«Le pedimos a los ciudadanos que se rebelen, que resistan, que desobedezcan. Cuando las leyes son injustas, la desobediencia se convierte en un imperativo». Ana Marco, coordinadora de la cooperativa sin ánimo de lucro comercializadora de energía limpia Som Energia, ha expresado así esta mañana su rechazo a la política energética del Gobierno, en una rueda […]
«Le pedimos a los ciudadanos que se rebelen, que resistan, que desobedezcan. Cuando las leyes son injustas, la desobediencia se convierte en un imperativo». Ana Marco, coordinadora de la cooperativa sin ánimo de lucro comercializadora de energía limpia Som Energia, ha expresado así esta mañana su rechazo a la política energética del Gobierno, en una rueda de prensa convocada por varias cooperativas y organizaciones ciudadanas que apuestan por un nuevo modelo energético más sostenible y respetuoso con el medio ambiente.
A la reforma energética aprobada en Consejo de Ministros el 12 de julio por la que se suprimían las primas a las renovables para sustituirlas por un mecanismo que «garantiza una rentabilidad ‘razonable’, entre otras medidas, se ha sumado que el pasado jueves, el Ejecutivo remitió a la Comisión Nacional de Energía (CNE) el esperado borrador de autoconsumo. Un texto que, según ha explicado Cote Romero, directora de la empresa social Ecooo y coordinadora de la Plataforma por un Nuevo Modelo Energético, «ignora la realidad del cambio climático y la escasez de recursos fósiles».
Con 16 meses de retraso, el borrador ha llegado sin incluir en ningún momento la palabra «balance neto», ha denunciado Romero, que es el procedimiento por el cual un ciudadano puede producir en su hogar la energía que necesita y utilizar la red como batería para verter la que sobra.
Para la directora de Ecooo, este borrador «responde a las exigencias de UNESA (Asociación Española de la Industria Eléctrica), cerrando la puerta la futuro de las renovables y el autoconsumo energético. La CNE tiene 15 días para valorar el informe, aunque la resolución es simplemente informativa, no vinculante.
Ante lo que definen como envites del Gobierno de Mariano Rajoy al sector de las energías verdes , estas cooperativas de energía verde y organizaciones ciudadanas han decidido crear un frente común, que han hecho público hoy durante la rueda de prensa.
A la pregunta de si los pequeños productores van a dejar de generar y comercializar energía al margen de la patronal eléctrica, Marco, la representante de Som Energía, ha negado enérgicamente con la cabeza. Y esa es la imagen que han querido transmitir esta mañana las organizaciones convocantes. El objetivo era mandar un mensaje conjunto: «los ciudadanos tenemos el poder del consumo, o del no consumo. No nos vamos a rendir».
Las cooperativas de energía verde Som Energia, Zencer y Goiener y la comercializadora Enerplus han sumado fuerzas con las organizaciones que fomentan las inversiones limpias entre la ciudadanía, como Viure de l’aire y Ecooo, y Fundación Terra, una organización decana en defensa de un modelo energético limpio y democrático. Y es que, como ellos mismos han confesado, el difícil momento por el que pasa el sector requiere la unión de la ciudadanía.
«Sabíamos que el Gobierno estaba preparando la reforma energética y que no iba a ser favorable para las renovables, pero es mucho peor de lo que esperábamos», ha deplorado Cote Romero.
La prometida reforma energética «apunta directamente a los ciudadanos», según las cooperativas. Y por esto estas organizaciones pretenden trabajar en red para defender el derecho a una energía limpia, eficiente y respetuosa basada en el interés general.
Cooperativas energéticas productoras y comercializadoras de energías se están haciendo un hueco a lo largo de la geografía española. Prueba de ello son la vasca Goiener, la cántabra Enerplus, Zencer que opera en Andalucía, Nos Energia desde Galicia o la valenciana Nercoop.
«Todas estas cooperativas deberían estar compitiendo siguiendo la lógica del sistema, pero aquí están compartiendo proyectos por el interés común. Lo que el Gobierno busca es expulsar a la competencia del mercado», ha aseverado Romero. Las 4.000 cooperativas comercializadoras de energía limpia alemanas quedan todavía lejos. Jorge Caleya, de Enerplus, ha criticado «lo absurdo que es que Alemania sea un ejemplo en materia económica pero no en materia energética».
«¿Merece la pena que sigamos privatizando beneficios y socializando pérdidas también en materia energética? Sigue siendo hipotecar el futuro y nosotros queremos una nueva cultura energética», ha explicado Ángela Iglesias, de cooperativa vasca Goiener.
Estas organizaciones, que se definen como «la vanguardia del hacer en el camino hacia un nuevo modelo energético», preparan recursos al paquete legal de la reforma energética. Por ejemplo, la Plataforma por un Nuevo Modelo Energético se reunió la semana pasada con representantes de cuatro direcciones generales de la Comisión Europea a instancias del comisario europeo de Energia Günther Oettinger, quien, según la Plataforma, mostró «especial preocupación por el modelo retributivo» propuesto por el Gobierno.
Pagar por tu propia energía
«Imaginemos que tienes un huerto con tomates. Lo que pretende el Gobierno es que en vez de llevarte tu tomate a la boca, lo lleves a la tienda, pagues por él y vuelvas a tu casa. Eso es el ‘peaje de respaldo'», ha explicado Pep Puig, representante de Viure de l’aire. Esta tasa es una de las novedades que recoge el borrador presentado a la CNE.
Este ‘peaje de respaldo’ podría suponer en la práctica que el pequeño productor de energía que tiene una placa fotovoltaica instalada en su casa tenga que pagar unos costes fijos altos independientemente de la energía que consuma y/o produzca. Caleya ha asegurado que el incremento que el pequeño productor va a tener que pagar por consumir su propia energía puede suponer incluso «un 50% más que si consumiese energía convencional».
«El autoconsumo supone que el sistema eléctrico se ahorra los costes de transporte de la energía, los de pérdida en ese traslado, los de comercialización… Si éste fuese un país civilizado, no es que el Gobierno nos tendría que ayudar económicamente en la producción energética, sino que la empresa eléctrica nos tendría que pagar por todos los costes que ahorramos al sistema», ha explicado Puig. Además, ha añadido que el balance neto, que es todavía muy desconocido en España, está existosamente implantado en países como EEUU, Holanda o Alemania. «Es hacia donde apuntan todas la mayoría de políticas energéticas europeas», ha asegurado.
Pero los productores de energía limpia no sabrán antes de octubre en qué aguas navegan. «Creemos que hasta octubre como mínimo el Secretario de Estado de Energía, Alberto Nadal, no dirá cómo se van a hacer los cálculos para dar con esa tasa», ha explicado Romero.
Según Puig, «estamos asistiendo a un atraco de las empresas eléctricas y el Gobierno, propio de las mafias. Están instaurando un ‘electro santa Inquisición’. Al Gobierno no se le pide que subvencione el autoconsumo, ni que ponga dinero. Aniquilar el autoconsumo no tiene ninguna justificación relacionada con argumentos económicos».
Fuente: http://www.lamarea.com/2013/07/23/renovables/