Recomiendo:
0

El hombre es el que pertenece a la tierra

Fuentes: Rebelión

¿Que resta de la vida si un hombre no puede oír el llorar solitario de un ave o el croar nocturno de las ranas alrededor de un lago? Carta del Jefe Seatle al presidente de EEUU Éramos muchachos y el destino de nuestra América se forjaba en Sierra Maestra; ahora somos viejos y nuestros sueños […]

¿Que resta de la vida si un hombre no puede oír el llorar solitario de un ave o el croar nocturno de las ranas alrededor de un lago?

Carta del Jefe Seatle al presidente de EEUU

Éramos muchachos y el destino de nuestra América se forjaba en Sierra Maestra; ahora somos viejos y nuestros sueños se plasman en Cochabamba, donde se dio la II Conferencia Mundial de los Pueblos sobre el Cambio Climático, con el fin debatir y elaborar las resoluciones que se expondrán en París el próximo mes de diciembre, en la Conferencia de la ONU sobre el Cambio Climático.

Da alegría ver a nuestros presidentes defender la heredad de la generación actual, hacer suyo el mensaje del jefe de la tribu Seatle al presidente de EEUU, que en 1854 ofreciera comprarles sus tierras, a quien escribió: ¿Cómo se puede comprar o vender el cielo o el calor de la tierra?… Si no somos dueños de la frescura del aire y del brillo del agua, ¿cómo es posible comprarlos? Cada pedazo de esta tierra es sagrado para mi pueblo. Eso hicieron en Cochabamba, defender lo que debemos defender según el Jefe Seatle, a la tierra preciosa, porque despreciarla es despreciar a su creador, pues somos parte de la tierra y ella es parte de nosotros, ella es nuestra madre y todo lo que le ocurra nos ocurrirá a nosotros; la tierra no nos pertenece sino que nosotros pertenecemos a ella.

Obedecen al papa Francisco cuando ordena «en nombre de Dios defender a la Madre Tierra» que está siendo saqueada salvajemente y «no permitir que ciertos intereses corporativos se impongan»; nuestro futuro no está en la mano de las corporaciones ni de algunas potencias o élites, sino en la mano de los pueblos, cuyos intereses debemos defender.

Eso hizo Evo Morales al calificar al capitalismo como «el cáncer de la madre Tierra», también cuando dice: «tenemos la obligación de plantearnos políticas, programas y proyectos para erradicar este cáncer salvando a la madre Tierra, la vida y la humanidad» y nos conmina a «acabar con el modelo fallido que es el capitalismo», porque de él deriva «el saqueo de los recursos naturales».

Su idea de crear un Tribunal de Justicia Climática para juzgar a los países que incumplen las leyes de reducciones de emisiones de gases contaminantes fue acogida por el presidente Correa, quien advirtió que sólo «cuando haya justicia ambiental y los grandes contaminadores se responsabilicen del cambio climático, la agresión contra la naturaleza se verá limitada» y se resolverán los graves problemas generados por el cambio climático. Advirtió que «el capitalismo salvaje no va a poder solucionar los problemas ambientales, como tampoco pudo hacerlo el socialismo tradicional, que no disputó la noción de desarrollo con el capitalismo». Asimismo señaló que «todos somos responsables, pero hay algunos más responsables porque están destruyendo el único planeta que tenemos».

No hay que ser partidario suyo para saber que tiene razón. Así es que, manos a la Obra.

Rebelión ha publicado este artículo con el permiso del autor mediante una licencia de Creative Commons, respetando su libertad para publicarlo en otras fuentes.