Més d’una vintena de vaguistes [trabajadores en huelga] de Telefónica han estat acomiadats [han sido despedidos] a Barcelona. Por ellos, por ellas. […] qué queremos que sea España. Yo quiero que sea un país que se parezca a ese proyecto de la Residencia, de la Junta para Ampliación de Estudios, del colegio Cervantes: libertad, cultura […]
Més d’una vintena de vaguistes [trabajadores en huelga] de Telefónica han estat acomiadats [han sido despedidos] a Barcelona. Por ellos, por ellas.
[…] qué queremos que sea España. Yo quiero que sea un país que se parezca a ese proyecto de la Residencia, de la Junta para Ampliación de Estudios, del colegio Cervantes: libertad, cultura y tolerancia; y, para lograrlo, ciencia y educación. Por eso, para mí era un regalo poder intentar la escritura de una obra que contuviera el espíritu de todo aquello, el espíritu de la Residencia.
José Ramón Fernández (2010)
Quien hace daño a Cataluña es quien se envuelve en la senyera y no da explicaciones.
Joan Herrera (2015)
Borrell clava una estocada final: el beneficio fiscal de la independencia en términos del PIB es del 1/1,5% «¿ por un punto y medio se tiene que declarar la independencia?». Eso sin contar con el aumento de los costes, para empezar los de las nuevas estructuras de estado. Estamos en lo mismo del comienzo: sin entrar a considerar la enfadosa cuestión monetaria y de la UE, la República catalana no es económicamente inviable, a condición de que sea ultraliberal y minimice la cuenta de gastos; socialmente, proclamada sobre la división de la población al 50% en el mejor de los casos, es un desastre; la conclusión política de esa condición y esa consecuencia es la catástrofe de la izquierda, dividida y desnortada, y la renovación de la larga hegemonía de la burguesía y la pequeña burguesía (¡qué antiguo soy con esos conceptos!) por décadas y décadas, como lo viene haciendo desde finales del XIX, con escasos períodos de paréntesis popular (1931 o 1936-1939/ los años setenta) y un amago de paréntesis nuevo al final de la era pujolista, malogrado por el PSC y el tripartito que dieron aire de nuevo al nacionalismo.
José Luis Martín Ramos (2015)
Ellos, los que mandan, nunca se equivocan. Aciertan casi siempre. Su especialidad es cooptar, integrar, domar a los rebeldes para asegurar que el poder de los que mandan de verdad y no se presentan a las elecciones se perpetúe y se reproduzca. El transformismo es eso: instrumento para ampliar la clase política dominante con los rebeldes, con los revolucionarios, asumiendo algunas de sus reivindicaciones a cambio de neutralizar y dividir a las clases subalternas. La clave es esta: para conseguir que el sujeto popular sea no solo vencido sino derrotado, es necesario cooptar a sus jefes, a sus dirigentes. Con ello se bloquea la esperanza, se promueve el pesimismo y se demuestra que, al final, todos son iguales, todos tienen un precio y que no hay alternativa a lo existente. La organización planificada de la resignación.
Manolo Monereo (2015)
Antes de entrar propiamente en materia (11 S y Manuel Sacristán), cuatro breves observaciones:
1. Las elecciones del próximo 27S no pueden ser interpretadas rigurosamente como elecciones plebiscitarias porque las mismas fuerzas políticas que las han convocado, y señalan a esa dirección interpretativa presentándola como la única lectura correcta, admisible o posible del resultado electoral, hablan de sumar o contar escaños. Si es así, ¿cómo es posible una lectura en esa clave plebiscitaria si las unidades que suman en el cómputo no son votos sino escaños, calculados éstos a partir de una ley electoral vigente desde hace 35 años en .Cat (y que nunca ha sido cambiada) según la cual el voto de algunos ciudadanos/as cuenta el doble que el de otros para la designación de esos escaños?
José Luis Gordillo ha escrito una riguroso artículo sobre el tema en el último mientras tanto electrónico: http://www.mientrastanto.org/boletin-138/notas/si-no-cuentan-los-votos-no-son-plesbicitarias
2. La iniciativa del Ayuntamiento de Barcelona de poner en marcha una red de acogida a refugiados no sólo ha encontrado rápido eco en otras ciudades del país (Madrid, Córdoba, Valencia, etc) sino que es un magnífico gesto que debe merecer nuestro apoyo (Madrid por ejemplo, destinará 10 millones a un extenso plan de acogida y apoyo a grupos de migrantes).
Entre las actuaciones ya definidas se encuentra la ampliación de la dotación económica (200 mil euros) del Servicio de Atención a Inmigrantes, Emigrantes y Refugiados. Con palabras de Gerardo Pisarello, el primer teniente de alcalde del consistorio. «El asilo es un derecho de las personas y estamos obligados a actuar». Nada que ver, por supuesto, con las declaraciones de la vicepresidenta del Ejecutivo, Soraya Sáenz de Santamaría: España está «muy saturada» con la inmigración irregular.
¿No es este un ejemplo más de que podemos entendernos, de que podemos actuar fraternalmente gentes de aquí y de allí en beneficio de los sectores sociales más desfavorecidos? ¿No hablan los hechos por sí mismos?
3. A nadie sorprende que efectivos de la Guardia Civil y de la Fiscalía Anticorrupción de la Audiencia Nacional hayan abierto una nueva operación contra la corrupción en Catalunya sobre las comisiones de financiación ilegal de CDC. A nadie. Se han registrado la sede de la Fundació Catdem; el domicilio de Daniel Osacar (antiguo tesorero del partido) y las instalaciones de cuatro ayuntamientos catalanes. Se ha seguido el rastro al pago de comisiones por la adjudicación de obras por parte de la constructora Teyco (familia Sumarroca) a CDC mediante la intermediación de la fundación convergente. Recuérdese que Jordi Sumarroca sigue en prisión por un asunto vinculado a financiación irregular en la localidad tarraconense de Torredembarra. La denuncia la presentó ERC, la fuerza «opositora» aliada del gobierno catalán que junto con CDC e «independientes» forman «Junts pel sí». Contratos, manuscritos, «parecen apuntar» que del precio de adjudicación se extraía el 3%. La cantidad era transferida a CDC a través del instrumento que se mantenía a tal efecto: Catdem (antes Fundació Trias Fargas). Jordi Pujol, el nada honorable, y Carles Sumarroca (padre del propietario de Teyco) fueron los fundadores de CDC.
Tampoco sorprende la tesis expuesta por el president Mas en su comparencia del pasado miércoles en sede parlamentaria: una conspiración del Estado es la causa de esta nueva investigación por cobro de comisiones a pesar de que la causa la abrió un juez de Torredembarra a instancias, como dijimos, de sus socios de ERC. Añadió: «De aquí al nuevo 27S habrá nuevos montajes. Hay poderes del Estado que actúan de manera barriobajera y con intereses espurios». En tiempos del molt ex honorable se decía que eran ataques a Catalunya; ahora, en tiempos de su hijo político, son ataques al «»proceso» secesionista. En ningún caso, ninguna autocrítica. Nada ha sido probado, nada hay de cierto en todo «estos montajes españoles».
Oriol Junqueras, el supuesto «jefe de la oposición catalana», no intervino y se ausentó a mitad del debate en la Diputación permanente del Parlament de Catalunya. ¿Lucha contra la corrupción, alguien ha hablado en serio de la lucha contra ala corrupción?
Hablando de corrupciones y de la constructora Teyco. La empresa del señor Sumarroca hizo donaciones a Fòrum Barcelona, hoy liquidada. Entre 2008 y 2013, fueron 1,32 millones. CDC cobró en esos 2,2 millones de CatDem. En total, 3,5 millones
3. Dos aproximaciones que muestran cercanía. Hablan de uno de los sectores más desfavorecidos y vulnerables de nuestra sociedad , un colectivo que tiene además un muerto reciente en circunstancias en absoluto aclaradas:
A. «Creemos que es el momento de que Colau dé explicaciones, porque es ella la responsable de la seguridad en la ciudad de Barcelona. El Ayuntamiento no ha hecho frente a la proliferación del top manta. No se ha visto un mensaje claro hacia la Guardia Urbana»
B. «Tenemos chatarreros, luego vinieron los manteros. Si no paramos la dinámica tendremos limpiacristales y a todos los que quieran ocupar ilegalmente la vía pública».
En B habla el responsable municipal del PP en el ayuntamiento barcelonés, el hermano del Ministro del Interior. En A, el responsable de CDC. ¿Observan muchas diferencias? ¿En el tono tal vez? ¿Y en el fondo?
4. El gobierno aragonés derogará la ley que denominaba lapao al catalán. Palabras del presidente Javier Lambán: «Lejos de que nadie rechace reconocer la existencia de hablantes en catalán en Aragón, deberíamos proclamarlo como un orgullo». Unos 60 mil ciudadanos aragoneses (1,2 millones en total) hablan catalán.
Paso a los dos puntos de la sabatina:
El 11 de septiembre, el próximo viernes, el día que se inicia la campaña electoral de las próximas elecciones autonómicas (todo ha estado diseñado para esta «inauguración»), se celebrará una nueva manifestación independentista. Esta vez en la avenida Meridiana de Barcelona, en un barrio nada independentista.
Si me dejara llevar por el sentimiento que me embarga ante este nuevo 11 S escribiría en los siguientes términos (no son míos por supuesto, ¡quien supiera!; los tomo prestados de Pablo Sorozábal, Lloro por King Kong , Cambalache, 2015):
» […] Blanca interrogaba al arabesco pero no le decía nada, no le revelaba el misterio de su existencia, el misterio, sobre todo, de las cosas y los seres que la rodeaban. Don Julio ronca a su lado mientras Blanca ve en el techo la turbia luz de los atardeceres de verano anegando la habitación que habitara con Tomás y los niños en un barrio lejano y perdido de la gran ciudad, aquella luz de fuego naranja, verde, blanco, que chocaba brutalmente contra las tendidas sábanas puestas a secar en las cuerdas del patio, luz como un pájaro ciego, enloquecido, que topa contra las mallas de la red desplegada para atraparlo. La blancura de las sábanas, recuerda Blanca, era tan grande que los ojos se quedaban doloridos al mirarlas y casi daba miedo que la luz fuera a quemarlas, a convertirlas en montoncitos de ceniza blanca, mojada. Y recuerda también, sin entenderla, pues nada, absolutamente nada entiende de cuanto le ha rodeado siempre y le rodea, la brusca dulzura, imperiosa y apremiante, con que Tomás, cuando aún no se habían casado, la había tumbado una tarde entre dos grandes retamas allá en su pueblo, y sus manos habían invadido su cuerpo por debajo del vestido, y aquella cosa cálida y rígida había barrenado a ciegas entre sus piernas durante unos instantes. Y recuerda la boda, y al poco tiempo el primer hijo, y a los once meses el segundo, y la marcha a la gran ciudad lejana, y la muerte de Tomás bajo unos hierros roñosos que se desploman en el tajo, y Blanca no entiende nada, ella que lo único que querría, que lo único que le gustaría es entender, saber el porqué profundo, el porqué último de los pequeños porqués de todas las cosas. Y ante la falta de entendimiento Blanca se refugia en la total apatía, en la indiferencia absoluta, en un profundo e insensible extrañamiento del mundo, de sí misma, de todo. Aparta los ojos del techo y los vuelve hacia ese señor que duerme a su lado, que todas las tardes va a buscarla a un café cercano a las Ramblas, que la lleva a una habitación alquilada, que a ratos habla, que a ratos se agita y daña y humilla y hiere, y luego se duerme, y cuando llega el alba se despierta y paga sus gozos con unos papeles sucios o limpios, arrugados o lisos, con incomprensibles efigies e inscripciones estampados en su superficie de colores, parte de los cuales envía a su madre para que sus hijos vivan, esos hijos que ella nunca quiso tener, que al nacer, si por ella hubiera sido, habría abandonado o ahogado en el río como se ahoga a unos cachorros de gata. Súbita, inesperadamente, al cabo de mes y medio de relaciones con Blanca, cuando su imaginación había agotado el repertorio de servicios a que se reducía su trato sexual con la muchacha, don Julio Reyes se vio afectado por una profunda crisis de impotencia».
Y sigue y sigue hasta el llanto por King Kong. Al leer el fragmento que les he copiado no puedo dejar de pensar en mi madre y en su hermana. Vivieron en esos barrios barceloneses que describe Sorozábal. Su padre había sido asesinado no hacía mucho y su madre había fallecido años antes. Su nueva madre no podía con todos. Eran ya trabajadoras adolescentes.
Pero como no se trata de expresar sentimientos sino de dar razones, daré las mías sobre este nuevo 11 de septiembre independentista (como el de los tres últimos años, Junqueras tiene toda la razón al recordarlo), convocado también por el Òmnium y la Assemblea Nacional de Catalunya:
¿Quiénes en buena lógica pueden-deben asistir a esta manifestación? Pues todos aquellos ciudadanos y ciudadanas que sean independentistas y que sean partidarios de «Junts pel sí», coalición «masista» de la que forman parte, en tercer y segundo lugar respectivamente, la que, salvo error por mi parte, sigue siendo presidenta de Òmnium y la ex presidenta de la ANC, la candidata Forcadell, la misma que en varias plazas catalanas grita estos días con pasión descontrolada que por fin los catalanes podremos dejar de ser esclavos de España.
¿Alguna condición más? Creo que sí, una más. Que la corrupción, que enlaza a corruptores y corruptos y muestra a las claras la forma de hacer política en .Cat (también en el resto de España por supuesto: para forrarse y forrar a los suyos), que la corrupción, decía, no sea asunto importante para el o la potencial manifestante. Si no lo es, si no le importa un pimiento o piensa que todo es una conspiración de los servicios secretos españoles o una invención de la nueva guerra sucia (la tesis que deja a entrever Mas siempre que puede) no hay problema, adelante, ¡Visca la nova Catalunya corrupta!». Si lo es, si le importa el asunto, si no traga con él, no es imposible que se manifieste al lado de alguien que ha hecho de la corrupción una forma cómoda de vida o bien al lado de alguien que la vea con ojos muy generosos. No és problema, tothom fa igual, ¡todo el mundo hace lo mismo! En este segundo caso, lo que parece mejor es permanecer alejado.
Así pues: independentistas, Junts pel sí y posición nada critica respecto a la corrupción. Dadas estas condiciones, la asistencia es plenamente consistente.
¿Lo sería, en cambio, para los ciudadanos partidarios del llamado dret a decidir que no sean independentistas? No, en absoluto. ¿Y para los independentistas que no apoyan a los del «Junts pel sí»? Tampoco. ¿Y los que siendo independentistas y partidarios de «Junts pel» sí tengan una mirada razonablemente crítica respecto a la corrupción? Pues tampoco entran.
En síntesis, además de todos los ciudadanos no independentistas, en buena lógica ni los miembros y partidarios de las CUP ni de «Catalunya sí que es pot» (o grupos afines) podrían-deberían asistir a esa manifestación. Podrían montar otra desde luego, pero, desde sus propias posiciones, no tiene consistencia alguna asistir a esa manifestación pro-candidatura «hijo político del molt ex honorable», una manifestación-concentración que, además, será vivida y presentada como el primer gran acto electoral de la candidatura Romeva-Forcadell-casilla 4 posición Rey-Reina.
Por cierto, me olvidaba: ¿qué debe sentir el gran ecosocialista europeo al encabezar una lista donde la corrupción ha sido el rico pan nuestro de cada día durante años y años de algunos de los candidatos? ¿Nada que decir? ¿El ecosocialismo no le hace ascos a nada ni a nadie? ¿Tragamos sapos y ya está?
Lluís Rabell, el cabeza de lista de CSQEP, ha anunciado su no asistencia a la manifestación. Perfecto, de acuerdo. En buena lógica nadie de su candidatura debería asistir.
La alcaldesa de Barcelona también ha informado de su no participación. Sorprendentemente, eso sí, ha comentado que el Ayuntamiento barcelonés podría estar representado por algunos miembros del consistorio. ¿Y esto cómo se come? ¿Ella no irá pero sí asistirán, en cambio, otros regidores? ¿Por qué? ¿Pero no son todos ellos miembros de una candidatura que no defendía «de entrada» la independencia de Cataluña, condición que hizo que muchos la apoyáramos? ¿Acaso el consistorio asiste a todas las manifestaciones que se celebran en la ciudad?
Paso al segundo punto. Brevemente, muy brevemente:
Este 5 de septiembre recordamos el nonagésimo aniversario del nacimiento del que seguramente es el filósofo ibérico más importante de estos últimos 80 o 90 años. Digamos, para entendernos, que fue como un Ortega muy verde-enrojecido. Sánchez Ferlosio, Brossa, Raimon, Goethe, Heine, Scholz, Gramsci, Lukács, Marx, Engels, Benjamin, Lenin, Russell, Korsch, Heller, Rubel, Harich, Meinhof, Carnap, Quine, Stegmüller, Popper, Bunge, Kuhn,… son algunos de los autores que estudió, tradujo, comentó y enriqueció. Se va a editar en breve un ensayo que permite un magnífico acercamiento a su obra. Francisco Fernández Buey es el autor y Sobre Manuel Sacristán es el título. Le acompaña un espléndido documental dirigido por Xavier Juncosa: «Filosofando desde abajo».
¿Algún recuerdo, alguna iniciativa, algún comentario por parte de las instancias oficiales catalanas? Nada, silencio total, se está rodando. Y eso que uno de los consellers más importantes -hablo de Andreu Mas-Colell-, el puntal de la apuesta neoliberal del gobierno Mas, fue alumno suyo (nada que ver con su maestro) en los años sesenta del pasado siglo?
¿Qué pensar de este silencio institucional, de esa palabra extraña -«silencio», que lo rompe al decirla- en el decir poético de Wislawa Szymborska? Pues que es consistente, absolutamente consistente. ¿Por qué? Por lo siguiente:
¿Qué es lo más esencial de la obra y el legado de Manuel Sacristán? ¿Sus espléndidos textos de crítica literaria? ¿Su amor al teatro? ¿Sus críticas musicales de Laye ? ¿Su prodigiosa capacidad de traducción (unas 30 mil páginas)? ¿Su decisivo papel en la consolidación de los estudios de lógica en nuestro país de países? ¿Su pasión por Gramsci, alguien digno de amor? ¿Su riguroso marxismo sin ismos? ¿Sus presentaciones y prólogos? ¿Su conocimiento de la obra de Heidegger? ¿Sus estudios marxianos? ¿Sus aproximaciones a El Capital , entre ellas un prólogo a la edición catalana del clásico? ¿Sus clases de metodología? ¿Su capacidad para darse cuenta de la importancia de los entonces llamados nuevos movimientos sociales? Hay más, mucho más, pero me interrumpo. En mi opinión, todo eso, desde luego todo eso. Pero sobre todo sus intervenciones políticas, su praxis, su compromiso y su forma de entender la militancia, el activismo y la apuesta por los más desfavorecidos. Nadie como él…
Me corrijo: muy pocos como él. Su amigo, compañero y camarada Francisco Fernández Buey transitó por el mismo (e infrecuente) camino. Murieron ligeros de equipaje, casi desnudos, enseñándonos a todos. Espejos en los que podemos mirarnos.
PS. La nueva incorporación a «Junts pel sí»: Karmele Marchante, la tertuliana de Sálvame en Telecinco, no será sólo uno de los fichajes que incorporará Catalunya Ràdio a su nueva temporada -como colaboradora del nuevo programa que presentará Sílvia Cóppulo- sino que, además, ha sido y es noticia por protagonizar un vídeo de la ANC donde se muestra muy abierta a la independencia de Catalunya..Marchante ha asegurado que piensa mantenerse activa durante la campaña electoral del 27S. Colaborará…. ¡lo han adivinado! con Junts pel sí, Òmnium Cultural y Súmate en varios actos.
Rebelión ha publicado este artículo con el permiso del autor mediante una licencia de Creative Commons, respetando su libertad para publicarlo en otras fuentes.