Las redes se concentran en nueve ciudades
Las redes de prostitución, pornografía y turismo sexual infantil se concentran principalmente en Tijuana, Ciudad Juárez, Tapachula, Guadalajara, Puerto Vallarta, Acapulco, Cancún, Toluca y el Distrito Federal, donde es notorio el enganchamiento de niñas y niños a este tipo de trata humana, denunció la diputada Angélica de la Peña Gómez, del Partido de la Revolución Democrática (PRD).
La presidenta de la Comisión Especial de la Niñez, Adolescencia y Familias de la Cámara de Diputados, señaló a El Sol de México que la población está indefensa ante las mafias organizadas a nivel internacional, que pueden desplazarse fácilmente porque hoy están en Cancún y mañana en Puerto Rico o Japón.
Se pronunció por el establecimiento de convenios con las distintas corporaciones policíacas a nivel internacional para hacer eficiente la persecución de estos delitos, así como plantear un marco jurídico que permita sancionar fehacientemente a los delincuentes.
La perredista manifestó que la situación económica o de pobreza, así como los usos y costumbres de la población, no son los únicos problemas que propician la trata de personas, sino también los múltiples conflictos familiares.
Refirió que hay situaciones en las que los padres casan a una de sus hijas (niñas en su mayoría) con mayores de edad, quien se las lleva y nunca más las vuelven a encontrar; así como casos donde las dan en confianza para que trabajen en la ciudad, o persigan un sueño como el de ser artistas de cine o de televisión.
Sostuvo que hay factores socioeconómicos y culturales que impulsan a los menores y adolescentes a aspirar a un estatus económico, inducido principalmente por una sociedad consumista que desea vestirse bien y tener dinero.
«Vivimos un problema multifactorial que tiene que ser considerado en lo complejo, que requiere una respuesta contundente desde el Estado, con una visión interdisciplinaria y de manera integral».
De la Peña Gómez indicó que en el problema de la trata de personas los principales afectados son los niños y niñas, atraídos a estas redes de prostitución, pornografía o turismo sexual infantil.
Resaltó que las niñas actualmente se ven afectadas por nuevas formas de servidumbre, como el trabajo doméstico, ya que son prestadas como sirvientas para cumplir una gran cantidad de horas al día, las cuales ni un adulto tendría condiciones de cumplir.
La legisladora expresó que como sociedad necesitamos tener conciencia de que todas las personas menores de 18 años, más allá de su condición social, económica, cultural, color de piel, idioma o religión, deben de ser respetadas porque son sujetos de derechos.
Finalmente, precisó que este tipo de delitos son invisibles, por lo cual no se sabe el número de infantes explotados. Agregó que se requieren acciones contundentes y precisas que den a conocer la magnitud del problema poniéndole cifras y características para determinar una resolución.