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En el 450º aniversario del fallecimiento de Galileo Galilei (con un recuerdo para Manuel Sacristán) (*IV)

Fuentes: Rebelión

No quiero transmitir estas palabras a los hombres -los políticos, los burócratas, los empresarios- que intentan imponer a las generaciones futuras la difícil tarea de deshacerse de los residuos radiactivos que se han generado y siguen generándose por culpa de una política energética que pone la capacidad de producción y la fortaleza económica por delante […]

No quiero transmitir estas palabras a los hombres -los políticos, los burócratas, los empresarios- que intentan imponer a las generaciones futuras la difícil tarea de deshacerse de los residuos radiactivos que se han generado y siguen generándose por culpa de una política energética que pone la capacidad de producción y la fortaleza económica por delante de todo lo demás. Más bien quiero transmitir estas palabras a las mujeres -las jóvenes madres- que rápidamente se han dado cuenta de los peligros que se les plantean a sus hijos y tratan de encarar el problema de frente. Kenzaburo Oé (2011).

 

En 1964, dos años después de que se presentara sin resultado positivo a las oposiciones para la Cátedra de Lógica de la Universidad de Valencia que se celebraron en Madrid, Sacristán dictó una recordada y elogiada conferencia con el título «Sobre una medición de Galileo» en la facultad de Medicina de la Universidad de Barcelona. Xavier Folch, que asistió, se ha referido a ella en alguna ocasión.

Como fichas anexas, elaboró esquemas sobre 1. Biografía de Galileo. 2. Principales obras de Galileo. 3. Base social. 4. Temas galileanos. 5. Revolución técnica siglo XVII. 6. Revolución científica siglo XVIII. 7. Miscelánea Galileo.

El esquema de su intervención fue el siguiente. El primer apartado tenía este desarrollo:

1. Nacimiento: Pisa, 15 febrero 1564. Muerte: Arcetri, 8 enero 1642.

2. En Galileo se encuentran todos los hilos de la cultura científica moderna. Muchos nacen en él. Los que no nacen en él, se cruzan en él:

2.1. Es el moderno espíritu científico, que por no respetar autoridad no respeta ni la propia: «Mi inquieto cerebro no puede evitar el ir dando vueltas como rueda de molino y con gran gasto de tiempo, porque el último pensamiento que se me ocurre a propósito de alguna novedad me hace mandar al agua todos los descubrimientos anteriores»

2.2. Gran antipatía a Tycho Brahe, cuyo epistolario no recoge: por no ser Galileo un puro empirista conservador.

2.3. Antipatía a Kepler: por no ser Galileo un especulador.

2.4. La noción de «sensata esperanza» lo dice todo

3. Galileo encarna además el drama moral de la ciencia. Por eso Brecht. Esto es acaso lo que más debería ocupar al filósofo. Está de moda no hablar de ello. Y no es nuestro tema. Pero en el IV centenario de su nacimiento no podemos no recordar. Con un documento:

3.1. La abjuración (final proceso: 22 junio 1633)…

3.2. El odio después de muerto. El mausoleo. La carta del cardenal Barberini al Inquisidor de Florencia dos semanas después de la muerte de Galileo: «Su Beatitud, con el parecer de estos mis Eminentísimos señores, ha decidido que vos, con vuestra acostumbrada habilidad, procuréis hacer llegar a oídos del Gran Duque que no está bien construir mausoleos al cadáver de aquel que ha sido penitenciado por el Tribunal de la Santa Inquisición, que ha muerto mientras aún duraba la penitencia, porque se podrían escandalizar los buenos.» (XVIII, 379-380)

El segundo punto de la conferencia seguía este esquema (se anuncia en él el objetivo de la conferencia):

1. Nuestro tema es ver lo que hay detrás de una medición de Galileo. Ver en un concreto ejemplo su modernidad fundamental.

2. Los Diálogos acerca de dos nuevas ciencias sobre la mecánica y el movimiento local.

2.1. Obra máxima. Precauciones de Galileo.

2.2. Impresión: julio 1638. En Venecia: abril 1639.

3. Jornada Primera: en torno a la coherencia de las partes en los sólidos.

3.1. El arsenal de Venecia. Las máquinas grandes y las pequeñas. ¿Por qué no bastan los principios geométricos de las pequeñas?

. Comentario sobre el origen de la cuestión.

3.2. Reducción del problema al de la cohesión de los sólidos.

4. La tesis general: «(…) la coherencia de sus partes parece consistir en… causas que, a mi juicio, se reducen a dos temas; uno de ellos es la tan pregonada repugnancia que la naturaleza tiene a admitir el vacío; por el otro lado, es necesario (si no es suficiente el vacío) introducir algún gluten, sustancia viscosa o cola que una tenazmente las partículas de que esos cuerpos se componen. Hablaré primero del vacío, demostrando con claros experimentos cuál y cuán grande es su poder»

5. La objeción de Sagredo: «Sagredo.-…si,. según tengo entendido, de un solo efecto un sola es la causa, o aunque sean muchas se reducen a una sola, ¿por qué el vacío, que sin duda existe, no basta para explicar todas las resistencias?»

6. La respuesta «experimentalista»:

Salviati.-…si yo lograra haceros ver que ella sola (el vacío) no es suficiente para producir tal efecto, ¿no me concederíais que es necesario introducir alguna cosa?

Sagredo.-…Estaba pensando que si no basta cada año ese millón en oro que viene de España para pagar al ejército, será necesario allegar otros bastimentos…

7. Precisión de la respuesta:

Salviati:… Diré el modo de apartar de los otros el poder del vacío; después, la manera de medirlo.

. «experimentalismo» es mucho: análisis y medición.

El tercero apartado seguía el siguiente desarrollo:

1. Dato.

1.1. Para el análisis pasa al agua, la cual no tiene «gluten». así quedarán aislados los efectos del «horror al vacío».

1.2. La bomba aspirante: «Vi en cierta ocasión una cisterna en la cual se había instalado una bomba con el convencimiento, en realidad equivocado, de que así se podría sacar con menos trabajo una cantidad de agua igual o mayor que con los cangilones ordinarios; y tiene esta bomba su pistón y ánima tan alto, que el agua se hace salir por aspiración y no por impulsión, como sucede con las bombas que tienen el cilindro abajo. Esta, cuando en la cisterna hay agua hasta una determinada altura, la saca en abundancia; pero cuando el agua desciende hasta un nivel determinado, la bomba no funciona ya. Yo creía la primera vez que observé este fenómeno, que el ébolo estaría deteriorado; y cuando busqué al mecánico para que lo compusiera me dijo que no estaba el defecto en la bomba, sino en el agua, que por haber descendido en demasía imposibilitaba su ascenso a tanta altura; y añadió que ni con bombas ni con ninguna otra máquina que eleve el agua por aspiración es posible hacerla subir un cabello más de dieciocho codos; y éste es el límite máximo de su altura, tanto si las bombas son anchas como si son estrechas. He sido tan poco sagaz que, sabiendo que una cuerda o un bastón de madera o una barra de hierro se pueden alargar tanto que por fin se rompen por su propio peso, teniéndolas fijas en alto, no me he hecho cargo de que lo mismo, con mayor facilidad tendrá que suceder con una cuerda o barra de agua. Y ¿qué otra cosa es lo que se aspira con la bomba sino un cilindro de agua, que teniendo su sujeción en la parte superior, alargado más y más, finalmente llega a un término más allá del cual, vencido por su propio peso, que ha llegado a ser extraordinario se rompe cual si fuera una cuerda?»

. Otra vez el artesano (Brecht).

2. Interpretación.

2.1. 18 codos es el limite máximo de altura a que puede sostenerse sin «fractura» una columna de agua de cualquier diámetro.

2.2. Y la resistencia de la columna de agua a la fractura no puede deberse a gluten -que no tiene el agua- sino sólo al «horror al vacío».

3. Principio de la aplicación de esa medición a inferencias: «[…] siempre que pesemos el agua contenida en 18 codos de tubo, ya ancho ya estrecho, obtendremos el valor de la resistencia del vacío en los cilindros de cualquier materia sólida, iguales en grosor al calibre de los tubos propuestos.»

4. La aplicación al experimento con el cobre.

4.1. Sea un hilo de cobre de 1 codo (= 1/8 de onza) que se rompe por el extremo justo al llegar a cargarle 50 libras (de cobre).

4.2. 1 libra = 12 onzas, y el cobre pesa 9 veces más que el agua. 1 codo = c. 60 cm.

4.3. Lo que hoy llamamos carga de ruptura ha sido de 600 onzas (= 4.800/8 de onza).

4.4. La longitud del hilo de ruptura es pues de 4.800 + 1 codos = 4.801.

4.5. Pero la resistencia a la fractura por sólo «horror al vacío» es, como vimos, equivalente al peso de 18 codos de agua del mismo diámetro. O sea, 2 codos de cobre, y no 4.801 codos de cobre.

4.6. Luego la resistencia de la varilla de cobre a la fractura por mero «horror al vacío» es despreciable y lo decisivo es la resistencia del «gluten».

El cuarto apartado desarrollada los puntos siguientes:

1. Puede ser que Galileo haya hecho la medición con el cobre:

1.1. Siendo su codo de unos 60 cm,

1.2. El dato sobre el cobre es admisible hoy: son 2880,6 m y que, corresponden a poco menos de una carga de ruptura de 25, 5 kg / mm

2. Pero lo importante no es eso, sino lo que hay detrás de la medición:

2.1. Por de pronto, el análisis.

2.2. Por análisis generalización abstractiva del problema: el agua no es un sólido. Nuevo planteamiento. El tema se ha hecho técnico.

2.3. Obtención de un número para ulteriores inferencias (cobre).

2.4. La noción cualitativa de «horror al vacío» se va haciendo irrelevante: la medición es operativamente bastante para admitir la existencia de un «gluten» aunque los conceptos sean intransparentes.

3. Actualidad definitiva de esa situación.

3.1. Eficacia operativa.

3.2. Riesgo: tiende a no buscar comprensión por conceptos: positivismo,

3.3. La situación de Galileo debe completarse: él erró subsiguientemente por el mantenimiento del concepto de «horror al vacío». Torricelli aclaró con un concepto más internamente cuantitativo: el de presión atmosférica. Esto lleva a

4. Inducción aristotélica e inducción galileana o moderna.

4.1. Lo esencial no es completa-incompleta, sino buscadora de «esencias sustanciales» o buscadora de relaciones cuantificables.

4.2. El número es expresión de una relación entre los conceptos, los datos, los fenómenos.

5. Para salir del riesgo positivista

5.1. La comprensión del fenómeno ha sido llevada a un nivel de relaciones, de acciones y reacciones, no de esencias sustanciales fijas.

5.2. Así se abre camino un nuevo modo de comprender que se basa en que cada fenómeno se constituye por la acción de los demás. El concepto de sustancia no es ya lo primero, ni el de sus virtudes sino el de relación -«inerte» (estructura) o activa (función y proceso social).

Dialéctica: reconstrucción de lo individual en los procesos, contra cosificación. Programa sin límites, pues programa no es realización. Dogmatismo, Galileo.

 

Las fichas anexas de la conferencia.

La primera era biográfica. La segunda era sobre «Temas galileanos»: La matematización. La mecánica:

«Esta ciencia «nueva» ve la luz en Galileo y comporta esencialmente junto con las leyes de la caída de los graves, la solución del problema del movimiento de un proyectil sin resistencia alguna del medio». Las manchas solares y las montañas de la luna. La dinámica. En 1604, Carta a Paolo Sarpi, la ley de caída libre. Ya desde el De motu (1589-91?) afirmación del vacío para esa temática. En lo de los proyectiles, inercia. La anulación de la distinción entre movimiento natural y movimiento violento. La astronomía: observaciones de la nova de 1604 (mutabilidad del cielo); 1609: reconstrucción del anteojo: Nuncio (montañas de la luna, la tierra brilla, estrellas -> la vía Láctea es un conjunto de estrellas; los satélites de Júpiter, contra objeción anti-copernicana; las fases de Venus); la cara única de la Luna; 1610 y 1612: Observación de las manchas del Sol. Carta a F. Cesi

La tercera era sobre la Revolución técnica y científica siglo XVII.

A. Técnica: durante el siglo se inventan el sextante, el reloj de balancín, el muelle en espiral, que habrían sido útiles a Galileo. B. Científica: -Matemáticas: álgebra, teoría de los números, cálculo de probabilidades, geometría proyectiva, cálculo infinitesimal. Física: dinámica (G), mecánica celeste, óptica, magnetismo. Lentes, microscopio. Química. Biología: circulación mayor; fisiología vegetal; anatomía microscópica. Medicina. Nacimiento de la geología.

Finalmente, «Miscelánea Galileo»:

1. Decir que lo capital de Galileo es la mecánica. 2. En 1641, un año antes de su muerte, Galileo tiene, al parecer, la intención de aplicar un péndulo para regular un reloj. Me sirve para el rasgo b). 3. Que en resistencia de materiales es poco afortunado. Pero, en cambio, da mi ejemplo. 4. 1610: el dux de Venecia, invitado por Galileo, observa los satélites de Júpiter desde lo alto del Campanile. 5. Correspondencia con Kepler, lente. 6. Carta a Benedetto Caselli, a propósito de las fases de Venus. «¡Qué hermosas consecuencias facilitan mis observaciones! Pero me hacéis reír al suponer que disipáis todas las nubes y pondrán fin a todas las discusiones. La demostración ha conseguido ya hace tiempo su última evidencia. Nuestros adversarios estaban ya convencidos si pudieran serlo: pero quieren engañarse a sí mismos». 7. Carta F. Cesi sobre las manchas del sol y las montañas de la Luna: «Creo que estas novedades serán el funeral, o más bien el final y el juicio último, de la falsa filosofía; han aparecido ya signos en la Luna y el Sol. Y espero oír sobre este punto grandes cosas moderadas por los peripatéticos para mantener la inmutabilidad de los cielos; no se ya cómo podrán salvarla y mantenerla».

 

Sacristán impartió otra conferencia, esta vez el 13 de febrero de 1967 en la Residencia (o Escuela) San Antón con el título «Bruno y Galileo: creer y saber». Existen dos esquemas muy similares de su intervención. He incorporado los textos seleccionados por él para su conferencia.

Damos cuenta de ella en la próxima entrega.

[*] La primera de esta aproximación puede verse en http://www.rebelion.org/noticia.php?id=181079 . La segunda en http://www.rebelion.org/noticia.php?id=181407 La tercera en http://www.rebelion.org/noticia.php?id=181700

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