Entrevistar a dos grandes historiadores siempre es un privilegio. Si estos, además, son miembros de Espai Marx e impulsores, entre otros compañeros y amigos, de una página republicana-democrática que pinta mejor que bien el privilegio se convierte en un gran honor. *** Primero lo esencial: felicidades, una gran idea. Por ahí quería empezar. Luego, algo […]
Entrevistar a dos grandes historiadores siempre es un privilegio. Si estos, además, son miembros de Espai Marx e impulsores, entre otros compañeros y amigos, de una página republicana-democrática que pinta mejor que bien el privilegio se convierte en un gran honor.
***
Primero lo esencial: felicidades, una gran idea. Por ahí quería empezar. Luego, algo no menos esencial y tan importante. ¿Qué página republicana es esa de la que se habla en corrillos comprometidos? ¿Por qué la habéis levantado?
La página surge como una iniciativa más de las muchas que se están produciendo actualmente en nuestro país para intentar debatir, reflexionar y contribuir a dar una respuesta a la profunda crisis, que no es sólo económica sino también claramente política. Esa crisis ha desatado un cuestionamiento del sistema político construido durante la Transición, y por lo tanto crece la necesidad de reflexionar sobre un nuevo proceso constituyente como las mismas páginas de Rebelión no muestran con frecuencia.
¿Quiénes pueden o podrán escribir en ella? ¿En qué idiomas?
Todos aquellos interesados en participar en el debate que intentamos promover.
En todas las lenguas oficiales peninsulares. Sin embargo, en aras de la solidaridad internacional, aceptaríamos otras lenguas siempre y cuando dispongamos de la posibilidad de traducirlas a alguna de aquellas lenguas.
¿Cómo se pueden incorporar los materiales en la página? ¿En qué materiales pensáis?
Pensamos en materiales que aborden la cuestión de la construcción republicana de los pueblos y naciones de España desde todos los ángulos imaginables, ya que sólo desde una amplia transversalidad podremos enriquecernos y enriquecer un debate que también puede ser propositivo, dependiendo de la coyuntura política. Por lo tanto, y sin pretensión de exhaustividad, los aspectos de la economía, la sociología, la ciencia política, la geografía y por supuesto la reflexión histórica y filosófica, tanto desde la perspectiva del estudio especializado como desde el ángulo ensayístico.
¿Quiénes sois los promotores de esta interesante idea? ¿Recibís alguna ayuda institucional?
No recibimos ninguna ayuda institucional. Formamos parte de las múltiples iniciativas desde abajo que se están produciendo felizmente en la actualidad.
Hablando en serio, tocando realidad, con los mínimos idealismos posibles. Con la que está cayendo, ¿pensáis que tal como está el patio es posible una alternativa republicana en la España de hoy?
No sólo posible sino necesaria, imprescindible. La crisis del régimen político que sucede a la dictadura franquista, implica no sólo la del bipartidismo de hecho que caracterizó a la Transición, sino también de la forma monárquica que preside al estado español. Es una crisis de legitimidad y representatividad, que la movilización popular actual contra las medidas del gobierno del PP en toda España, y el de CiU, en el caso de Cataluña, señala en cada una de ellas, y que las diversas encuestas muestran como una tendencia sostenida, en la cual, ambos partidos PP y PSOE pierden votantes en una tendencia que no muestra inflexión alguna. La ciudadanía advierte que el sistema político actual es incapaz de superar la crisis, ya que la acción de los dos grandes partidos ha consistido desde el comienzo de la misma en satisfacer los intereses más concentrados del capital multinacional y financiero, una crisis que en realidad ha sido vista por la elites dominantes como una oportunidad para eliminar conquistas sociales fundamentales para el bienestar de las clases subalternas. En esta coyuntura, la ciudadanía progresivamente visualiza que la institución monárquica es inseparable del sistema que actualmente intenta gestionar la crisis. No sólo por los escándalos de corrupción que actualmente la salpican, sino también por su naturaleza básicamente antidemocrática.
Para vosotros, ¿qué significa ser republicano hoy?
En primer lugar, lo que siempre significó: que nadie que detente poder no lo sea por otra razón que su elección democrática y finita. Además, ser hoy republicano significa defender un sistema político en el cual sus ciudadanos no sólo son depositarios de la soberanía sino que la ejercen permanentemente. Interviniendo cada uno de ellos equipotencialmente en los procesos de elaboración y toma de decisiones, en los ámbitos de interés social, sobre todos los aspectos relacionados con la sociedad de la que forman parte. Cuya ejecución es encargada a unos representantes obligados a dar cuenta de manera regular de sus acciones a sus representados, y revocables en cualquier momento por una mayoría de los miembros de la asamblea ciudadana. Resumiendo, hoy en día ser republicano es declararse partidario de la democracia, así sin más aditamentos.
La última: ¿pensáis que es un posible algún marco político que permita una convivencia razonable de los diversos pueblos de Sefarad?
Identificar los marcos políticos que permitan esa convivencia razonable forman parte de los objetivos del debate en esta página. Decidir ahora cuál es el más adecuado es, al menos, condicionar el mismo. Sólo se puede afirmar que entre los promotores de esta página predominan quienes se manifiestan partidarios de una reorganización federal o confederal de los pueblos que integran el estado español, siempre en un marco republicano.
¿Queréis añadir algo más?
Invitar a todos a participar en el blog http://www.constituirrepublica.org/
Gracias, aceptamos el reto. Allí nos volvemos a ver.
Salvador López Arnal es miembro del Frente Cívico Somos Mayoría y del CEMS (Centre d’Estudis sobre els Movimients Socials de la Universitat Pompeu Fabra de Barcelona; director Jordi Mir Garcia)
Rebelión ha publicado este artículo con el permiso del autor mediante una licencia de Creative Commons, respetando su libertad para publicarlo en otras fuentes.