Dpa/AFP/Archivos / Jens Kalaene. Una cría de tiburón sedoso de cuatro semanas de edad nada en un tanque de un acuario decorado con motivos navideños, el 5 de diciembre de 2017 en Berlín Las islas Samoa anunciaron la creación en sus aguas de un santuario para tiburones, al igual que otros numerosos territorios del océano […]
Dpa/AFP/Archivos / Jens Kalaene. Una cría de tiburón sedoso de cuatro semanas de edad nada en un tanque de un acuario decorado con motivos navideños, el 5 de diciembre de 2017 en Berlín
Las islas Samoa anunciaron la creación en sus aguas de un santuario para tiburones, al igual que otros numerosos territorios del océano Pacífico que tratan de proteger al animal marino.
«No podemos quedarnos de brazos cruzados cuando la demanda de productos procedentes de los tiburones está privando a las generaciones futuras de esas especies de gran valor en los ámbitos cultural, ecológico y económico», declaró este semana el primer ministro, Tuilaepa Sailele, al diario Samoa Observer.
La superficie terrestre de Samoa es reducida, pero las aguas del archipiélago se extienden sobre 129.000 km2, el equivalente del territorio de Inglaterra.
El primer santuario para tiburones del mundo se creó en 2009 en el archipiélago de Palaos, en el Pacífico, y tuvo como consecuencia la prohibición de su pesca en toda la zona económica exclusiva de ese territorio, esto es, un espacio de 630.000 kilómetros cuadrados.
Las Kiribati, las islas Cook y Nueva Zelanda tomaron medidas similares.
Según la oenegé World Wildlife Fund, más de 70 millones de tiburones son cazados cada año para comercializar sus aletas y numerosas especies de escualos están amenazadas.
Fuente: AFP