En 13 de los 17 Consejos de Ministros celebrados en 2023 se han aprobado modificaciones presupuestarias tendentes a aumentar el gasto militar. En muchos casos no dependen directamente de Defensa y comprometen partidas durante varios años.
El gasto militar real de España nunca coincide con la cifra oficial del presupuesto del Ministerio de Defensa. Esa es, simplemente, la cantidad comprometida en el momento de aprobarse las cuentas generales.
A esa suma inicial, desde el primer momento, hay que sumarle montantes repartidos por otros ministerios con relación directa con el sector militar. Sólo por esta razón, en el caso de los Presupuestos Generales del Estado de 2023, el importe aumentó en 13.514 millones de euros.
Por añadidura, la cantidad que finalmente gasta Defensa suele ser muy superior. En 2021, por ejemplo, el presupuesto inicial era de 9.412 millones de euros y el final de 10.853. Esta ejecución del Presupuesto (para todos los ministerios) la publica anualmente la Intervención General de la Administración del Estado, y se incluyen las diferentes modificaciones presupuestarias que se van aprobando durante todo el año para cada ministerio.
Pero hay más: hay que agregar las modificaciones presupuestarias que comprometen las cuentas durante varios años y las que afectan a otros ministerios, pero tienen, también, un marcado cariz castrense. Estas no aparecerán en la ejecución del Ministerio de Defensa, pero suponen un aporte extra desde el punto de vista militar.
Sumando unas y otras (las del de Defensa, las de otros ministerios y las que comprometen diferentes anualidades), el gasto militar español (hasta el 25 de abril de 2023, cuando se celebró el último Consejo de Ministros) ha aumentado en 8.743 millones de euros.
21 aviones de combate
En 13 de los 17 Consejos de Ministros que se han celebrado en lo que va de año ha habido modificaciones presupuestarias que han incrementado el gasto militar comprometido por el Ejecutivo español. Aunque los trasvases más cuantiosos se han aplicado en los tres últimos.
En el del 11 de abril de 2023 se movieron 3.728,9 millones de euros al amparo del Ministerio de Hacienda y Función Pública. De ellos, 581,2 millones salieron del Fondo de Contingencia para sufragar los gastos ocasionados por la participación de las Fuerzas Armadas Españolas en operaciones de mantenimiento de la paz.
De igual forma, se acordó la modificación de los límites de gasto y el número de anualidades para adquirir compromisos de gasto con cargo a ejercicios futuros, en aplicación de lo dispuesto en el artículo 47 de la Ley General Presupuestaria (Ley 47/2003, de 26 de noviembre).
Su finalidad, explican, es posibilitar al Ministerio de Industria, Comercio y Turismo la atención de la financiación de los programas Halcón (1.397,7 millones de euros) y la modernización, evolución y apoyo logístico del avión de combate EF-2000 (III) (1.750 millones de euros). En el primer caso, los fondos se comprometen hasta 2027 y en el segundo hasta 2026.
El Proyecto Halcón, apuntan desde el Ministerio de Defensa, consiste en la adquisición de 16 monoplazas y 4 biplazas, equipados con radar de barrido electrónico (E-Scan). Éstos, detallan, reforzarán la flota de Eurofighter del Ejército del Aire, lo que permitirá la sustitución progresiva de los F-18 de la fuerza aérea española.
Casi 2.000 millones de euros en vehículos de combate
Más dinero aún se movió una semana después: 3.943 millones de euros. Otra vez en virtud de una modificación de los límites de gasto y bajo el paraguas de Hacienda y Función Pública.
834,9 millones se destinarán al programa conjunto de Guerra Electrónica Santiago, el simulador SIMFAC de apoyo aéreo y a un sistema de Entrenamiento Táctico del avión T.21 (simulador de vuelo). También a una embarcación para la Escuela de Buceo de la Armada, un centro de coordinación de operaciones aéreas desplegable o el Sistema MISTRAL (sistema ligero de misiles de corto alcance).
Servirán, asimismo, para la adquisición de drones (dentro del Plan Director de los Sistemas Aéreos Remotamente Tripulados –RPAS, por sus siglas en inglés–), equipos y material para la Unidad de Drones y diversas infraestructuras. Con todo lo anterior, se empeña dinero hasta 2033.
Hay que sumar 476 millones que estarán dedicados al Programa Pizarro (vehículos de combate), al Programa NH-90 (II) –consistente en la renovación de helicópteros– y al Programa VCR 8X8 (producción de 348 vehículos de combate sobre ruedas 8×8).
Pero el premio gordo en este Consejo de Ministros se lo llevó el Nuevo Programa de Vehículo de Apoyo Cadenas (VAC). Consiste en la progresiva sustitución de la flota de vehículos Transporte Oruga Acorazado (TOA) por los VAC. Este proyecto se lleva 1.970 millones de euros.
El resto irá para el nuevo programa de adquisición de dos Buques Hidrográficos Costeros (BHC) y el de Sistemas Aéreos Remotamente Tripulados Tácticos de Altas Prestaciones (SIRTAP).
Los pagos completos de estos programas se dilatarán, en algún caso, hasta 2037.
820 millones de euros para comprar 8 helicópteros
El último aumento del gasto militar español, hasta ahora, se aprobó en el Consejo de Ministros del 25 de abril, y correspondió directamente al Ministerio de Defensa. Supuso adquirir 8 helicópteros multipropósito MH-60R, por un valor estimado de 820,5 millones de euros.
Estos nuevos aparatos, explican, que sustituirán a la flota de helicópteros tácticos navales, basada actualmente en el modelo SH-60B y que se encuentran al final de su vida operativa (su retirada está prevista para 2025), “permitirán a la Armada cubrir sus necesidades y actualizar y potenciar sus capacidades en el cumplimiento de las misiones que tiene encomendadas”.