa de la humanidad.
E.: Pero, asumir esa actitud necesita mucha conciencia; porque es como decía un amigo nuestro: ¡Carajo, cómo enferma una oficina con aire acondicionado a los que se llaman revolucionarios y revolucionarias! ¡Cómo los enferma una camioneta trail blaiser y un teléfono celular corporativo!
M.: Porque no entienden lo profundo, ven sólo el fenómeno, ven la trail blaiser, eso es el fenómeno, ven todo lo que está a su alrededor; pero lo profundo es que esa persona es un trabajador explotado, dominado y subordinado; esa es la contradicción fundamental, así que no omitas esa observación.
E.: Están doblemente alienados y alienadas, porque ni cultural ni políticamente serán revolucionarios y revolucionarias si se les olvida a que clase social pertenecemos.
M.: Sí, tienes razón, creen haber salido de la clase social explotada, pero esa clase es su origen y ¡esto no lo quites de la grabación!; esto tiene que salir, insisto. Entonces, continuemos, fíjate; para entender la Revolución Bolivariana hay que entender estas categorías, hay que entender la contradicción entre la nación venezolana y cualquier potencia extranjera; hay que razonarla y estar identificado o con la potencia extranjera o con la nación venezolana; para entender lo fundamental de nuestra Revolución Bolivariana tienes que saber que no hay sino dos grandes clases enfrentadas; eso de los estamentos de clase obrera, clase campesina, todo eso sirve para el análisis, pero la realidad, lo profundo, es que somos dos grandes grupos en confrontación: el pueblo trabajador y la oligarquía explotadora, no hay más.
E.: Así como decía el amigo, que también vale el comentario: ¿Cómo me puedes venir a hablar de la liberación de la mujer cuando no me estás hablando de la liberación del país? Jamás podré entenderlo, jamás podré entender que haya un grupo de mujeres por allí, pegando gritos y consignas y no estén formadas para liberar a la nación cuando esa es la verdadera contradicción. ¿Te das cuenta María?
M.: Este planteamiento, muy común, nos sirve para adentrarnos en la tercera contradicción, que es anterior a las otras. Ya August Bebel, en su libro «La mujer y el socialismo» apuntó: la mujer es la primera esclava y prevé que será la última en liberarse; pero nosotras estamos seguras de que no será la última en liberarse, que de la misma manera que conquistemos la liberación de la nación y del pueblo trabajador, alcanzaremos la liberación de la mujer venezolana.
E.: A propósito de ese argumento, es bien interesante María, que comentemos acerca de la posición de las mujeres del movimiento de liberación femenina de la década de los años 60, cuando cuestionaron a las liberacionistas anteriores expresando que no sólo la opresión de clase y discriminación contra las mujeres se atribuía a la naturaleza patriarcal del capitalismo, ellas se refirieron en ese entonces, al chauvinismo masculino de la izquierda comunista; y en cierta forma acusaron a las revolucionarias, entre ellas a Clara Zetkin, de no enfrentar esa situación, pues, se dedicaron a liberar a la nación soviética dejando de lado la liberación real de las mujeres, no plantearon la liberación de forma paralela….
M.: No, no lo interpreto así. Ella es una mártir, precisamente ella es la que muere en Alemania defendiendo su posición comunista. Clara Zetkin, y esto no lo podemos olvidar, lo que hace es impulsar cuando crea el 8 de marzo el día de la trabajadora y en esto fue consecuente con las luchadoras por los derechos de la mujer y los derechos del pueblo; porque hay mujeres que sólo se dedican a los derechos de las mujeres y lo demás temas relacionados con la liberación no les parece importante; por ejemplo: que los negros sean humillados eso no les parece importante; que las personas con discapacidad no tengan oportunidades no les parece importante; que los desvalidos, los que están en la calle no tienen importancia; a ellas lo único que les importa son las reivindicaciones de las mujeres.
E.: Entonces, pudiéramos decir que Clara Zetkin entendió su momento histórico…
M.: Sí, entendió a la sociedad soviética, percibió lo que ya hemos dicho: «que lo esencial es invisible a los ojos», así es la expresión del zorro cuando habla con El Principito; y los y las demás no lo veían, pero ella sí lo distinguía; no bastaba la lucha de clases, no bastaba la emancipación del proletariado para lograr la emancipación de la mujer; aunque coadyuvaba pero no bastaba ¿y por qué no bastaba? Porque el origen de la dominación de la mujer estaba precisamente en el sistema patriarcal, que también existía en la estructura mental de los revolucionarios soviéticos; y que la contradicción clasista, reforzaba esa dominación ¿comprendes? No creas, las revolucionarias, como Rosa Luxemburgo, Clara Zetkin o Alejandra Kollontai sí se enfrentaron al chauvinismo masculino de la izquierda de ese entonces; pero les tocó asumir, y yo lo justifico, otra posición; recordemos siempre «que lo esencial es invisible a los ojos».
Fíjate, si eres mujer, además eres obrera, además eres campesina, además eres negra y además eres discapacitada, todas esas cadenas de discriminaciones te aplastan en la sociedad patriarcal como en el pasado y como aún se siente hoy; y en el momento histórico revolucionario que le tocó vivir a Clara Zetkin no sólo había que superar la contradicción clasista para lograr la liberación de la mujer; ahora te digo, que es necesario tener presente, que esa experiencia de lucha femenina era muy nueva en los países socialistas, porque 70 años en la historia de la humanidad, después de que tenemos 6.000 años de discriminación de la mujer, 70 años hermana es un minuto, es una experiencia pequeña. Así que los 70 años de la Unión Soviética y la lucha de las mujeres por sus reivindicaciones, es indudable que contribuyeron a los cimientos del movimiento liberacionista de hoy día. Debemos agregar que son las mujeres de Rusia primero y de la Unión Soviética después, y pongo por símbolo a Valentina Tereskova, la primera mujer que salió de la tierra, astronauta; sí contribuyó a todo este movimiento tan maravilloso que se ha desarrollado con más fuerza a partir de las años 60 del pasado siglo y que tuvo como repunte aquella expresión de Simone de Beauvoir: «No se nace mujer se llega a serlo».
Ahora, para complementar lo anterior, quisiera que hiciéramos un aparte para hablar del feminismo; porque la gente identifica feminismo con el odio hacia el hombre o lo identifican con el modelo de la Chicholina, aquella diputada italiana que se quitaba la ropa y mostraba los senos; eso a lo mejor era feminista, no lo sé, pero el feminismo es única y exclusivamente la lucha por los derechos de las mujeres; como los cristianos son todos los que creen en Cristo. A mí me gusta hacer una comparación entre feminismo y cristianismo: los católicos son cristianos; los ortodoxos son cristianos; los evangélicos son cristianos; las monjas enclaustradas son cristianas; es decir todos creen en Cristo, y eso quiere decir que para ser cristiano o cristiana tienes que enclaustrarte en un convento, o ser ortodoxo, etc. Así mismo es el feminismo, hay feministas que les tienen odio a los hombres y hay una gran mayoría de hombres que les tienen odio a las mujeres, los misóginos; pero eso no es el feminismo; el feminismo es la lucha por los derechos de las mujeres, más nada. Quien defiende los derechos de las mujeres es feminista, quiéralo o no; y las que son lesbianas pueden ser feministas; pero eso no significa que las feministas sean lesbianas, eso es otra cosa. Entonces, hay una equivocación con respecto al concepto del Feminismo, aclaremos: el feminismo es la lucha por los derechos de las mujeres, eso es todo, no me le pongas más; como el cristianismo es el movimiento integrado por hombres y mujeres que creen en la doctrina de Cristo y lo aceptan como su redentor; independientemente de cuál sea su práctica; y pongo ese ejemplo para que la gente se ilustre y no diga: ¡No, yo no llego al feminismo!, como si ser feminista es escandaloso, se observa que lo han satanizado; pero hay feministas escandalosas y feministas que no somos escandalosas sino polémicas (risas de María). ¡ Ah ¡ pero, yo te estaba hablando era de cómo este movimiento había logrado ubicar históricamente la causa de la discriminación, subordinación y explotación en el patriarcalismo; ¿Y cómo lo notamos? Esta sociedad patriarcal y esclavista llevó su modo de vida a las leyes, a la religión, a las costumbres, a las artes, a las ciencias, a toda la vida humana.
E.: Impregnó todas las esferas…
M.: Impregnó como aspiramos todas impregnar a toda la sociedad venezolana con la Revolución Bolivariana. Bueno, ese patriarcalismo infiltró todo, hasta el lenguaje, la escuela, los dioses…
E.: Eso fue lo más peligroso, porque infiltraron la estructura lingüística que te lleva a la estructura del pensamiento, luego a la estructura del conocimiento y del saber y éste se deforma en un saber alienado que se desarrolla en función del mantenimiento de un patriarca, en función de una figura que te domina…
M.: En ese sentido yo me asombro cuando las abogadas me hablan acerca de sus estudios de Derecho Romano; es decir, que todavía aquí se enseña Derecho Romano.
E.: Y en esa época no éramos consideradas las mujeres ni siquiera seres humanos…
M.: En esa época el patriarca tenía derecho a matar a su mujer, a sus esclavos, a sus hijos y ese patriarcalismo es la base de las instituciones que rigen al Estado Moderno. El Estado nace patriarcal, las novelas son patriarcales, la poesía es patriarcal, la iglesia católica es patriarcal, y cuando las mujeres ubicaron en la ideología patriarcal el enemigo a derrotar comenzamos a vencer; y allí es donde yo digo que el concepto de género que han construido las mujeres y los hombres a partir de los años 70′ del siglo pasado, es para el movimiento de mujeres lo mismo que fue para la teoría marxista la lucha de clases planteada por Carlos Marx para el movimiento de la clase trabajadora; porque lo que hay que observar verdaderamente es que antes peleaban los trabajadores contra las mujeres porque les quitaban espacio en el trabajo; peleaban contra las máquinas por que les quitaban puestos de trabajo; peleaban contra cantidad de opuestos que no eran sus efectivos enemigos; el capitalismo del pasado y el neoliberalismo de hoy, compuesto por una clase dominante que los explotaba y aún explota, tanto a hombres como a las mujeres, a los niños y niñas y a todo el mundo; esa contradicción fundamental no era visible a los ojos los explotados; los subordinados, los discriminados sólo veían y siguen viendo los fenómenos y no terminan de ver lo esencial; asimismo, las mujeres que peleaban contra los hombres, que se enardecían al ver que las mujeres eran sacrificadas y quemadas vivas en la historia hasta el día de hoy, no entendían cuál era su verdadero enemigo, que no es sino la cultura patriarcal que se desarrolla como un cáncer con metástasis, que cubre a todo el cuerpo social; pero que hay que irlo desalojando de cada sitio, del lenguaje, de las instituciones, de las academias, del vulgo, de lo que la gente comenta, de los chistes, de todo.
Entonces, como ahora hemos descubierto dónde está el enemigo porque lo hemos visto con el lente de la teoría marxista y nos ha ayudado a llegar a la esencia del problema: el patriarcado, podemos decir que éste está derrotado y sus instituciones están derrotadas, ¿que tardará un tiempo? No sé cuanto tardará en derrotarse, pero ya está ubicado, y cuando el enemigo está develado tiene sus días contados.
Finalmente añadimos a lo reflexionado en esta conversación, que nuestra Revolución Bolivariana, desde un primer momento, es esencialmente igualitaria; su Constitución, como pocas constituciones en el mundo, tiene lo que nosotras hemos denominado el lenguaje no sexista, que nos reconoce desde el primer artículo hasta el final. ¿Qué golpe está recibiendo allí el patriarcado? Un golpe en la Constitución, en la Carta Magna, que era precisamente el sitio adonde llegaba toda esa tradición legal que aplastaba a las mujeres; ahí le hemos dado un golpe mortal al patriarcalismo; se lo hemos dado en las escuelas, en los medios de comunicación ¡Qué hermoso cuando uno ve utilizar a niños y niñas; a locutoras y locutores el lenguaje inclusivo! Todos estos pasos son maravillosos y están rompiendo las bases del patriarcalismo. En nuestra Constitución Bolivariana se reconoce al ama de casa como trabajadora y no como trabajadora de segunda, sino como trabajadora con derecho a la jubilación; y todos estos aspectos nos permiten hablar de lo esencial de la Revolución Bolivariana; y quien sino nuestro Presidente y Comandante Hugo Chávez Frías, quien defiende la nación venezolana de todos los enemigos extranjeros; y defiende al pueblo de la oligarquía; y defiende a las mujeres de la discriminación, subordinación y explotación que han padecido milenariamente; él es el auténtico revolucionario, no del siglo XXI, sino el revolucionario del milenio; ése es Hugo Chávez Frías, la esencia de la Revolución Bolivariana.
Solsticio de invierno. Caracas, Junio 2006.