Ecologistas en Acción ha alertado de la construcción en la localidad conquense de Almonacid del Marquesado (Cuenca) el mayor vertedero privado de residuos industriales.
Con una capacidad de 21,5 millones de metros cúbicos y 53 hectáreas, las dimensiones del macrovertedero son tan espectaculares que su volumen es similar a una mina a cielo abierto. Se encuentra a 4.000 m al Este de la ZEPA «Area Esteparia de la Mancha Norte», a 3.500 m de la ZEPA ampliada de «El Hito» y a unos cientos de metros al sur del área de protección de Parque Arqueológico de Segóbriga.
En pocos días empezarán a llegar residuos industriales (principalmente) de las comunidades limítrofes (Comunidad Valencia y Madrid) y no se descarta que puedan venir también de Cataluña, dado el grupo empresarial que hay detrás. Si bien no hay restricciones en cuanto al origen de los residuos, que podrían llegar de cualquier punto del planeta.
En la autorización ambiental integrada (AII) de febrero de 2016, figura una capacidad de depósitos de 300.000 toneladas de residuos industriales no peligrosos (RINP) cada año, casi un tercio más de todo lo producido en toda Castilla-La Mancha. También en la AII figura una lista de residuos autorizados (código LER) con unos 300 tipos de residuos, entro otros: los residuos de transformación física y química de minerales; lodos de lejías y de destintado de papel; lodos que contienen metales pesados; lodos de pintura, barniz, adhesivos y tintas; residuos de preparación y elaboración de carne y pescado; residuos municipales…
Para justificar este macrovertedero, en el estudio de impacto ambiental (EIA) se menciona la necesidad del vertedero en Cuenca dado que ha crecido en población e industrias en los últimos años. En este estudio, se insiste en que el proyecto generará empleo y crecimiento económico vinculado a este macrovertedero y a la cercanía al ATC de Villar de Cañas. Sin embargo, no se concretan ni justifican los puestos de trabajo, que en todo caso serán escasos, dado que todas las operaciones están mecanizadas y que la gran mayoría de los residuos, simplemente se depositarán en el macrovertedero sin ningún tratamiento previo.
Las afecciones potenciales al entorno son enormes: si las barreras de protección no funcionaran adecuadamente, los efectos a los suelos y las aguas subterráneas, serían desastrosas y en amplias áreas. Tampoco se establecen medidas de protección ante la cercanía del Parque Arqueológico de Segobriga ni se menciona la distancia al perímetro de protección.
Ecologistas en Acción, se ha reunido con técnicos de la Dirección Provincial de Agricultura Medio Ambiente y Desarrollo Rural, para informarse sobre el proyecto y ha presentado un escrito de personación, exigiendo la aplicación estricta de la AAI y la DIA, así como un seguimiento ambiental adecuado y una inspección lo más estricta posible sobre las operaciones a realizar y la naturaleza de los residuos a depositar.
Carlos Villeta, vocal de Ecologistas en Acción de Cuenca ha declarado que «Estamos muy preocupados por lo que está pasando en la provincia de Cuenca. En poco tiempo, pasará a ser conocida como el gran vertedero del centro peninsular. No es casualidad que se pretenda traer a esta provincia este tipo de proyectos, que se suman al intento de ubicar toda la basura nuclear y las decenas de macrogranjas. También nos alarma que tanto la AAI como la DIA de este macrovertedero, estén firmadas por el anterior Viceconsejero de Medio Ambiente (Sergio David González Egido) que tuvo que dimitir al verse investigado por el procedimiento penal abierto, relacionado con el incendio de Chiloeches, es decir, por una presunta gestión fraudulenta de residuos industriales. El promotor justifica este proyecto ante el crecimiento en población y actividad industrial de la provincia de Cuenca. Lo cual, además de ser mentira, es una burla a nuestro grave problema de despoblación, que este proyecto no hará más que agravar«.
En 2011, Ecologistas en Acción y el ayuntamiento de Almonacid del Marquesado, colaboraron a través de la fundación Retorna. Almonacid del Marquesado pasó a ser conocido como «El pueblo más limpio de España» pues fue el primero que instauró el sistema de devolución mediante depósito y retorno para los envases de un solo uso (conocido como SDDR). Ahora Almonacid del Marquesado será conocido por albergar el mayor vertedero privado del Reino de España.