La activista Laura Bugalho denuncia que está siendo perseguida por destapar esta trama de empresarios y sindicalistas, con conexiones policiales en Santiago de Compostela, que cobraba 10.000 euros por conseguir papeles. Superficialidad e invisibilidad «Sólo ha salido a la luz un tercio de la operación» Desde abril de 2010, Laura Bugalho recibió, al menos, cinco […]
La activista Laura Bugalho denuncia que está siendo perseguida por destapar esta trama de empresarios y sindicalistas, con conexiones policiales en Santiago de Compostela, que cobraba 10.000 euros por conseguir papeles.
Superficialidad e invisibilidad
«Sólo ha salido a la luz un tercio de la operación»
Desde abril de 2010, Laura Bugalho recibió, al menos, cinco llamadas anónimas que le preguntaron si era posible comprarle droga. Según explica Bugalho, esto sería otro intento de implicarla en nuevos delitos y acallar sus denuncias. Semanas antes, la jueza de instrucción Ana López-Suevos derivaba a la Audiencia Provincial de A Coruña el proceso judicial iniciado tras la Operación Peregrino, nombre dado por la Policia Nacional. Esta jueza ha instruido, también bajo secreto de sumario, un proceso contra la propia Bugalho, acusada de falsificar documentos reiteradamente para la regularización de migrantes.
Laura Bugalho ha estado implicada en múltiples luchas políticas y sociales, pero es su trabajo en el área de migraciones de la Confederación Intersindical Galega (CIG) el que habría provocado su persecución. Fruto de su trabajo de acompañamiento a personas migrantes se han destapado múltiples tramas de explotación laboral en A Coruña: prostitución en Guísamo, con deportistas extranjeros, o accidentes laborales de trabajadores brasileños en Rois. Pero es el actual proceso judicial contra la mafia de la inmigración galego-marroquí la que ha puesto a Bugalho en el punto de mira de diversos poderes fácticos.
‘Operación Peregrino’
La denuncia de esta mafia, que tuvo como resultado la Operación Peregrino, se inicia cuando varios migrantes reconocieron haber pagado 10.000 euros para conseguir ofertas laborales en Galiza. Éstas no sólo no se ajustaban a la realidad, sino que frecuentemente incumplían la legislación laboral estatal y estaban vinculadas a condiciones sociosanitarias infrahumanas.
Los imputados son Messaoud El-Omari (responsable del Centro de Información para Trabajadores Inmigrantes de CC OO en Compostela), Hadaoui Kayrou (actualmente en paradero desconocido), Bami Ikhlef, y los empresarios gallegos Ángel García Espido (en cuya granja la Policía Nacional encontró a dos trabajadores marroquíes durmiendo en el establo), Miguel Ángel y Ramón Hermo Sánchez y Ángel Baqueiro Meijide. Según la información, hecha pública en 2009, la trama lleva en funcionamiento desde hace al menos 20 años, los trabajadores extorsionados podrían ser muchos más y las empresas implicadas en la formalización de los falsos contratos podrían elevarse hasta 20 o 25.
Omari, ¿máximo responsable?
Una de estas empresas, Exlabesa (del sector del metal), posee una filial en Tánger a cuya inauguración acudieron el embajador del Estado español en Marruecos y el ministro marroquí de Asuntos Exteriores. En estas dos instituciones son en las que trabajan los contactos de El-Omari encargados de dar cobertura al reclutamiento de trabajadores, según relatan fuentes cercanas a los denunciantes. Los buenos contactos de El-Omari se han reflejado hasta en una serie documental [ver recuadro], cuya financiación provenía de Fadesa, entre otras empresas. En enero, el Supremo ratificaba una condena por eludir controles de blanqueo de dinero, en una época en la que el presidente de Fadesa, Manuel Jove, hizo negocios con las autoridades marroquíes, según publicó en enero el catedrático de Derecho Carlos Ruiz Miguel en su blog.
El-Omari se encuentra en libertad, ya que CC OO depositó la fianza de 140.000 euros como responsable civil del mismo. Además, este sindicato ha financiado los costes de su defensa y el imputado continúa en la organización, relatan diversos testigos. DIAGONAL se ha puesto en contacto con esta central sindical para confirmar estos hechos, pero desde el área de Inmigración gallega no quieren confirmar ni desmentir estos hechos.
La complicidad de Compostela
Fuentes cercanas a los trabajadores estafados señalan el miedo a denunciar a los integrantes de esa red en las oficinas de la Policía Nacional en Compostela. Según ha informado Novas da Galiza, esta situación se produciría por la cobertura con la que contaban en el interior de dicha comisaría gracias a la labor de Manuel Fernández Nogueira, comisario jefe de Inmigración y Extranjería en Compostela. Esta fuente declara que el propio subdelegado del Gobierno en A Corunha recomendó a los estafados efectuar estas denuncias ante la Jefatura Superior de la Policía Nacional en A Coruña. Incluso, la detención de El-Omari la realizaron agentes de esta comisaría, y no de la de Compostela.
Más hechos indican la posible participación en la trama de funcionarios de extranjería de Compostela, cuyas oficinas se encuentran dentro de las dependencias de la Policía Nacional de esta ciudad. Uno de ellos, la facilidad con que se producían cambios de provincia y de sector laboral entre lo constatado en la Autorización de Residencia y Trabajo cuando eran dados de alta y dónde acababan trabajando. Según una abogada de la red de apoyo a migrantes Ferrocarril Clandestino estos cambios pueden ser indicios de la complicidad de la Administración. La ausencia de pagos de las tasas administrativas necesarias para dar de alta a los trabajadores por parte de los empresarios contratantes, cuando éste es un requisito muy controlado por parte de la administración, refuerza las denuncias de los trabajadores estafados sobre la implicación de personal funcionario.
FADESA, Jové y el-Omari
En 2005 se presentó a nivel internacional la serie documental Hanan. De Marruecos a Galicia: Lo que nos une. Una producción financiada tanto por capital privado y público español y marroquí, cuya principal protagonista era la hija de Messaud El-Omari. Entre las empresas que financiaron esta producción (emitida en TVG, TVE, Localia y RTM), se encontraba la constructora galega Fadesa. Esta serie, según su productora IbisaTV, profundizaba «en los lazos humanos de unión y convivencia, frente a la falsa hostilidad». Días antes de la presentación de la serie, Manuel Jove Capellán (propietario de FADESA) era condecorado con el wissam alauita.
Fuente: http://www.diagonalperiodico.net/Diez-mil-euros-por-papeles-y-un.html