La organización de defensa de derechos humanos Human Rights Watch pidió este jueves al Gobierno español que clausure cuatro centros de emergencia en las Islas Canarias destinados a recibir niños no acompañados que llegaron clandestinamente de África para evitarles violencia y malos tratos. El Gobierno creó estos refugios, que pueden albergar a unos 500 menores […]
La organización de defensa de derechos humanos Human Rights Watch pidió este jueves al Gobierno español que clausure cuatro centros de emergencia en las Islas Canarias destinados a recibir niños no acompañados que llegaron clandestinamente de África para evitarles violencia y malos tratos.
El Gobierno creó estos refugios, que pueden albergar a unos 500 menores de edad, después de que más de 900 niños inmigrantes no acompañados, en su mayor parte jóvenes procedentes de Senegal y Marruecos, llegaran al archipiélago en embarcaciones improvisadas durante el último año.
Human Rights Watch (HRW) afirmó en un informe de 115 páginas difundido este jueves que después de realizar «viajes peligrosos y a menudo traumáticos», los niños «permanecen en estos centros durante períodos indefinidos, a menudo en condiciones de hacinamiento y problemáticas».
Niños que se encontraban en dichos centros declararon a esta organización, cuya sede está en Nueva York, que habían sido golpeados por el personal, abandonados sin protección alguna a la violencia de los otros chicos, que no tenían acceso alguno a la educación pública, y que disponían de muy pocas oportunidades de esparcimiento.
«Estos niños deben ser protegidos por las autoridades españolas, no abandonados para sufrir golpizas y malos tratos», protestó Simone Troller, la investigadora de HRW sobre los derechos infantiles para Europa.
Esta organización de defensa de los derechos humanos pidió a las autoridades de las Islas Canarias y al Gobierno «que inmediatamente conciban y apliquen un plan para cerrar los refugios de emergencia y trasladen a los niños a instalaciones de atención alternativas».
Las autoridades deben investigar los informes sobre malos tratos, castigar a todos los culpables, y suministrar a los niños una información completa sobre sus derechos a residencia, permiso de trabajo, educación y atención médica, afirma dicho informe.
En los últimos años, las Islas Canarias atrajeron a numerosos inmigrantes subsaharianos, pues constituyen el territorio europeo más cercano de África.
Unos 31.200 inmigrantes llegaron a este archipiélago el año pasado, más del triple del anterior récord anual, colocando a las autoridades en una situación muy difícil.