La Jornada Declarada de Interés Municipal: «Agroquímicos concientización, uso indebido de agroquímicos y sus consecuencias» que tuvo lugar en la Filial Basavilbasso el sábado 18 de abril, dejó en claro el compromiso y la preocupación desde la Asociación Gremial del Magisterio de Entre Ríos (AGMER) ante los casos recurrentes de escuelas rurales fumigadas en toda la […]
La Jornada Declarada de Interés Municipal: «Agroquímicos concientización, uso indebido de agroquímicos y sus consecuencias» que tuvo lugar en la Filial Basavilbasso el sábado 18 de abril, dejó en claro el compromiso y la preocupación desde la Asociación Gremial del Magisterio de Entre Ríos (AGMER) ante los casos recurrentes de escuelas rurales fumigadas en toda la provincia de Entre Ríos. Un problema que se repite, aunque no todos tomen estado público, y donde está en juego la salud de los docentes y los alumnos a su cargo.
La apertura de la charla a cargo de la Secretaria General de la Filial Yolanda Taffarel, ante un público y profesionales locales y de ciudades vecinas. Se contó con la presencia de distintos directivos y docentes de AGMER Filial Basabilvaso, Seccional Uruguay, entre ellos: Margarita Rodriguez, Leticia Barreto, Walter Gatti, Gladys Miño, Ruben Moscatelli, Gustavo Blanc, Lorena Molina y Mariela Leiva, quien junto a sus alumnos, fué víctima de la fumigación aérea en la escuela N° 44 de Santa Rita que les produjo varios efectos en la salud.
También estuvo presente otra víctima de los agrotóxicos, Fabián Tomasi, y representantes de Paren de Fumigar las Escuelas, fundado en la provincia de Entre Ríos, pionera en el país en el tratamiento y difusión de la temática, contando como único apoyo el de AGMER.
Los disertantes:
El Dr Roberto Lescano, médico de Basalbilvaso comprometido en el tema desde hace años, muchos de los afectados, especialmente los de bajos recursos, han pasado por su consultorio y ha denunciado muchos casos judicialmente. Su exposición acompañada con imágenes de sus pacientes, con distintas patologías y afecciones, son especialmente niños. El médico criticó « la categorización del Senasa, tanto la anterior como la actual, que solo informan a la población dos tipos de afecciones, la inhalatoria y la irritativa cuando deberían ser cuatro, (también oral y dermal) con sus respectivos rangos y dosis. De esta manera – manifestó- el RoundUp (Clase IV), en una clasificación aparece como Clase III, y en la ocular es Clase II. El RoundUp Max, el granulado y el Ultra Max son clase II, porque la irritación ocular son mayores a siete días y que pueden llevar a la ceguera, agregó. El Senasa nunca lo reclasificó, en junio de 2014 tenía que entrar en vigencia la clasificación según la OMS de 2009. Si alguno de Uds encuentra un glifosato con la banda azul me cuenta. Eso es Incumplimiento de Deberes de Funcionario Público», afirmó.
Por su parte la Dra Graciela Vizcay Gomez desarrolló el tema del glifosato antes y después de la nueva categorización desde la OMS, como «2A posible cancerígeno»,llamó obsoleta a la Ley provincial N°6599, comparándola con la misma falencia que la de la provincia de Buenos Aires: «no contemplan las distancias de las fumigaciones terrestres». Asimismo citó las incongruencias de las Resoluciones locales (de Basabilvaso), acerca de las distancias para fumigación terrestres, respecto a las cercanías a cursos de agua, criaderos de pollos y caseríos. Manifestó que siempre es aplicable la que beneficia al ser humano, por lo tanto la distancia vigente debe tomarse como protección 100 metros y no 50 mts -dijo – refiriéndose a las escuelas rurales. Criticó también las falencias del expediente iniciado luego de la fumigación de la Escuela N° 44 «República Argentina», el pasado 4 de diciembre de 2014. La falta de una carátula sobre el flagrante delito cometido, y dijo -«que era una vergüenza el informe de los análisis de sangre realizados por la División Química Forense de la policía local cuyo resultado fué : que el laboratorio no cuenta con la metodología específica para determinar la presencia de los herbicidas glifosato, paraquat y diquat».
Ambos profesionales coincidieron en las erradas medidas ordenadas por la agente fiscal en marzo pasado, a cargo del caso de la Escuela N°44, al oficiar al INTA la consulta, sobre si se cumplió la normativa vigente al momento de los hechos en la escuela fumigada, ya que no es el INTA el órgano de aplicación de la Ley de Plaguicidas N°6.599. –«Eso demuestra una vez más, que los jueces no tienen idea sobre los delitos cometidos contra el medio ambiente, o es connivencia o es ignorancia, sumado a la falta de Fiscalías Medioambientales como existen en Brasil», agregó la abogada Vizcay Gomez.
Se espera qué acciones tomará la profesional, ya que filmó varias localidades lindantes y el material lo deriva, en la mayoría de los casos, a la Unidad Fiscal de Delitos Ambientales (UFIMA) . Asimismo el Dr Lescano está trabajando sobre una denuncia por delito manifiesto, contra un ingeniero agrónomo, cuyos colegios jamás sancionan, ni siquiera administrativamente, a sus colegiados, pese a los recurrentes delitos y faltas de ética en la que incurren a lo largo y a lo ancho de todo el país.
Los docentes entrerrianos demuestran con creces día a día su vocación de servicio, sobrepasando ampliamente los deberes plasmados en el art.67 inciso e) de la Ley de Educación Nacional N° 26.061 cuya responsabilidad es «proteger y garantizar los derechos de los/as niños/as y adolescentes que se encuentren bajo su responsabilidad». Queda recordarle al Ministerio provincial que los nuclea, que es su deber «disponer de condiciones laborales dignas, salubres y seguras«tal lo establece laLey Provincial N°9890 en su artículo 130º inciso j).
No solo dar el presente ante las cámaras de los medios cuando es demasiado tarde, sin prever siquiera que no vuelva a ocurrir una exposición a los venenos, con la misma impunidad que sucede a lo largo y a lo ancho de todo nuestro país. Desde el escritorio del Ministerio de Educación, los otrora docentes olvidan muchas veces, cómo comenzó su carrera, las aulas, y las caritas de los niños que tenían a su cargo. Olvidaron el vínculo entre maestro y alumno, que es único, firmando resoluciones u omitiendo tratar los temas que si importan, como lo es la salud de todos quienes forman parte de cada escuela, de cada distrito escolar.
«Educar la mente sin educar el corazón no es educar en absoluto» (Aristóteles)