Los shompen viven en el interior selvático de la isla de Gran Nicobar. No sobrevivirán a la destrucción de su tierra natal.
Un grupo de 39 especialistas internacionales en genocidio han escrito al Gobierno de la India para advertirle de que sus planes de convertir la isla de un pueblo indígena no contactado en un megapuerto y una ciudad supondría su exterminio.
En la isla de Gran Nicobar, en el océano Índico, viven unos 300 cazadores-recolectores shompen, de los que dos tercios no han sido contactados. Son uno de los pueblos indígenas más aislados de la Tierra y viven en las densas selvas tropicales del interior de la isla.
El plan gubernamental para Gran Nicobar, que cuenta con una inversión de 9.000 millones de dólares, incluye la construcción de un megapuerto, una nueva ciudad, un aeropuerto internacional, una central eléctrica, una base militar, un parque industrial y prevé la llegada de 650.000 colonos, lo que supone un aumento de población de casi el 8.000%.
“Si el proyecto sigue adelante, aunque sea de forma limitada, creemos que supondrá una sentencia de muerte para los shompen, equivalente a un crimen internacional de genocidio”, afirman los expertos, procedentes de instituciones académicas de trece países, entre los que hay historiadores, sociólogos y el expresidente de la Asociación Internacional de Investigadores sobre Genocidio.
Los expertos afirman que “el simple contacto entre los shompen, que tienen poca o ninguna inmunidad frente a enfermedades infecciosas del exterior, y quienes vengan de otros lugares provocará con toda seguridad un precipitado colapso demográfico. Podría desembocar en la muerte masiva de todo el pueblo indígena de los shompen. La única forma de evitar su aniquilación es que se abandone el proyecto”.
Survival International tiene en marcha una campaña de acción para que se abandone el proyecto y se reconozcan los derechos de propiedad territorial de los shompen sobre sus tierras ancestrales. Hasta la fecha, más de 7.000 personas han escrito al Gobierno apoyando esta petición.
“Esta es una dura advertencia que el Gobierno indio debe tener en cuenta: seguir adelante con el proyecto en Gran Nicobar destruirá la isla-hogar de los shompen y conllevará su genocidio”, declaró Caroline Pearce, directora de Survival International.