Ayer se presentó en el Consejo Nacional del Clima la Estrategia española de cambio climático y energía limpia. WWF/Adena considera que dicha estrategia es demasiado general y no garantiza que se reduzcan las emisiones en España al nivel necesario para cumplir con Kioto ni prepara para reducciones mucho más ambiciosas que será necesario asumir después […]
Ayer se presentó en el Consejo Nacional del Clima la Estrategia española de cambio climático y energía limpia. WWF/Adena considera que dicha estrategia es demasiado general y no garantiza que se reduzcan las emisiones en España al nivel necesario para cumplir con Kioto ni prepara para reducciones mucho más ambiciosas que será necesario asumir después de Kioto.
La estrategia no compromete de manera clara a ministerios como el de Industria, Fomento y Economía y Hacienda, cuyas políticas tienen incidencia en las emisiones. Por tanto, WWF/Adena pide al gobierno que a la mayor brevedad se adjunte al presente documento otro más detallado donde se cuantifiquen objetivos de reducción por sectores para transporte, residencial y comercial, agrario y residuos, que nos permitan evaluar en qué medida cada uno de ellos contribuirá a cumplir con el Protocolo de Kioto. Además, es imprescindible contar con un calendario que especifique cuándo se van a aplicar las medidas propuestas y conocer el presupuesto que se va a dedicar a impulsarlas.
Por otra parte, la estrategia confía excesivamente en las medidas que se aplicarán fuera de nuestro país (mecanismos de desarrollo limpio, comercio de emisiones, cooperación internacional), y en otras no permanentes como sumideros de carbono o como almacenamiento de CO2.
El gobierno tampoco ha contemplado el periodo posterior a Kioto. Recordemos que el objetivo del Protocolo de Kioto es la disminución del 5,2% de las emisiones de los países desarrollados para el año 2012. Los científicos y la Comisión Europea están de acuerdo en que serán necesarias reducciones del 30% para los países desarrollados en 2020, y del 80% en 2050 para que la temperatura global no supere el umbral de aumento de 2ºC, considerado crucial para evitar daños catastróficos en la ecología, la economía y la sociedad. Por tanto, para después de 2012 España tendrá que asumir un compromiso mucho más ambicioso y la Estrategia actual no lo tiene en cuenta.
Finalmente, resulta destacable la falta de participación que se ha concedido a los actores sociales en la redacción de esta estrategia. WWF/Adena espera que se tengan en cuenta sus recomendaciones para mejorar el documento, que si bien tiene la voluntad de establecer medidas adicionales a las ya existentes, no le parece suficiente para garantizar la respuesta necesaria ante la urgencia y gravedad del problema.
Mar Asunción, responsable del Programa de Cambio Climático de WWF/Adena, señala que: «La estrategia presentada hoy adolece de las mismas deficiencias que la presentada por el gobierno anterior en 2004: falta de objetivos claros por sectores, cuantificados y temporalizados; falta de un plan de acción y de presupuesto; el plan de seguimiento que contiene es poco concreto y no posibilita medir si los resultados que se van logrando son suficientes para cumplir con Kioto y prepararnos para reducciones mucho mas ambiciosas que será necesario asumir después de Kioto».