Instituciones franquistas, impuestas, sin que nadie las haya elegido. Instituciones franquistas que no pueden ser comentadas, criticadas en su procedencia, su proceder y su carácter en la Constitución. Instituciones franquistas con franquistas incrustados en estamentos que crean redes de poder y juzgan y dan sentencias de carácter franquista. Institución franquista, grupo de poder […]
Instituciones franquistas, impuestas, sin que nadie las haya elegido. Instituciones franquistas que no pueden ser comentadas, criticadas en su procedencia, su proceder y su carácter en la Constitución.
Instituciones franquistas con franquistas incrustados en estamentos que crean redes de poder y juzgan y dan sentencias de carácter franquista.
Institución franquista, grupo de poder franquista, como la Iglesia Católica que se atribuye derechos exclusivos situándose por encima de los derechos de la población: no atenerse a las leyes educativas que promueven la igualdad, exigir y coger dinero de la caja del Estado, no pagar impuestos, exigir que su creencia sea superior a la democracia, no respetar las leyes de igualdad entre los géneros, defender el franquismo, difundir la homofobia, oponerse a los descubrimientos médicos, … los guían siglos y siglos de injusticias que se amontonan bajo su nombre. La última encuesta conocida sobre el aprecio de los españoles a estamentos sociales y profesionales, encuesta nada sospechosa de tendencia izquierdista pues está realizada por una organización que se dedica a la especulación, una organización de derechas, como es el Banco de Bilbao, da como resultado el que la Iglesia Católica es la institución más desprestigiada, menos prestigiada, menos apreciada, entre, por, para los españoles.
Grupo de poder franquista como los parlamentarios que defienden el franquismo, que defienden el Estado Feudal y Absolutista, destruyendo los bienes de carácter social para privatizarlos, para acumular poder y por medio de este hacer campaña contra los diferentes derechos sociales llevando el abandono a los sectores en dificultades y promoviendo el individualismo y la competitividad por encima de la solidaridad, por encima de la igualdad ciudadana, haciendo campañas contra las autonomías con proyectos de igualdad federal, …
Grupos de poder franquista en prensa, radio y televisión, empresarios que emplean gente mercenaria, prostituida intelectualmente, para alimentar el franquismo de modo encubierto, haciendo que sus formas e ideas emerjan con barniz de apariencia democrático, difundiéndolas en una atmósfera que imponen de decadencia y bajeza democrática.
Instituciones franquistas. Instituciones franquistas. Instituciones franquistas.
Los censores saltan sobre una publicación satírica. La Iglesia, a lo largo de toda su existencia, persiguió la risa en todas sus formas, el franquismo prohibió los carnavales: que el débil no pudiese quitarse ni un instante por medio de la burla, la ironía, o cualquier otra forma, el peso del poder. Las personas que prohíben hoy la caricatura de los poderosos, de los que consideran intocables, quienes tienen tanto poder ¿por qué no declaran cuál es su idea de la sociedad? ¿o con estos mandatos es suficiente para que sepamos qué sociedad quieren, y, por tanto, cómo piensan y cómo son?, ¿por qué no lo dicen desde el primer momento?.
Ustedes saben que el concepto «persona», per-sona, viene del latín, que antes lo emplearon los etruscos y los etruscos lo cogieron de los griegos, y quiere decir «a través de la máscara». Per-sona, decir algo, hacer algo a través de una máscara, en este caso una máscara democrática, buscando la manera de que no se vea cómo piensan, que no se sepa tal y como son. Los prohibidores, defensores de los poderosos, de los que viven intocables, hablan a través de una máscara que los presentan como demócratas.
Los censores saltan sobre otra publicación, el semanario «La Realidad», de Santander, y lo cierran. Qué ha hecho: denunciar actividades condenables llevadas a cabo por per-sonalidades, qué actividades: negocios poco claros. No ha trascendido, pero puede leer la noticia en www.interpueblos.org/noticias. La censura persigue a unos para defender a otros. Cuál es la asignatura para la ciudadanía que nos queda por aprobar: la denuncia de quienes ocultándose tras una máscara democrática protegen lo antidemocrático, educación democrática, educación ética, educación en valores de igualdad y justicia social, pilares antifranquistas. No olvidemos: saber es recordar.